MIA, ERES MÍA

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—¿¡En qué narices pensabas!?

—No lo sé, Erik.

Erik se mueve de un lado a otro.

—¿¡No lo sabes!? —parece que la habitación tiembla— ¡Estás llena de sangre!

—Le supliqué a Erika que no lo hiciera. Dijo que... lo ha hecho porque... porque dijo que... que tenía que darle su merecido a un violador... y que... que ambas estábamos allí... y que... Erik.

—¡Le habéis mutilado! ¡Habéis mutilado a un hombre!

—Yo no he sido, se lo supliqué e intenté salvar a Dominik —balbuceo—. Joder, lo intenté aunque no dejó la oportunidad de pegarme aunque se desangraba.

—Amelia Dagger —dice con tono serio— ¿Te das cuenta de lo que has hecho? tu no sujetabas las tijeras pero... deberíamos haberlo hablado.

—¿¡Hablado!? ¡Jamás me hubieras apoyado en hacerle daño a Dominik!

—Mia —se acerca a mi—. Quiero que ese hijo de puta pague por todo lo que te ha hecho, pero no así.

—¿Crees de verdad que algún día iba a pagar? Erika estaba llena de marcas, estaba herida, en cuanto entré en la habitación quería huir, pero... Erika no me dejó —ahora se decide por no hablar—. Quise ayudar a Dominik, te lo juro, pero ella me amenazaba. No iba a hacerme daño pero...

—¡Ya lo sé! Erika lo grabó todo, lo subió a la nube y lo mandó a algunos contactos.

—¿Contactos? dios mío ¿Se me ve?

—Claro que se te ve.

—¿A la prensa? ha llegado ¿Ha llegado a la prensa?

—No, por suerte la mayoría de los contactos son... gente importante, pero no tan estúpidos como para enviarlo a la prensa y que se vean involucrados en todo esto, es más, pagan para que nada de esto salga a la luz.

—¿Dónde está Erika?

—Declarando, y ahora vas tu. Vas a decir la verdad, fuiste para vengarte de él, pero no querías, quisiste irte y no te dejó. Es lo que está en el vídeo. Te acusarán por allanamiento de morada, eso si Dominik presenta una denuncia, que lo hará.

—¿Qué pasará con Erika?

—Mia, preocúpate de ti, no de ella. Basta.

—Erika solo...

—Erika me traicionó —me recuerda con reproche—, y ahora tú estás a punto de ir a la cárcel por su culpa.

—No, Dominik la drogó, te lo he dicho.

Declaro, me escuchan y nada más. Soy la segunda en declarar, Dominik en el hospital sin saber que será de su... y Erika de camino al centro psiquiátrico, estoy segura. Esa mujer me apena, no quiero que le pase nada... no sé porque, no tengo ni idea de porque no puedo dejar de sentir pena por ella, apenas la conozco.

Lo peor es que Erik no me mira y me responde con monosílabos fríos.

***

Me ducho. Al bajar Erik y yo cenamos en silencio y ni me mira. Pero tampoco tengo ganas de hablar, sé que está enfadado conmigo y sé que esto puede tener muchísimas consecuencias.

—Será mejor que hoy durmamos separados —comenta dando un sorbo a la copa de vino.

He hecho lo que he hecho, o intentado, o pensado... Incluso Erik es más humano que yo ante Dominik ¿Qué pensará ahora? No me extrañaría que no quisiera casarse conmigo ¿Quién se casaría con una psicópata?