Al parecer el único bueno en convencer no era Joaquín, el rizado demostró ser bastante convincente, para su pareja. Bueno en realidad se la pasó repitiendo que aceptará, por más de tres horas hasta que terminó hartando, logrando que aceptará.
Eso fue hace dos días y a cada momento el menor se arrepentía de haber aceptado. Justo a hora saliendo de la ducha, faltando sólo cambiarse para poder irse, seguía dudando.
— ¿Bonito? ¿Qué es lo que pasa? Te noto raro —preguntó Emilio preocupado, al ver la expresión del castaño.
— Es que me da miedo usar el vibrador ese —admitió Joaquín, abuktando sus labios.
— ¡Amor! —susurró acercandose a su prometido, tomándo el rostro entre sus manos, dándole un beso rápido, antes de continuar — Si no quieres hacerlo, no lo hagas podemos dejarlo para cuando estemos solos.
—No amor, quiero hacerlo — musitó el castaño, al final no es como si la familia de su novio lo fuera a odiar más.
— ¿Seguro? —intrigó Emilio, jamás lo obligaría a nada, el menor asintió— Muy bien, vístete iré a darme una ducha.
Joaquín sonrió, se dan un pequeño beso, antes de que cada quien vaya a hacer lo que le toca.
El mayor después de ducharse se fue a cambiar, en el momento que terminó fue a buscar al castaño sin embargo a esté le faltaba un poco para terminar de alistarse, así que decidió esperarlo en el auto.
Algunos minutos después entra Joaquín al auto, soltando un pequeño jadeo apenas audible al sentarse, antes de que Emilio arranque el auto, le sonrió tímido.
Durante el trayecto que no duró más de media hora, hablaron sólo un poco, mientras se daban sonrisas cómplices. En cuanto se estacionaron, la familia del rizado se acercó a recibirlos, incluyendo la madre de esté.
— Hijo —susurró la madre de Emilio abrazando a su hijo, ignorando por completo a al menor que está a su lado, dedicándole una mala mirada.
— Hola señora —saludo cordialmente, intentando mostrar una sonrisa, sin embargo es totalmente ignorado.
Luego de saludar al rizado e ignorar a Joaquín como es en cada reunión, fueron al patio trasero, donde la pareja se sentó junta.
— Bebé lamento lo que te hace mi familia — se disculpó Emilio bastante apenado.
— No es tu culpa amor —susurró en el oído del contrario— Mhg Emi, no hagas eso —jadeó al sentir las vibraciones en su interior, que se detuvieron luego de unos segundos.
Todos se sientan, para desgracia del castaño su suegra queda justo enfrente de ellos, comienza la comida, donde se dedican a hacerle la platica a Emilio ignorando lo de nuevo. Sin embargo el mayor solo contesta secamente a su familia, concentrándose en hablar con su prometido, el mayor tiempo posible.
— ¿Continúan con los planes de la boda? —preguntó la madre de Emilio mirando al menor.
— Si, hace unos días comenzamos a ver los salones, para decidir en dónde sería y de ahí planea.. Ahh —soltó un gritito al sentir las vibraciones en su interior, tomo el muslo de su prometido entre sus manos, comenzando a apretarlo, mientras lo miraba mal — Planear lo que falta —murmuró con mucho esfuerzo para evitar gemir.
— Emilio deberías reconciderar casarte o al menos déjame contratar a alguien, para que plane tu boda, dudo que esté tenga buenos gustos, y los tuyos no han sido los mejores, desde hace algunos años—habló mirando mal al castaño, quien se muerde su labio inferior.
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Nuestra Vida Sexual ~Emiliaco~
FanfictionEmilio y Joaquín eran novios desde hace mucho tiempo justo ahora acababan de mudarse juntos, ellos ya habían tenido relaciones sexuales, pero en esta historia se contará como experimentan su vida sexual de diferentes maneras y situaciones. IMPORTAN...