Fate Legends: Grand Order (Pausa Indeterminada)

Cap 24: Inicia la Cuenta Regresiva

//PoV Melloi//

-Rey Escarlata-

"Una singularidad como otra había nacido, de entre oscuridad, sangre y maga... Nació el, una criatura mágica creada de la locura misma de la gente, solamente como objetivo destruir, una era borrada de la historia, una historia después de los últimos días de Gilgamesh".

"Un ser completamente envuelto en sus ansías y ganas de matar, su piel roja, vistiendo con vestimentas de ese tiempo y luego con su gran conocimiento mágico y mediante en sacrificios obtuvo su armadura. La gente solo veía las atrocidades cometidas, muchos intentaron pararle los pies, pero solo eran víctimas de aquel ser que brillaba cual rojo escarlata... Su gran fuerza, su poder mágica, su inquietante sonrisa y esas cuencas iluminadas por el fuego. Todo de este ser era aterrador, tras cada muerte provocada, su poder se terminó extendiendo por el ancho y alto del mundo e inclusive se dice, el tiempo se detuvo en ese momento.

Tras su periodo en el que tuvo al mundo entre sus garras, se creó un grupo contra aquel ser y otro. La gran mayoría se postraban ante el llamándolo Rey Escarlata, para mantener a su "Rey" Feliz, sacrificaban a los que se rebelaban o a animales blancos.

Este los mataba y recolectaba la sangre de sus víctimas para adquirir poder y más poder. No paraba nunca de consumir sangre, siendo un apetito casi insaciable para alcanzar más poder por medio de la sangre de sus víctimas.

Nuevamente, guerreros poderosos intentaron enfrentarse a este ser, pero ninguno lograba ganarle.

Se diría que pasaron décadas desde lo ocurrido en ese tiempo detenido por el Rey.

El mismo ser que solo creaba caos, destrucción, muerte, dolor. Empezó a cansarse de todo, la criatura estaba aburrida y sus ganas de matar a la gente que veía ante sus pies era cada vez más y más fuerte.

Sensaciones fuertes de matar y asesinar. Ganas de genocidio por todo el mundo, un sinfín de voces que solo deseaban que este matara, matar, matar, una y otra vez hasta que finalmente saciara sus ganas tras tanta muerte.

Pero esas ganas de matar, fueron opacadas con la llegada de nueve damas, no sabía lo que era pues solo conocía las ganas de matar y matar sin parar.

El Rey Escarlata por primera vez sentía como esas ganas asesinas se iban, pasaron los días, las semanas, meses, el tiempo pasaba solamente ante aquel ser cuyas ganas de matar desaparecieron por una extraña razón.

Sentía que la razón era debido a las mujeres que observo hacía tiempo atrás, inclusive tras ello el ya no buscaba sangre ni sacrificios e inclusive termino perdonando a dos rebeldes.

La criatura escarlata pensaba que si no hacía nada contra eso. Se volvería débil, por lo que decidió en ir a eliminar a las nueve damas saliendo de su trono. Un trono hecho de carne, huesos y músculos humanos.

Para no levantar sospecha, se hizo un corte del cual. Sangre broto formando a otro ser igual a él en imagen y semejanza. Este al salir de su trono, cobro una forma humana.

A diferencia de todos en su entorno, el resaltaba. Ojos y pelo como la sangre, piel pálida y sus ropajes negros, el rey solo tenía un nuevo objetivo, matar a las nueve damas que le llamaron la atención y así mismo poder eliminar esa sensación para comenzar su genocidio... Tardo días, no encontraba a ninguna de las mujeres y cada vez que molestaba a alguien sus ganas de matar no aparecían.

En lugar de ello, solo podía sentir... Compasión, pena y otras emociones a la humanidad, la misma a la cual llego a solamente sentir nada más que satisfacción al matar y oír sus gritos de dolor. Pero ahora, ni esa sensación de matar tenía.