Tardes Negras |Kim Seok Jin| {𝓣𝓮𝓻𝓬𝓮𝓻 𝓛𝓲𝓫𝓻𝓸}

《Destino》

Una tarde donde varias personas volvian para visitar a aquella que ya no hacia mas en este mundo. El seplucro frío y vacio cual ni siquiera albergan los restos del pequeño cuerpo que no fue encontrado, era horrible e insoportable. Llorarle a un pedazo de tierra ilogico, pero no podia hacer nada mas que aceptar la dura realidad. La castaña se arrodillo removiendo las hojas secas del otoño que cubrian el duro yeso, sin importar que sus manos se llenaran de tierra, acomodó las flores color lila sobre el florero y encendió una pequeña vela blanca..

-- Mi pequeño... -- era terrible hablar con un nudo en el corazón y tratar de no romper en llanto -- Mamá te ama con toda su alma.. -- una apagada sonrisa se formo en el rostro de ___, bajando la mirada hacia el suelo, sintiendose miserable e incapaz de soportarlo.

Una fuerte brisa calida destilo sobre el lugar, donde la muchacha hacia arrodillada reteniendo lágrimas llenas de desolación..

-- Sigo añorando dormir y no despertar nunca.. -- susurro aun con la mirada baja -- Se que es estúpido, pero por mas que lo intentó no puedo.. el pasado sigue persiguiendome y no quiere soltarme.. -- suspiró pesadamente -- ¿Que debo hacer? -- estaba segura que en cualquier momento se derrumbaria si no detenia sus amargas palabras.

Trago espesamente y se incorporó, aun con los insoportables sensaciones revolviendo su estomago y estrujando aun con mas fuerza su pechó, mordió su labio inferior.

-- Te amo.. -- sonrio con tristeza y dio la vuelta decidida a irse de ese doloroso lugar.

Sin imaginar que al voltear, sus ojos se toparían con el muchacho de hebras rojas quien sostenia un ramo de flores en su mano, dejandolo caer al ver a su linda ex esposa mientras sus ojos se cristalizaban y su corazón se aceleraba queriendo salir de su eje.

Les dolia verse de nuevo y peor tener que lidiar con los recuerdos de la vida que compartieron juntos para que al final todo haya acabado.

-- No sabia que estabas aqui -- ¿En serio?, ¿Eso fue lo primero que se le ocurrio decir?, aparte la dura expresión en el rostro de Kim Taehuyng dio a entender que no le agrado encontrarsela puesto que se abrían las heridas.

Tenia que demostrarle al peli rrojo que su vida iba por buen camino, que estaba logrando superar su divorcio, aunque su interior sintiera lo contrario.

-- No te preocupes, ya me iba -- dijo con el mismo tono que su contrario, logrando que Taehuyng creyera que lo odiaba.

La castaña reacomodo la cinta de su bolso en el hombro y camino pasando aun lado del peli rrojo, deseando huir lo mas pronto posible de él, pero como el tipico cliché de una novela, Taehuyng sostuvo de su brazo impidiendo su marcha. La extrañaba y no podia negarlo, ansío varias noches mirarla, respirar ese dulce aroma a rosas, este era el momento perfecto por que tal vez no habra otra oportunidad..

-- ¿Como has estado, que ah sido de ti? -- le dijo como excusa para retenerla un poco mas.

-- Estoy viviendo tranquilamente, tengo un trabajo y... - para Kim Taehuyng no era suficiente, queria saber si almenos lo recordaba, si lo hechaba de menos.

-- ..¿Me extrañas?.. -- quedo estupefacta ante la pregunta -- Ha pasado mucho tiempo.. Dime ___, ¿Te has detenido a pensar en mi alguna de esas noches? -- cuestiono con seriedad, acto que ofendió a ___.

-- Nos divorciamos por que asi lo decidiste, ¿Crees que extrañaria a la persona que fue injusta y no le importaron mis sentimientos? -- fue un golpe muy fuerte para los dos.

-- Sabes que fue lo mejor.. -- la chica de ojos cafes frunció el ceño seriamente por lo estupido que sono el peli rojo

-- ¿Para quien?, ¿Para ti? -- nego desconcertada, quiza su amor por ella nunca fue tan inmenso como lo juró. -- Viví secuestrada durante mucho tiempo, perdi a nuestro hijo.. y cuando volví me diste la espalda.. -- ahora se daba cuenta que si habia rencor hacia él, enojo y decepción.