El mundo del DO~ Flamantha

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Narra Samantha

Me desperté pronto para ser domingo había dormido de maravilla, ayer antes de acostarme Anaju me recordó que me pusiera el termómetro y ya no tenía fiebre. Me fui en dirección a la cocina y decidí hacer crepes de chocolate para desayunar, quería darles las gracias a las chicas por cuidar de mí estos días.

-Que bien huele- dice Anaju detrás mío haciendo que me asustara.

-Joder Ana Julieta siempre lo mismo- le dije riendome- A ver si dejas de asustarme de buena mañana, y lo que huele tan bien son los crepes que he hecho para que desayunemos.

-¿Has dicho crepes?- dijo Mai

-Sí, de chocolate con café recién hecho- dije poniendo las cosas encima de la mesa- Venga todas a desayunar.

-Joder que buenos están los crepes Sam- dijo Mai.

-Ya ves, no hacía falta Samantha- dijo Anaju.

-Si que hacía falta, es una manera de daros las gracias por haberme tratado tan bien y haberme cuidado estos días- les dije dándole un sorbo al café.

Acabamos de desayunar y recogimos la mesa entre las tres, y me volví a poner el termómetro ni un rastro de fiebre.

-Ha llegado un mensaje de Jesús. Dice que en una hora en el bar de siempre- dijo Mai

-Bueno pues yo me voy a duchar- dijo Anaju- ¿Sam te quieres duchar primera?

-No tranquila me voy a fumar un cigarro. Luego ya entro yo a la ducha.

Me senté en el balcón y saque mi móvil del bolsillo. Me encantaba sentarme en el balcón podría decir que era mi sitio favorito de todo el piso, el ver a la gente pasando por la calle, el aire y sentirme en paz conmigo misma. Cuando de repente mis pensamientos fueron interrumpidos por el sonido de mi teléfono, era un mensaje de Flavio.

Flavio

Buenos días Samanzi, ¿cómo te encuentras hoy?

Una sonrisa salió de mi cara y no tenía ninguna necesidad de ocultarla, me quedé mirando el móvil sin saber bien bien qué responderle. Así que escribí lo primero que me vino a la mente.

Buenos días Fla, no tengo ni rastro de fiebre. Nos vemos en un rato.

Gracias por preocuparte guapito.

Me acabé el cigarro y al entrar vi como Anaju salía del baño y me dejaba la puerta abierta. Me metí en mi habitación, cogí una falda, un top, una tejana y unas bambas. Y me fui en dirección al baño, me metí bajo la ducha y me quedé ahí unos quince minutos. Salí de la ducha y me cambié en el lavabo me puse la raya al lado y me deje el pelo sin secar, me maquille un poco y me fui en dirección al sofá.

-¡Chicas yo ya estoy!- les chille

-No hace falta que grites Sam ya estamos- dijo Anaju riéndose.

Cerramos la puerta detrás de nosotras y nos dirigimos en dirección al bar, según me estaban contando por el camino Mai y Anaju era un bar donde solían quedar ellos muchas tardes.

-No os da intriga conocer al amigo de Jesús- dijo Mai.

-Me apetece conocer a gente nueva- le dije yo con una sonrisa.

Llegamos al bar y solamente estaba Hugo, Nia, Bruno y Eva.

-¿Como estas Sam?- me dijo Hugo al verme.

-De puta madre- le respondí riéndome- No te dije que para el lunes estaría bien.

-Bueno nos alegramos que te encuentres mejor- me dijo Eva