Capítulo 23

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Lucia Galán.

En verdad no habíamos entrado, más bien habíamos salido a un jardín hermoso.

Supongo que Andrés notó mi cara de maravillada -Hace años, siempre usaban este jardín para recrearse o para venir a comer, pero un día de pronto, todos lo olvidaron... Pero yo no.

—E-es... Hermoso.

Sonríe -Si, lo es... —me vuelve a tomar de la mano y me guía hacia una fuente de agua hermosa, ambos nos sentamos en la orilla.

—¿Por qué me trajiste aquí?

—Sé que no te gustan tanto la fiestas, y decidí mostrarte mi pequeño escondite.

Tiene razón, la fiestas no son lo mío, prefiero solo una pequeña junta con amigos, pero acá... Es totalmente maravilloso; césped, árboles, esta fuente de agua, y la luna brillando sobre nosotros.

—Gracias...

—Perdón si te hice sentir incómoda ahí adentro, no fue mi intención.... Yo solo...

—Tranquilo, no hay drama.

Me mira y vuelve a sonreír -Quiero que confíes en mi ¿si? Siempre estaré para ti...

—Jajajaj.., ¿ok? Gracias Andrés.

Nos quedamos hablando un rato ahí, hasta que suena el celular de él. Era uno de nuestros amigos que nos estaban buscando. Nos quedamos hablando por unos cinco minutos más, hasta que creímos conveniente volver a la "civilización"

Volvimos con nuestros amigos, seguimos bailando y divirtiéndonos un rato más, eran cerca de las 4 de la mañana cuando comencé a aburrirme y le pedí a Andrés que me llevara a mi casa, a lo que él, por supuesto aceptó.

Me llevó hasta la puerta de mi casa y ahí se despidió de mi con un beso en a mejilla. Abrí la puerta con cuidado de no hacer mucho ruido, pero al entrar noté una luz prendida en la sala, también estaba la TV encendida. Poco a poco me acerqué y vi a Joaquin durmiendo en el sillón.

—Amor... —le susurré, pues no quería asustarlo.

No se despertó, así que lo moví un poco —Amor.., Joaquin —aún no se despertaba, así que comencé a repartirle besos por toda la cara, cuando me topé con sus labios sentí como me tomó firmemente por la cintura y me puso a horcajadas sobre él. —Creí que dormías —alcé una ceja.

—Me despertó el beso del verdadero amor... —me contestó y me volvió a robar un beso.

Me reí, intentando no hacer mucho ruido, no quería despertar a mamá.

Joaquín comenzó a besarme sin parar, me comía la boca con desesperación, claramente yo necesitaba más de él.

Él me tomó por el trasero y se levantó conmigo en brazos, yo rodé su cintura con mis piernas, y sin mucho esfuerzo me llevó hasta mi habitación, me sentó en la orilla de la cama y me dió un beso fogoso.

—Te amo princesa.. —me susurra en los labios.

—Y yo también, amor —nos volvemos a besar, pero él se separa.

—¿A dónde vas? —pregunto con la respiración agitada.

—A dormir, cariño.

Rápidamente me levanto de la cama y bloqueo su paso. —Si me vas a calentar de esa manera, por lo menos quédate acá a dormir.

—Así que te calenté? —me sonrió de lado y levantó las cejas.

—Si... —le robo un beso— Mucho. —le robo otro beso

Yo sigo con los besos, voy bajando por su cuello y comienzo a sacarle la remera que traía.

Terminé de desnudarlo y nos amamos con locura y pasión, luego de eso ambos nos dormimos hasta el día siguiente, cuando nos despertamos a las 11 de la mañana. Bajamos a la cocina y vimos una nota, donde decía que mamá se ausentaría por unos días, que tomaría unas pequeñas vacaciones en casa de nuestra tía.

Entre los dos preparamos el desayuno y comimos entre risas y juegos. Pasó todo el día así, divertido, entre caricias, juegos y mimos. Al día siguiente estábamos en lo mismo cuando el golpeteo de la puerta nos interrumpió, Joaquín se levantó y él fué a atender. Era la persona que menos quería ver; Valeria.

—¿Q-Qué haces acá? —pregunta Joaquin.

—¿No es obvio? Te vine a ver a vos, Joa.

Escuché eso desde el sillón donde estaba y de inmediato me levanté y caminé hasta llegar al lado de Joaquin.

—Valeria! —fingí estar sorprendida— ¿Qué haces acá?

—Vine a ver a Joa. —me contesta sin mirarme

—Ah si? Y por qué, si se puede saber?

—Quiero hablar con él, ¿Te importa Joaquin?

Él me mira, asiente con la cabeza y suspira —Está bien, Valeria, solo unos minutos.

La mina entra como si fuera su casa y se ubica al lado de Joaquín. —Si no te molesta, Lu, me gustaría hablar A SOLAS con tu hermano.

Me contuve para no sacarla a patadas de mi casa, respiré hondo —Claro que no, los dejo.

—Bien. ¿Vamos a tu habitación a hablar, Joa? —le pregunta la mina a Joa, colgándose de su cuello.

Joaquín la aparta con gentileza. —Prefiero estar acá, Valeria

Me doy media vuelta y pensando en todo lo que esa le puede llegar a decir a Joaquín me voy de ahí y me dirijo a la cocina.

Me puse a escuchar música para que el tiempo se pasara más rápido, y para intentar desviar mis pensamientos.

Joaquín Galán.

—Ahora que estamos solos, dime a qué viniste. —le digo.

Ella se sienta y por lógica yo hago lo mismo. —Es que... No me puedo sacar de la cabeza el beso que me diste, Joaquín.

Me quedo plasmado, no puedo creer que me diga eso así, como si yo ni supiera como pasó todo —Valeria, vos te tiraste a mi, y yo de inmediato me separé. —contradigo con seriedad.

—Sé que te gustó, Joaquín... —se acercó a mi, más de lo que ya estaba—. Se te notó... —pone su mano en mi pecho y siento que estoy en apuros.

—Valeria, basta.... y-yo no puedo besarte, ni tener nada contigo— le digo nervioso, y me levanto del sillón.

—¿Por qué no? —pregunta insistente. También se levanta y se vuelve a acercar.

—Yo... Estoy en una relación, y estoy muy enamorado.

—¡¿Qué?! Con quien estás?

—No lo puedo decir Valeria....

—Seguro que te lo has invitado para alejarme. —se cruza de brazos.

—Claro que no! Es solo que... —me quedo pensando en algo que decir.

—¿Qué, Joaquín?
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Buenasss, otro capítulo para ustedes, espero que lo hayan disfrutado, no se vayan sin votar y decirme que les pareció.

LOS AMO y cuídense mucho.

dedicado a anonimook6

Amor De Hermanos [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora