Creepyland II (TERMINADO)

Descubiertos

Narradora

Frotando su ojo con su puño mientras bostezaba, Migue bajó hacia la cocina, había escuchado ruido desde hacía un buen rato así que decidió que era una buena idea levantarse de una vez, por primera vez en un buen tiempo había visto el sol colarse por su ventana, indicándole que ya la época de lluvias y frio se estaba quedando atrás para dar paso al sol de nuevo. Entró a la cocina encontrándose con su novia, a Alice y a Hellen preparando la comida, se acercó por detrás y abrazó a Pinkie por la cintura.

-Buenos días amor- besó su mejilla.

-Hola, ¿Dormiste bien?- preguntó la peli-rosa soltando una risita.

-Volví a sentir calor cuando me levante así que si, dormí bien- el castaño miró a la mayor cuando esta intentaba levantar una olla del suelo –Alice te ayudo con eso- se acercó rápidamente y levantó la olla –No creo que deberías hacer estar haciendo esfuerzo Alice-

-Estoy bien Migue, solo era tomar esa olla- esta le sonrió.

-No es por echarte pero creo que deberías ir a sentarte, nosotros nos ocuparemos aquí- se acercó a dejar una sartén caliente al fregadero para lavarla después.

-No estoy invalida niño, solo tengo un bebé en mi vientre, eso es todo- puso sus manos en sus caderas mirándolo con su ceño fruncido, desde que les dijo que estaba embarazada no la dejaban hacer muchas cosas y aunque se los agradecía no podía evitar sentirse como una carga.

-No intentes quitarle la idea de la cabeza Migue, ya lo intentamos nosotros y es inútil- Hellen entró a la cocina y tomó un plato con pan, huevos y jamón para después ir al comedor.

-Em... Migue... lleva esto por favor, es para Jack- Pinkie rápidamente la dio una plato a su novio quien miraba algo sorprendido a Alice por su reacción.

-Bien...- dijo y algo temeroso caminó al lado de la castaña, a veces la mirada de ella daba miedo, miró hacia el plato y su cara hiso una expresión de asco puro -¡Agh! Jack no entiendo cómo puedes comer esto, es repugnante- le dejó el plato en frente del nombrado.

-Es algo que todos tienen, si fuera algo de dudosa procedencia si lo pensaría dos veces- dijo tomando su tenedor y partiendo un trozo del riñón que había en su palto para meterlo en su boca.

-Qué asco, enserio- Miró a uno de los mayores –Masky tu novia me da miedo enojada normalmente, pero ahora embarazada siento que tiene al mismo demonio dentro- dijo el castaño ganándose una mirada molesta de este.

-No digas eso, es normal según lo que tengo entendido. Ya quiero ver cómo te pondrás cuando Pinkie este en la misma situación- sonrió con malicia.

Al instante las mejillas de Migue se encendieron, a diferencia de su hermana él no era tan inocente y tampoco mentiría con que ha pensado mucho en dar ese paso con su novia pero simplemente le da miedo lastimarla, pues ninguno de los dos ha hecho cosas de ese tipo antes. Sin decir nada se retiró y volvió a la cocina, en donde fue recibido con un golpe en la cabeza.