【Competencia 】// YoonMin

26: Cercanía.

OMNISCIENTE.

Ambos volvieron a la cafetería, dándose miradas cariñosas y tímidamente rozando sus manos. Se habían confesado, pero ninguno ha obtenido el valor para preguntar si podían ser algo más. Claro hay que tomar las cosas con calma, o al menos eso piensa JiMin, quería acercarse más al pálido y crear una linda conexión entre ellos, por más cursi que sonara eso. El rubio con una gran sonrisa en su semblante volvió a la mesa de sus amigos, no sin antes despedirse de YoonGi. Miró a sus amigos y como siempre, lo miraban de una forma tan perturbadora que daba miedo.

— ¿Y~?— Cuestionó Sana impaciente, literalmente penetrando al rubio con la mirada, perturbándolo más de lo que ya estaba.

— Uh...— Dudó en contestar.— ¿Nos besamos...?— Dijo con un tono suave. Y por el amor de Dios, enserio sus tímpanos se iban a ir a la mierda por los gritos agudos de Saña y Tzuyu.

— ¡OH DIOS MÍO QUE BIEN!, ¿ya podemos organizar la boda?— Exclamó Sana emocionada.— ¡JAEBUM DAME MI DINERO!— El nombrado solo bufó pesadamente mientras sacaba su billetera. Los demás felicitaban al más bajo pero este solo carraspeó, haciendo que sus amigos le prestaran atención.

— De hecho... aún no somos nada.— Los demás abuchearon.— ¡Hey!, todavía es muy rápido, ¿no creen?

— No, ya sabíamos desde el inicio que ustedes tenían algo raro, lo presentíamos, se gustaban desde el principio.— Habló la chica de cabello gris azulado, restándole importancia al asunto.

— O sea... sí, me gusta y mucho pero, todo tiene su tiempo.— Respondió.

— Como tú quieras señor intelectual, por cierto, ¿cómo vas con la canción?, Min y tú deberían tener algo adelantado, ¿no?, el director avisó que el evento se adelantará dos meses, ya que en los demás tenemos que prepararnos mejor.— NamJoon ajustó sus lentes mientras miraba a su amigo, este solo se quedó congelado.

¡Demonios!, se le había olvidado la canción por completo... menos mal hoy era viernes, podrá trabajar en ella con YoonGi, ahí también habrá  tiempo para conocerse un poco mejor.

Por otra parte el peli azul no hacía más que jugar con su comida mientras sus demás amigos lo miraban extrañados.

— Bro, ¿estás bien?— Cuestionó HoSeok arqueando una ceja. El pálido alzó su cabeza encontrándose con las miradas confusas de sus compañeros.— ¿Qué pasó con JiMin?

— Eh...

— ¡Un momento!— Wheein se levantó de su asiento y se acercó al rostro de YoonGi, apretujando sus ojos para inspeccionar el semblante de este y el peli azul se preguntó qué carajos estaba haciendo. La chica jadeó dramáticamente.— ¡TIENES LOS LABIOS HINCHADOS!, ¡MIN YOONGI!, ¿¡QUE MIERDAS LE HICISTE AL NIÑO!?— Gritó.

— ¿Qu-...?

— Entiendo que te guste y todo, pero, ¿no crees que es muy pronto que estén haciendo ese tipo de cosas?— La cara de Min se tornó completamente roja.

— ¡WHEEIN!, ¡YO NO HE HECHO NADA!, ¡SOLO NOS BESAMOS!— Y luego comenzó a procesar lo que había dicho, enserio se había vuelto muy impulsivo, bajó su cabeza avergonzado mientras sus amigos lo molestaban.

— Así es como se saca información, chavales.— Guiñó su ojo para volver a sentarse.

— Wow YoonGi, la verdad yo nunca esperé que te fueras a enamorar de alguien que te quisiera quitar tu puesto.— Habló YugYeom comiendo de su manzana y recibiendo un codazo por parte de Jin.

— Lo que quiso decir es, ¡felicidades!, ya no eres terco.— Sonrió el peli negro y el pálido rodó los ojos.

— Bueno, yo voy donde TaeTae, los veo luego.— HoSeok se levantó y fue hasta a la mesa en donde se encontraban los demás.