Más allá de una mirada

17

Luna:

—¿Terminarlo?. —Me cuesta articular la pregunta. —¿Quieres que terminemos? ¿Por qué?

—Luna..

—¿Por qué estas terminando conmigo, Adonis?

—Pequeña, no te alteres.

—¿Cómo no quieres que me altere?. —Me muevo y siento un poco de dolor. —¿Por qué haces esto?

—Porque lo necesitamos.

¿Qué?

—Ambos necesitamos esto, pequeña.

¿De qué habla?

Yo no necesito esto.

De ninguna forma.

¿Por qué él?

—¿Son las cicatrices?

Adonis me observa confundido.

—Son las cicatrices, Adonis, es por eso. —Pronuncio, las lágrimas deslizándose por mis mejillas. —Es por eso ¿Verdad?

—Pequeña, claro que no.

—Ese eso, por eso estas terminando conmigo.. tienes asco de que me queden cicatrices,

Comienzo a llorar.

—Luna, no.. —Intenta tocarme y ahora soy yo quien no quiere que me toque.

—Vete, solo vete. —Lloro. —Si me tendrás asco y terminas conmigo por esto, solo vete.

El dolor que siente mi corazón es demasiado.

—¡Luna, que no es..!

—¡Vete, Adonis, solo márchate!

Mi insistencia es tanta que él lo hace.

Y es la última vez que veo a Adonis Blackwood.

(*)

—Luna, tienes que comer. —Me dice mamá intentando darme una cuchara de arroz de hospital. —Por favor, cariño.

—No quiero, mama. Ya déjame, por favor..

Las lágrimas vuelven a llenar mis ojos.

—Cariño...

—Sé que no estás de acuerdo igual que papá, pero tengo el corazón roto, por favor, no tengo ganas de comer ahora.

Mamá me observa con tristeza y yo trato de no llorar, pero es inútil.

El doctor abre la puerta e ingresa a la habitación, mamá se pone de pie y deja el almuerzo sobre la mesa en la que trajeron mi cena.

—Hoy te ves mucho más delgada, Luna.

Adonis me dejo,

El me dejo y desde que lo eche de aquí, no ha vuelto a aparecer.

Se acabó.

Lo nuestro realmente termino.

Siento que me falta, no pensé que así se sentiría, pero es como me siento.

Quiero a Adonis..

Quiero estar con Adonis.

El Doctor se toma un respiro. —Eso es malo.

Solo no tengo ganas.

—Supongo que esto te hará cambiar de opinión o eso espero.

Mamá luce preocupada.

—¿Acaso ya tiene los resultados de sus exámenes?

¿Es posible que papá dañara algún órgano?

—Los tenemos.

Pone los ojos en mí y sin dar vueltas, solo me lo dice.

—Según los exámenes, la señorita Tramell está embarazada.

¿Qué?

Me quedo en shock y mamá es la primera en reaccionar.

—¿Cómo dijo, doctor?

El corazón me late muy rápido, esto es...

Mi doctor pone los ojos en mí.

Y dice una vez más.—Estas embarazada, Luna.

¡No puede ser!

Hola...

En el siguiente capítulo daremos un salto en el tiempo.

¿Qué sucederá cuando Adonis y Luna vuelvan a verse?

Más de uno estará confundido, pero todo tendrá explicación a su tiempo.

Nos leemos.

>>Yiemir.