-Estaba frente a mi te lo juro- dijo San sacudiendole los hombros a Wooyoung.
-Ya tranquilo- río- Sabes que te creo todo- lo beso- Ya no tengas miedo, ahora estás conmigo.
-Si pero si tu hubieras estado allí, saldrías llorado- lo miro.
-Ya se- rió.
-Ya te aprendiste tu parte?
-Casi- agarró su papel cual llevaba escrita la canción que había creado Hongjoong- Tu?
-Si.
Horas después de mucha práctica Hongjoong los llamó.
-Bien qué tal si San empieza- dijo Chanyeol.
San asintió y se paró para luego entrar al estudio.
Estos reían y se divertían mientras cada uno cantaba su parte,también quedando un poco impresionados por cómo cantaban a la vez.
Horas habían pasado y habían terminado de grabar la canción.
Hongjoong estaba más feliz que nunca y le agradeció a Chanyeol por ayudarlo.-Ahora voy empezar a rapear cuando mate a alguien- soltó Hongjoong.
-Buena idea- dijo Mingi.
-Gracias a todos por grabar la canción que escribí conmigo, cantaron muy bien, y enserio me impresionastes tu- señaló a Jongho.
-Jongho canta hermoso- dijo Wooyoung.
-Tu también cantas hermoso- dijo San abrazándolo por atrás.
-Pero solo tuve como dos líneas- río.
-Yo igual- soltó Yeosang.
-Hey hey en un futuro crearemos más canciones con más líneas para ustedes- dijo Hongjoong- Ahora solo nos falta algo.
-La coreografíaaaa- San se empezó a mover.
-SIIII- todos dijeron.
-Pero ahora a matar al imbecil- soltó.
Todos se alistaron y salieron de la casa para ir tras otro de sus enemigos.
-Donde es el lugar?- preguntó Seonghwa.
-En el mismo de la semana pasada.
-Ah si?...pues me bajo aquí- agarró la mano de Yunho y abrió la puerta.
-Puta madre Mingi cierra la maldita puerta, era broma- dijo Hongjoong frenando al instante.
San y Wooyoung empezaron a reír al igual que los demás.
-Eres un maldito hijo de perra.
-Wooyoung- Yunho le pegó- No seas tan atrevido- rio- Dile que no insulte a mi-
-El puede hablar como se le de la reverenda gana cachorro- le guiño el ojo.
Mingi agarró a Wooyoung del polo.
-Me bajas la puta voz.
-Suéltalo- dijo San.
Este lo soltó y Wooyoung le alzó las cejas.
-Bien ven las luces prendidas- señaló unas ventanas medias rotas de aquella cabina que se encontraba allí.
Todos asintieron.
-Vamos a matar al hijo de puta.
Estos se bajaron del carro.
-Toca- dijo Jongho.
-No gracias- soltó Seonghwa y patio la puerta rompiéndola.
-Tenía que estar oscuro- suspiró Mingi.