-Espera, espera… ¿De verdad tenemos que subir a esa cosa?- la cara de Soorim se volvió algo pálida.
-Si quieres esquíar, sí- contestó el hombre que trabajaba como seguridad.
-¿Qué pasa? ¿Tienes miedo a las alturas?- preguntó Seungsik. Para llegar al tramo que Soorim quería esquíar, los cinco deban subir a una telesilla que los transportaría hasta allí.
-¿Yo, miedo a las alturas? ¡Claro que no!- fingió.
-Bien, entonces… Sólo pueden subir tres personas por telesilla y los niños no pueden ir solos.
Soorim quería morir. Tenía pánico a las alturas, pero no podía enseñarle su lado cobarde a Seungsik. Su cuerpo entero temblaba, y tener que estar sola con un niño volando en una telesilla, lo hacía peor. No podía estar con Seungsik, si fuese así, al menos sería reconfortante. Si iba con Subin o Sejun, ellos se burlarían de ella por su temor a las alturas. Yohan, según Hyejin, era el más tranquilo y amable de los trillizos. Quizás no ayudaría mucho a calmarla, pero era probable que no se burlaría de ella como sus hermanos… O como su tío Seungyoun.
-Que bueno que Seungyoun no esté aquí- murmuró entre dientes.
-¿Dijiste algo?- preguntó Seungsik.
-Que entonces yo iré con Yohan- sonrió tomando la mano del niño.
-Bueno… Está bien- el niño puso una mirada algo triste porque él quería estar con su tío.
-Ustedes siguen- dijo el empleado cuando la telesilla llegó. Seungsik, Subin y Sejun subieron primero, dejando atrás a Soorim y Yohan.
-Soorim, te ves enferma- comentó el niño mirando la cara de la adulta.
-Estoy bien- contestó sin mirarlo.
-No lo pareces- comentó el niño.
-Yohan, elegí ir contigo porque pensé que no te burlarías de mí- le admitió al niño.
-¿Tienes miedo?
-Mucho- confesó.
-Es su turno, señorita- dijo el empleado cuando llegó la telesilla.
-Bueno… Entonces puedes tomar mi mano- el dulce niño ofreció su pequeña y pálida mano para que Soorim la tomara. La chica no lo dudó, y cuando llegó la telesilla, tomó fuertemente la mano de Yohan. La cual comenzó a apretar cuando comenzaron a subir.
-Soorim, ¿ya puedes soltar mi mano?- pidió el niño de siete años, viendo cómo la adulta a su lado cerraba sus ojos con fuerza.
-Déjame sostenerte hasta que lleguemos, ¿sí?- rogó sin abrir sus ojos.
-Sé que te dije que podías tomar mi mano, pero me aprietas muy fuerte. Siento que mis dedos se van a partir- se quejó.
-Lo siento- Soorim aflojó su agarre pero no soltó la mano del niño.
-¿Por qué subiste si estabas tan asustada?
-No quería quedar mal frente a Seungsik- confesó, luego recordando que Yohan era sólo un niño. -No lo entenderías.
-Bueno, pero Seungsik no es como tío Seungyoun. Él no se va a burlar de tí.
-Es más que eso. Pero tienes razón, Seungyoun se burlaría de mí si estuviera aquí, lo que me hace pensar que es bueno que no esté aquí.
-Pero tío Seungyoun es muy divertido.
-¿Divertido?- Soorim finalmente abrió sus ojos para mirar al niño, y luego reír forzosamente. -Sí, claro... ¡Oh, malditasea estamos muy alto!
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¿Cómo Ser Un Padre Otra Vez?
FanfictionDespués del nacimiento de su quinto hijo, Han Seungwoo queda completamente a cargo de sus cinco hijos después de que su esposa se fuera sin dar ninguna explicación. Con un trabajo que toma casi todo su tiempo, trillizos de seis años, un niño de dos...