Una Híbrida Especial [Terminada]

Extra» Final

Narra Edward:

Llevar seis meses junto a Janis era increíble aunque sólo fuéramos amigos, ninguno de los dos quería arruinar las cosas con apresuró innecesarios, aun recuerdo el día en que la ví por primera vez, patética mente nuestro reencuentro fue igual, esta vez si me quito de su lugar al día siguiente y pues muchas cosas cambiaron, ella seguía siendo la persona más amable, más amistosa y sobre todo era la dueña de mi corazón cosa que era extrañamente estúpido dado a que mi corazón no latía pero algo era seguro, este si le pertenecía, escuchar la voz de Tony llamarme me saco de mis pensamientos, lo mire y este negaba con la cabeza mientras una sonrisa se asomaba en sus labios.

— Mamá me dijo que te diera esto.
Me extendió un cuaderno y lo tome.

— ¿Sabes si ella ira al Departamento?.
Él asintió.

— Aun sigue siendo incómodo ser su cupido.
Bromeó un poco.

— Algún día estaremos nuevamente juntos, ya lo veras.
Él alzó una ceja incrédulo, se levantó y salió del aula, guarde mis cosas y me dirigí a mi siguiente clase, al llegar ya estaban ahí Leah, Harry, Malory, Lizzy y Elena.

— ¿Papa me pasas la tarea?.
Mire mal a Lizzy y esta puso un puchero.

— No es mi culpa que no la hayas hecho.
Dije, ella me fulminó con la mirada y de cruzó de brazos, rode los ojos y fui a mi lugar.

— Que mal educaste a Lizzy, es muy irresponsable.
Me dijo Leah y respire profundo.

— No es mi culpa que su abuelo la haya malcriado y se haya hecho irresponsable en estos siglos.
Le dije y Lizzy negó.

— No tiene la culpa, además mamá tampoco hizo la tarea.
Abri los ojos más y Janis venía entrando.

— ¿Edward me pasas la tarea?, por favor.
Me dijo y sus pire derogado, saque mi cuaderno y Lizzy lo tomó al instante, Janis se sentó junto a ella para copiarla.

— Yo si te creo lo de Aro.
Dijo Leah en un susurro.

— Al menos tu lo crees.
Le dije y en tan solo 5 minutos los demás alumnos entraron, la clase comenzó, al terminar todas las clases me dispuesta a buscar con la mirada a Janis, cuando la encontré me acerque a ella.

— ¿Te acompaño?.
Ella me miro y sonrió.

— Si quieres pero te advierto, tendrás que ayudarme a limpiar.
Le asentimiento medio dudoso, al llegar al Departamento todos los recuerdos me llegaron de golpe, entramos y todo allí seguía igual.

— Deja tu mochila en el sillón.
Me dijo apuntando a este.

— Janis.
Ella me miro fijamente.

— Ya a pasado tiempo desde que nos volvimos a ver y se que quedamos como amigos pero yo en ver...
Solo pude sentir sus labios presionando los míos, ella comenzó a moverlos y no tarde en reaccionar y seguirle el ritmo, nos separamos un poco y nos miramos fijamente a los ojos.

— Si fuera por mi no me importaría ser tu amiga con derechos.
Le Sonreí y negué.

— No, no sólo quiero ser tu amigo, Janis te amo y se que tu sientes lo mismo, ¿Janis Vulturi, me harías el honor de ser mi novia?.
Ella negó y eso me desánimo.

— Eso fue tan cursi.
Comentó.

— Y si, si Edward, si quiero ser tu novia.
La bese y cargue, ella enredo sus piernas en mi cintura.

— Eso si, no habrá sexo hasta que nos casamos.
Dijo separándose, le asenti y me beso.

— ¿Te casarías conmigo?.
Pregunte y ella negó.

— No, pero tal vez dentro de unos años te diga que si, además aún tengo muchas cosas en mente y quiero terminar aunque sea una carrera de Universidad por primera vez.
Le asenti y ella bajo, miro a los lados y bufo.

— Tu limpias aquí, la cocina y el comedor, yo me encargo de las habitaciones y baños.
Dijo y le asenti, si esto me esperaba cuando por fin ví viéramos juntos de nuevo y como marido y mujer, adelante, sería el más feliz sólo por estar con ella.