Ni siquiera el trabajo me hizo distraerme de toda la ira acumulada que tengo, trabajé media hora antes de darme cuenta de que no podía concentrarme y eso me lleva a dar vueltas por mi oficina, estoy segura de que mis tacones se escuchan hasta la habitación de Blake y me sorprende que aún no venga a pelear, debe estar molesto conmigo por querer que sea feliz, de todos modos, en esta casa son unos mal agradecidos.
—¿Cariño?
—Adelante.
Jack abre la puerta y sonríe al entrar.
—Abajo hay un ajetreo impresionante.
Veo que lleva un ramo de rosas rojas y me hace sentir tristeza ya que Jack sabe que las odio, es evidente que no son para mí.
—Por favor dime que serás mi pareja esta noche.
Pone su ramo en el sillón y se acerca a mí.
—Sabes que me encantaría —me toma por las caderas—, pero me tomó por sorpresa, siempre se organiza después de tu cumpleaños.
—Es una bomba de guerra —lo miro a los ojos— ¿Que otra ocupación tienes? —le cambio el tema.
—Le prometí a Trish que iría con ella a la cosa del programa.
No puedo creer otra de sus palabras, me es imposible creer que irá únicamente a ser amigo de Trish Young.
—La cosa del programa —repito sus palabras— ¿Eso es lo mejor que pudiste inventar?
—Abby...
Quito sus manos de mis caderas y me alejo de él.
—Rosas que evidentemente no son para mí —señalo el ramo—, la cosa del programa —hago comillas y comienzo a levantar la voz—. Eres un cretino mentiroso.
—Te estoy diciendo la verdad —ahora él levanta la voz—, sabes que Trish también trabaja en el show y las rosas eran para felicitarla por conseguir un ascenso, pero si tanto te molestan te las dejo aquí.
—Sabes que odio las rosas rojas.
—Tu odias todo, Abigail —empieza a molestarse—. Si hay algo que te moleste no descargues tu ira contra mí.
—Mi padre me mintió y traicionó, Jackson, y tu ni siquiera me has preguntado cómo estoy o si tengo otro trabajo.
—Es que no entiendo porque te aferras tanto a esto —intenta volver a acercarse, pero yo me alejo—, no necesitas de ninguna empresa para vivir cómoda el resto de tu vida, ni siquiera necesitas un maldito empleo.
Me río de sus palabras, Jack jamás ha aceptado que soy la más exitosa de ambos y constantemente intenta eclipsarme o convencerme de ser solamente su novia, su sombra.
—Tu conoces bien el concepto de mediocridad.
—La gente conoce mi nombre —sé que intenta atacarme—, más que el de mi padre, yo ya soy poderoso y no solo por mi apellido.
—Lárgate —murmuro, pero al ver que no lo hace grito— ¡Lárgate!
Jack se acerca a la puerta dispuesto a irse, pero estoy tan molesta que le lanzo el ramo de rosas que lamentablemente solo consigue golpear la puerta.
No sé si me molesta más que Jackson sea un machista mediocre o que vaya camino a verse con Trish Young, Jackson es famoso por engañar a su novia y antes me daba igual porque sabía que eran sólo la diversión que yo no le daba porque no tenía tiempo, pero esta vez es diferente, esta vez involucra a Trish Young y eso sí que son sentimientos reales. Tal vez se me dificulte decir que amo a Jack en voz alta, pero lo amo, lo amo tanto que me es difícil aceptarlo porque en el momento en que lo acepte seré la cornuda de Seattle, la novia que perdona todo.
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Todos Los Días De Mi Vida
Ficção AdolescenteEstar con Abby era como tomar café y Shawn odiaba el café.