Después de tanto tiempo, Catalina vuelve a encontrarse con su primer amor, mismo que resultaba imposible debido a la gran diferencia de edad.
Por azares del destino,un día conoce a Noah y sus sentimientos se desorganizan por completo, ya que él la t...
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Capítulo 28| Lo que siento por ti es lindo. Y me hace dar cuenta que la vida no es tan jodida como parece.
Catalina Russell.
Se avecinaba una tormenta, o eso fue lo que dijo la mujer del tiempo. Estaba apoyada contra la pared esperando a que James saliera de la oficina de mi padre y me llevara a la universidad, han estado charlando hace más de quince minutos y yo ya me estaba hartando de esperarlos.
Podría haberle pedido a Kevin que me llevara pero él no ha vuelto a dirigirme la palabra desde que me confesó que está enamorado de mí, no culpo, pero me ponía mal que me tratara diferente y no como solía hacerlo.
Busco mi celular en mi mochila y reviso por tercera vez en la mañana mi chat de WhatsApp con la esperanza de ver algún mensaje de Luke ¿pero saben? No he sabido nada de él hace más de dos semanas y supe que tal vez Luke Lowell no quería saber nada mas de mí.
¿Y así sin más?
¿Sin ninguna explicación?
<<Deberías ir a buscarlo de nuevo...>>
Fui a buscarlo pero nadie me abrió la puerta en las tres ocasiones que fui, quería echarme a llorar porque me dolía demasiado que me dejara así sin más.
— ¿Todavía siguen allá dentro?— Oí la voz de Melanie y alcé la mirada encontrándome con sus ojos color avellana.
Suspiré.
— No sé de qué tanto hablan.— Melanie se apoyó contra la pared a mi lado con sus manos detrás de su espalda.— ¿Sabes, no?
— Es por Kevin.
Me miró.
— ¿Le sucede algo?— Pregunté.
— En la mañana cuando fui buscar a los niños a la habitación para levantarlos para la escuela.— Desvió los ojos de mí, no estando segura si decírmelo.— Estaba un desastre donde se quedaron jugando hasta tarde y me puse a ordenar un poco mientras Ángel y Luke se vestían. Y en medio de ese desorden encontré una carpeta y cayó de ella algunos papeles de información muy...privada e importante.
¿Información privada?
¿Pero, de quién o qué?
— ¿Es algo malo?
Melanie apretó los labios.
— No sabría decírtelo en este instante.— Contestó.— Pero creo que Kevin tendrá que respondernos a algunas preguntas cuando llegue.
Me la quede viendo. El tono en que hablo fue lleno de preocupación que sentí hasta escalofríos. Decidieron pasar la noche aquí en casa y los tres niños se han vuelto inseparables que incluso tuvieron que dormir juntos en la habitación donde se hospeda Kevin.
