PARTE 4

163 25 19
                                    

Las salidas se daban con más frecuencia y si se preguntan qué pasó con aquella chica por la cual Santi sentía interés...Pues se alejó de ella, todos decían que habían terminado, ella actuaba raro, siempre lo veía de menos, por que sí, Santi podía ser popular, el que tenía muchos amigos, podía ser aplicado, pero era de bajos recursos, y ella siempre menospreciaba a las personas que eran así. En cambio a mí jamás me importo eso, quise a Santi por encima de todo, para mí era alguien perfectamente imperfecto, con quien soñaba tener algo lindo.

Y era lo que estaba viviendo, un fin de semana después de reunirnos con el equipo y terminar parte de un proyecto, Santi me pidió que lo acompañase a ver un partido, lo cual acepte encantada, caminamos mucho por que quedaba un poco retirado, al regreso nos sorprendió la lluvia, mientras esperábamos el bus la lluvia se puso más intensa, moría de frío, Santi lo noto y me abrazo, desde ese instante me empezó a tratar con más cariño, ya saben yo estaba enamorada y eso me hacía sentir bien.

Un día Santi me puso un reto, lo cual tenía como premio lo que yo quisiera, me esmere tanto por cumplirlo.
Santi tenía un partido muy importante, ese día no tuvimos clases, pero era obligación ir a apoyar al equipo de fútbol, y yo emocionada, fui con mi mejor amiga, recuerdo que le comenté algo, lo cual ella me sugirió que tuviese cuidado.
Disfrutamos del partido, ganaron como siempre, al finalizar el partido junto con otros amigos nos fuimos a comer pizza, después Santi y yo decidimos irnos juntos y así fue, cuando íbamos en el bus, le hice saber que ya había cumplido el reto (no puedo decirlo, era un secreto y eso es sagrado para mí) Santi me sonrío y me dijo que escogiera mi premio, sin pensarlo dos veces le pregunté ¿Qué es lo que sientes realmente por mí?

No se de donde saque tanto valor para poder cuestionarle de tal forma, pero sabía que si no aprovechaba ese momento era posible que nunca más volvería a tener una oportunidad igual. Tenía nervios y miedo de saber su respuesta, sabría que si decía que <<nada>>, me deprimiría.

Si rostro fue de sorpresa y de shock, nunca se imagino que escogería como premio hacerle aquella interrogante. Lo pensé mucho, quizás hubiera sido mejor pedirle un beso, un abrazo o inclusive una salida juntos. Pero decidí escoger aquello que tanto había estado atormentándome.

Quería saber su respuesta, sólo de esa forma sabría la realidad. Aunque no estaba segura de querer saber su verdadera respuesta. ¿Qué pasaría si me decía que le gustaba?, cómo iba actuar ante él. Miles de cosas empezaron a invadir mi mente, mis manos sudaban y yo estaba temblando de los mismos nervios.

Fue un ambiente bastante intenso, nos quedamos observando y pasó un buen momento donde nadie dijo absolutamente nada.

¿Cuál será la respuesta de Santi?.
¿Qué pasará después?...

La vida de Caroline.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora