YoonGi se había mantenido sumido en su euforia por el viaje, él nunca había tenido la oportunidad de volar en avión y mucho menos salir del país. Incluso había disfrutado la espera en el aeropuerto, aunque se hubiera retrasado una hora.
Cuando arribaron fue aún mejor para el pálido, los paisajes, el clima, era inigualable, más aún porque se encontraba con las personas que amaba, sus niños, su padre y JeonGguk. Por poco sus pequeños ojos se salen de su lugar cuando vio la hermosa casa de playa donde se hospedarían.
- Es bellísima, ¿no? - Su padre le dio unas palmaditas en el hombro amistosamente.
- Sí... -YoonGi concedió, encantado.- Es una lástima que tu novia no haya podido venir.
- Lo sé. Tuvo algunos problemas para conseguir el permiso en su trabajo.
Eso era muy posible de que pasara, el viaje había sido muy improvisado, ella era una buena mujer, se notaba que su padre la quería y ella a él, estaba muy agradecido, Dong prácticamente no se había relacionado con nadie después de que su madre falleció. Jun fue también un gran apoyo para el hombre después de lo sucedido con JiSung y SeokJin, se querían y eso era lo único que a YoonGi le interesaba.
- Entonces... ¿dejamos las cosas en la casa y después vamos al mar? - Preguntó alegre.
- Andando. - El hombre tomó por los hombros a su hijo y caminaron a la par para ingresar a la casa.
YoonGi sonrió al ver a JeonGguk con los mellizos, llevaba uno en cada mano, le agradaba inmensamente esa imagen.
- Realmente estas enamorado. - Dong le dio una mirada cómplice.
- Papá. - Sus mejillas se tiñeron levemente de rojo. - Trata de evitar esos comentarios cuando estemos todos juntos.
- ¿Piensan casarse? - Preguntó de repente.
- ¡Papá! - Lo miró suplicante.
- Es una duda. - Se encogió de hombros.
- Ni siquiera hemos oficializado lo que tenemos.
- ¿No son novios acaso?
- Creo, no lo sé. Somos exclusivos, pero no tenemos algún tipo de título.
- No entiendo a las parejas de hoy en día. También he escuchado sobre el poliamor*, ¿estás en eso hijo?
- No por ahora, papá. - Dijo risueño.
— Puedes decirme si lo estás. Sabes que no te juzgaré.
— Papá, ya basta. — YoonGi rió. — Mejor entremos de una vez así podremos llevar a los niños al mar.
JeonGguk, quien ya había llegado a la puerta de la casa se detuvo para mirarlos y regalarles una dulce sonrisa.
— ¿Te gusta? — El castaño le preguntó a penas estuvo a su lado.
— Me encanta.
— Quizás podríamos comprar una así en un futuro. — JeonGguk lo dijo como si aquello fuera algo normal para él.
— ¿Estas bromeando conmigo?
— ¿Por qué lo haría?
— N-no lo sé... de todas maneras, Jin y mi hermana tenían una casa en la playa.
— Podríamos vender esa e invertir en otra. Así tenemos algo nuestro, ¿no?
— Bueno, sí, pero... — La cabeza del pálido comenzó a reproducir imágenes de él y JeonGguk en un futuro, con los niños más grandes y una hermosa casa de verano. — Eso me agradaría mucho.
— A mi también, gatito. — JeonGguk acarició su mejilla dulcemente.
— Lamento interrumpirlos, tortolos. Pero los niños se están impacientando allí dentro. — Dong atrajo la atención de ambos, al parecer se olvidaron completamente de él mientras hablaban de su futuro como pareja. — Vayan, pasen tiempo con sus niños, yo me encargo de las maletas y entrentengo a tu madre, Gguk.
— Si entretienes a mi madre será suficiente, Dong.
YoonGi estuvo de acuerdo con JeonGguk para después entrar todo lo que quedaba para luego acomodarlo en sus respectivas habitaciones. No sé opuso cuando la madre de JeonGguk les dijo que tendrían que compartir habitación, ambos aceptaron en silencio sin hacer mención de nada.
— ¿Podemos ir a nadar? — Dae llegó a su lado con su traje de baño.
— Claro que sí, cielo. Solo espera a que papá y yo estemos listos.
JeonGguk sintió con satisfacción como la ola pegaba en su pecho, adoraba sumergirse en las profundas aguas del mar, ahora tenía que ser más cuidadoso ya que tenía dos niños escurridizos a los que cuidar, pero cuando no lo hacía, nadaba hasta los límites en los que se podía. Sabia que tenía que ser precavido con el agua, en menos de lo que pensabas este podría llevarte sin que te dieras cuenta.
Observó con fascinación a Dae y Saya a la orilla, a penas mojando sus pies junto con YoonGi. El peliazul se rehusó rotundamente a mojar más que sus pies, alegando que estaba helada y demás. Sabia que a YoonGi no le gustaba el agua, Dong se lo confió cuando llegaron.
Estando de regreso con su familia, se sacó el exceso de agua como si fuera un perro, mojando con pequeñas gotas a los niños y al pálido. Ellos rieron, mientras que YoonGi chillaba por la temperatura.
— ¿No quieren hacer castillos de arena? Han traído muchos juguetes para hacerlos. — YoonGi le preguntó a los niños.
Después de que los infantes aceptaran la propuesta de su padre, comenzaron a armar pequeños castillos a su alrededor, al principio con la ayuda de ellos dos, después, solos.
— Estaba pensando que tal vez deberíamos hacerle una cena a tu madre, ya sabes, una forma de agradecerle el viaje. — YoonGi comentó mientras estaban sentados en la arena.
— ¿Deberiamos?
— Vamos... ella no lo ha hecho con mala intención.
— No sé con qué intención lo ha hecho, pero pronto lo sabremos.
— No seas desconfiado. — El peliazul lo observó divertido.
— Yoon, bebé, ella no hace sus movimientos sin pensarlos, esa mujer planea cada maldita cosa. Es aterradora... cuando era un niño no podía hacer alguna travesura porque ella ya lo sabía, llegué a pensar que es una bruja.
— O tú eras muy obvio.
— De cualquier manera, tiene algo entre manos.
YoonGi sin dejar que su alegría se esfumara lo tomó por las mejillas para depositar múltiples y cortos besos en sus labios.
— Estará todo bien. — Le aseguró.
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Losing Control || KookGi
Fiksi PenggemarEl matrimonio Kim sufrió un catastrófico accidente automovilístico llevándose consigo la vida de SeokJin y JiSoo. Dejando huérfanos a los mellizos, DaeHyung y Saya. El hermanastro de JiSoo, Min YoonGi, queda a cargo de sus dos pequeños sobrinos por...