"Bienvenido a los Santos" fue lo primero que ambos leyeron tras un par de horas de viaje; finalmente estaban ahi, ese sitio donde empezarían de nuevo, lejos de toda la mierda.
Si bien sabían que los primeros días iban a ser caóticos nunca esperaron que tanto, nada más pisar pavimento habían comenzado con una liada tras otra; aún así no se quejaban, esta vida era más divertida que la que tenían en los que una vez fueron sus hogares. Ahora vagaban libres por las calles, haciendo de las suyas por un par de risas, tenían el trabajo de buzos que si bien no era un sueño pagaba el alquiler de su piso y su comida, no se podían quejar, pero querían más; para el mes y medio que llevaban en la ciudad ya habían presenciado bastantes veces el trabajo de policía, ambos coincidían que si ser policía en cualquier ciudad ya era bueno, en los Santos debía ser una aventura de la hostia, ya que en este lugar nunca sabias que iba a suceder. Esa noche en la cena ambos hablaron de tema, querían ser más que buzos; debían aprovechar que aquí nadie les conocía y por lo tanto no podrían negarles la oportunidad de hacer oposiciones por la gilipollez de ser omegas.
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¡Si, superintendente!
Fiksi PenggemarLos santos; la ciudad más problemática del país. -Esta puta ciudad está en pie por nosotros ¿tú crees? Mariconetti que tienes los cojones para ser madero-. -Pues claro que la tenemos-. -Eso ya lo veremos muñecas-. ¿Que probabilidad hay de que ellos...
