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Los dos amantes entraron entre fogosos besos a la casa del otro, sus manos acariciaban todo el cuerpo del contrario, Daniel posó sus manos en la cintura de Alejandro para acercarlo aun mas hacia si mientras lo besaba fogosamente, comenzando poco a poco a quitarse la ropa, sin importar en donde caia, sin paciencia alguna se separaron viéndose fijamente, para luego dirigirse apresuradamente al cuarto de Daniel que se encontraba en el segundo piso, entraron y sin mas Daniel empujó a su novio contra cama, posandose encima de el y seguir besándolo. 

El cuarto a oscuras era difícil de visibilizar que se encontraba ahí cerca a ellos, pero no hacia falta verse, la sensación de sentirse uno al otro era más que suficiente, sentir el suave toque que viajaban por los muslos del más pequeño y sentir como era Daniel quien estaba sobre el se frotaba suavemente contra el, besándose un poco mas y sonriendo sus respiraciones crecer más y más y hacerse mas pesada, Daniel se alejó de el prendiendo la lampara de la mesa de noche en busca de un preservativo que se encontraba en el cajón, lo tomó y lo abrió sin mas pensarlo, colocandoselo  y tocándose una vez mas antes de dirigirse hacia Alejandro que yacía sonrojado sobre el colchón.

Una vez se encontraba de nuevo sobre Alejandro, introdujo su miembro, escuchando un suave suspiro de placer por parte del otro y asi fue como Daniel empezo con un lento vaiven de caderas, introduciendose y saliendo lentamente, mientras escuchaba los suaves suspiros y gemidos de su amante. Mientras sentia cada vez mas como el tan esperado climaz estaba por venir, ambos no sabian que la luz de la lampara de la mesita hacia que sus sombras sean visibles hacia afuera, ambos no sabian que afuera estaba Talia observando todo aquello, sin saber que hacer ni que pensar estaba completamente ida, sus emociones se encontraban bloqueadas, simplemente estaba ahí observando, preguntadose que debía hacer.

¿Iría hasta la casa a interrumpir y descubrirlos ese mismo instante?

¿Valía realmente la pena?

¿O esperar a que sea Daniel quien le diga toda la verdad?

Porque era claro que eso ya llevaba tiempo y de haber sido la tercera opción, hace ya un rato Daniel le hubiese contado todo lo que sucedía a sus espaldas, sin embargo se está callando, aun así el hecho de tener la leve esperanza que el sea quien se sincere y no le siga viendo la cara estaba ahi, asi que sin mas opto por esperar a que Daniel le contase, quería ver hasta donde era capaz llegar su mentira y que tanto estaba dispuesta Talía a aguantar para llegar a saber la verdad.

Fue entonces cuando Talía a punto de irse con el nudo en la garganta, una idea llegó a su mente, mas bien, una persona, Abigail, seguramente ella sabia de todo esto, sin embargo sacarle la información seria bastante difícil, pues una que otra vez habían cruzado palabras y no era con quien se llevase mucho, sin embargo un riesgo que debía correr. Así que mientras caminaba a tomar un taxi para irse a su casa, con las manos temblorosas debido a los nervios y el conjunto de todas las emociones que sentía ese momento, buscó el nombre de Abigail para escribirle y saber de una vez por todas la verdad.


"Hola Abigail, soy Talía, la novia de Daniel, ¿puedo hacerte una pregunta?"

Visto

"Hola, claro dime"

"¿Daniel esta saliendo con otra persona?" 

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