Digimon La Guerra De Los Dos Mundos

Capítulo 4: La Evolución De Greymon

Había llegado el domingo por la noche y David se encontraba recostado en la cama con su guitarra en sus manos.

-Eso suena muy bien.-Elogió Agumon a David al oír esos acordes.-¿Quién te enseñó a tocar así?-Le preguntó mientras veía como su compañero humano miraba fijamente la guitarra.

-Fue mi abuelo.-Le contestó con una sonrisa, mientras recordaba cómo su abuelo le enseñaba cuando era pequeño.

Pero no pudieron seguir hablando por qué la madre de David llamó a la puerta, con lo que Agumon saltó rápidamente a esconderse en el armario, antes de que la madre de su compañero entrará.

-Es hora de que te vayas a la cama.-Le avisó, antes de ver la guitarra entre las piernas de su hijo.-Hacía tiempo que no te veía así.-Le comentó con una sonrisa al fijarse también en el cuaderno que tenía en la cama.

-Tienes razón.-Aceptó antes de levantarse y guardar la guitarra y el cuaderno.

-Sabes, se te veía cómodo el otro día en el escenario.-Le avisó su madre, mientras veía como guardaba las cosas.

-Gracias mamá, por apoyarme en todo.-Le agradeció David antes de darle un beso a su madre y meterse en la cama.

-Siempre.-Le aseguro, mientras veía como se tapaba.

Una vez que David ya estaba en la cama, su madre apagó la luz y se fue, entonces David se pudo fijar en como Agumon se acercó a la cama y se metió en ella, para dormir con su compañero. A altas horas de la noche David empezó a tener un sueño parecido al de la otra vez.

-¿Espero que tengas mejores noticias que la otra vez?-Le preguntó una voz femenina.

-La conquista del mundo digital marcha bien, ya hemos conquistado casi la mitad, y destruido a dos de los caballeros.-Informó el hombre enmascarado, el cual estaba de rodillas.

-¿Y los niños elegidos?-Preguntó otra voz.

-No son una amenaza, solo son seis humanos.-Contestó.

-No te confíes ellos pueden hacer la diferencia.-Le avisó la misma voz que le había preguntado.

Pero no se despertó rápidamente al sentir como alguien le movía, al abrir los ojos e incorporarse pudo ver como Agumon le movía.

-¿Qué sucede?-Le preguntó el Digimon en un susurro.

-No pasa nada, tranquilo vuelve a dormir.-Le aseguro el joven humano.

Aunque Agumon no le creyó del todo, hizo lo que le dijo y se volvió a tumbar, y así ambos volvieron a dormirse. A la mañana siguiente David se levantó temprano y antes de que su madre o padre fuesen avisarle para que bajase, se cambió y metió a Agumon en su D-Power, con lo que después de desayunar se fue a la escuela acompañado por su hermana, con lo que al llegar a la escuela Desi se fue con sus amigas y David se reunió con Mario.

-¿Y bien que sucedió el viernes cuando me fui?-Le preguntó Mario después de saludarle.

-No pasó nada.-Contestó David mientras iban hacia clase, pero al ver la cara de su amigo le tuvo que contar lo que ocurrió.-Fuimos juntos hasta mí casa para dejar a Desi, y después la acompañe hasta su casa.-Le explicó.

-¿Y solo paso eso?-Le volvió a preguntar, mientras andaban por el pasillo rumbo hacia su clase.

-¿Qué más quieres que pase?-Le devolvió la pregunta, antes de escuchar como le llamaban.

-Vega.-Le llamo una voz.

Con lo que al girarse David pudo ver que se trataba de Yako.

-¿Qué quieres Yako?-Le preguntó al verle acercarse hacia él.