Epílogo: Tiempos Mejores

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La alarma lo despierta y con pereza reacciona, ya perdió la cuenta de cuántas veces se arrepintió de haber elegido esa carrera. Se levanta muy a su pesar liberándose del fuerte agarre del alfa a su lado en la cama y volviéndolo a tapar se va al baño a hacer la rutina de los días de estudio, en ese caso de las mañanas. Cuando ya fue saliendo se miró al espejo, apenas estaba con ropa interior puesta por la noche que tuvo con Jimin y la marca renovada en su clavícula derecha estaba brillante y rosada, siendo producto de una noche en la que dos enamorados se envolvieron en las mantas otra vez. Ya se había acostumbrado a esas vistas; él con marcas rojas en el cuello, mordidas pequeñas en los hombros y el pequeño tatuaje, y el verdadero lazo en su cuello, pero aún a sus veintisiete años se sentía como un adolescente emocionado cada vez que algo trataba sobre su novio.

Habían comenzado a vivir juntos poco después de que ambos pasaran la mayoría de edad y pudieran trabajar para pagar por si mismos el departamento en el que estaban, consiguiendo empleos en cafeterías grandes o tiendas comerciales, ahora estudiaban mientras trabajaban y no los podía dejar más cansados el levantarse temprano y acostarse tarde. Yoongi, como lo tenia planeado hace años, se fue a estudiar medicina y actualmente iba en su quinto año de educación médica y las prácticas en el hospital de Seúl lo tenían atareado, Jimin por su parte, como un pequeño cachorro decidió seguir a su mayor hacia el área médica, pero como enfermero, ahora estaba en su último año porque se había tomado uno libre para trabajar y estaba a punto de graduarse. Se las arreglaron bien para subsistir por su cuenta, aún si terminaban sus días cansados y lo único que podían hacer era dormir en sus brazos, pero ahora estaban completamente bien.

El omega despertaba antes, más para preparar el desayuno y dejar que su alfa durmiera más. Cuando estuvo sirviendo los cafés, fue que el alfa apareció por el pasillo totalmente despeinado y mojado, y con el rostro húmedo por la agresiva ducha que se dio para despertar.

-Buen día... -caminó aún con sueño a donde estaba Yoongi sentado y plantó un dulce beso en sus labios como saludo. -¿tienes que ir al hospital?

-Sip... -asiente revolviendo el rubio cabello de su novio. -¿irás con Hoseok?

-Si, quiere que estudiemos en conjunto... -se golpeó las mejillas al sentir el sueño volver a su cuerpo. -a veces lo pienso y no me creo haber llegado hasta el último año...

Hoseok no se había ido con Yoongi, como lo había planeado, sino que terminó encontrándose con Jimin el primer año de enfermeria, solían hacer prácticas en el mismo hospital que Yoon y a este le gustaba ponerlos nerviosos preguntándoles cosas sobre salud.

-Los voy a interrogar al termino del día -avisa Yoongi antes de tomar de su café.

La rutina del desayuno incluía música, como siempre lo hacían, la música los había acompañado desde jóvenes y nunca dejaron sus propios gustos. Ese día comenzaron la madrugada junto a The Beatles y para el fin del desayuno, Jimin fue el primero en levantarse de la mesa, depositando un beso en la frente del omega antes de darse la vuelta y caminar a la recamara. Fue alertado por sonidos de Yoongi tosiendo fuertemente por tragar muy rápido el líquido.

-¿Estás bien? -se rió Jimin al ver el rostro rojo de Min.

-Si, si -volvió a beber. -continúa...

Pero lo cierto era que Jimin tenía la gruesa espalda llena de largas marcas por las uñas de Yoongi, dejando más de una prueba del encuentro nocturno que tuvieron.

-¡Debes cortarte las uñas! -gritó Jimin desde el baño, donde Yoongi supuso que se miraba al espejo.

Les esperaba un largo día.

Falling [Jimsu] Omegaverse Donde viven las historias. Descúbrelo ahora