COMPLETADA
James Sirius Potter, el típico chico popular y engreído de la escuela que tiene a todas las chicas a sus pies y que tiene una vida perfecta.
Arianna Blair Marsh, la típica chica inteligente e impulsiva que siempre llama la atención aunqu...
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Narra James:
Llegué— ya cambiado y listo— a la puerta principal. Faltaban aún unos quince minutos para ir hacia allá. Pero con los nervios a flor de piel era imposible quedarme en la habitación, así que prefería quedarme simplemente pensando en todo esto. Lo que iba a suceder. A quién al fin iba a salvar. Después de tantos meses.
Al amor de mi vida, a quien tanto había extrañado, a quien quiero tener de vuelta y con quien quiero pasar el resto de mi vida.
Pero mis pensamientos se interrumpieron con un abrazo por la espalda que por su aroma pude saber que era Eleanor. Le devolví el abrazo con felicidad. Y cuando al fin nos separamos y la pude ver.
Su coleta alta tan característica en ella. Su flequillo que ya estaba largo del tanto tiempo que no se lo había cortado. La camiseta de Arianna. Y unas mallas deportivas.
Pero en el detalle que más me fijé fue en sus ojos, que estaban tan brillantes como unos diamantes.
— Hoy toda esta pesadilla se acabará— me dijo ella con una sonrisa.
— Si, es hora de salvarla— continuó Charlie que sin darme cuenta se había puesto a mi lado.
Me giré y vi que estaban ya todos lo de la organización alrededor nuestra, con una sonrisa en su rostro. Y sin pensármelo dos veces puse mi varita en mi garganta.
— Gracias por estar todos aquí. Y no se ni cuanto os puedo agradecer lo que estáis haciendo por ella. Arriesgar vuestras vidas de esta manera... solo por nosotros. Se me parte el corazón de solo pensarlo. Os agradeceré toda mi vida por intentarlo y ayudarnos a salvarla. Y espero que de algún modo pueda agradecéroslo a cada uno de vosotros, porque creedme: ni siquiera yo me arriesgaría por una persona que ni conozco.
— No hace falta que agradezcas— me contestó una chica de mi edad con un niño o niña en su tripa— esta organización es para defendernos y atacar a los mortífagos por nuestras habilidades sobrenaturales. Y aunque no la conozcamos, ella es de nuestro clan. Y quiero que mi hijo o hija tenga una gran infancia y a su tía consigo— esas últimas palabras me hicieron recordar que era la novia de Charlie y se me estrujó el corazón con solo pensar que ese podría ser mi sobrino— Así que lucharemos por ella hasta el final. Sin remordimiento.
Gritos de afirmación llenaron la sala, y una gran sonrisa se veía en mis labios. Miré a mi derecha y vi a Eleanor con lágrimas en sus mejillas y una sonrisa incluso más grande que la mía. La abracé de los hombros mientras salíamos hacia la salida con la organización detrás nuestra.
Señoras y señores es el momento que estábamos esperando.
Ya con la tristeza de la lado caminamos adonde Noah y Charlie nos guiaban. Todos estábamos en absoluto silencio, exceptuando alguna que otra conversación en susurro de algunos.
