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Narra Samantha

No se por que había hecho eso, no se por que me acerque a él y me despedí de esa manera. Notaba que él estaba incómodo con la chica que estaba dandodole vueltas alrededor todo el día. Cuando me despedí de él y me fui con una sonrisa y para llamar mi atención hizo un grave que consiguió lo que me girara y le gritara un gilipollas mientras no podía ocultar mi sonrisa.

-Veo que ya os lleváis mejor- dijo Anaju camino a casa.

-Bueno, nos sentamos juntos en clase y es compañero de Mai de canción. Así que llevarnos bien es lo mejor- le explique

-Claro que si, todo es mejor si nos llevamos bien. Y Flavio es un amor de chico- dijo Mai sonriendo

-¿Y tu con Hugo,cómo lo llevas?- le pregunté a Anaju.

-Bueno pues como siempre, él se hace el tonto y yo lo sigo como una tonta.

-Bueno no te preocupes, ya se dará cuenta de lo que tiene y si no pues ya llegara alguien- le respondí

Seguimos camino a casa hablando de lo que haríamos para comer y acabamos por decidir que haríamos pure y un poco de lomo, ya que Anaju se tenía que ir a ensayar y Flavio llegaría a casa pronto. Hugo y yo hoy no ensayabamos ya que lo llevábamos bastante bien, así que hoy me iba a quedar en casa intentando componer algo. Las chicas y yo comimos mientras veíamos Friends y hablábamos de nuestras canciones y de las cosas que nos gustaban, Anaju se ducho y se fue en dirección a casa de Gèrard. Yo me metí en mi habitación y me cambié de ropa, me puse un pantalón corto de chándal y una camiseta de tirantes para estar lo más cómoda en casa y me senté en el sofá con la guitarra haber si me venía la inspiración.

-Sam me voy a duchar, si llama Flavio abrele- me dijo sonriendo

-Vale tranquila Mai.

Empecé a tocar un par de acordes de la guitarra, y una frase salió de mi boca sin pensarlo "Tres días más y me pierdo. Tres besos más y te quiero" y de golpe llamaron a la puerta, me levante y ahí estaba Flavio.

-Hola Sam- me dijo con una sonrisa.

-Hola Fla, pasa - le dije apartandome de la puerta- Mai se está duchando no creo que le quede mucho, siéntate si quieres- le dije mientras me sentaba en el sofá.

-¿Estabas tocando algo?- me pregunto mirando la guitarra

-No, estaba intentando componer algo, pero me da la sensación de que estoy poco inspirada- le dije con una sonrisa tímida.

-Bueno a veces cuando menos lo esperas, es cuando viene toda la inspiración, como en la vida.

-Ojalá sea así y tengas razón Flavio.

-¿Me cantas algo?- me dijo acercándose a mi.

-Si no recuerdo mal tu ya me has escuchado cantar, creo que al que le tocaría ahora sería a ti- le dije mirándolo desafiante.

-Hay tienes razón, me puedes dejar la guitarra- me pidió y yo se la alcance con la mano.

Y este empezó a tocar That's Life y poco a poco su voz fue acompañando la guitarra y ahí estaba yo delante de él perdidamente perdida en su voz. Tocaba la guitarra con ganas y su voz salía como si estuviera compuesta para él. Cuando acabó la canción ninguno de los decía nada, nos habíamos quedado los dos mirándonos, poco a poco nos fuimos acercando y...

-¡Flavio! Ya estoy- gritó Mai saliendo de su habitación, haciendo que nosotros dos nos separamos.

-Ya voy- dijo Flavio levantándose del sofá y yéndose a la habitación de Mai- Adiós rubia- me dijo guiñandome el ojo.

El mundo del DO~ FlamanthaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora