Capítulo 2 - Primer enfrentamiento.

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Salimos de la sala de reuniones, y fuera nos esperan Azazel y Dante. Yo me cojo del brazo de Dante y volvemos al salón. Mientras me conecto con todos, y les explico la situación para que no se extrañen de la presencia de Víktor.

_Bien Víktor, siéntate a mi lado, creo que es lo más conveniente.

_Cómo no, que mejor lugar que con mi nieta.

Ya... Qué oportuno... De todas formas, sigue teniendo algo que no me convence... Por lo que sé de papá y el resto, es bastante despiadado y siempre consigue sus objetivos. Es una pena, porque cuando hablé con su espíritu fue muy diferente....

_Dime Helena, ¿cómo te hiciste con el castillo? Supongo que no te costó mucho.

_Bueno, no eres muy explícito que digamos... Pero al final puede averiguar el final de casualidad.

_Te vi aquí, así que necesitaba decir más. ¿Cómo fue el encuentro con Baltasar? _me dice riendo.

_Casi le arranco la cabeza... Me pareció un tipo insoportable, ¿sabes que me confundió con una esclava?

Víktor suelta sonoras carcajadas y todos miran disimuladamente. Ahora sí ríe de forma sincera. Baltasar al oírnos, se acerca a nosotros.

_Ya veo que te hace gracia cómo nos conocimos.

_ ¡Baltasar, viejo amigo!

Víktor se levanta y se dan un abrazo palmeándose la espalda.

_Y yo que pensé que me había librado de ti...

_Ya quisieras... Ven, acompáñanos. Dime, ¿cómo va todo?

_Perfectamente, seguí tus instrucciones y lo preparé todo para mi reina. Y he de decir, que es una mujer brillante, puede estar muy orgulloso.

_Y lo estoy, mi trato hacia ella va a ser más el de un padre que el de un abuelo.

_Su hijo se encargó de trasmitirle sus conocimientos, y es realmente fuerte.

_Si sigues halagándola así, pensaré que eres su marido _dice entre risas.

_Suerte que soy yo _dice Dante con una sonrisa falsa. _Víktor, necesito saber si tienes tu parte demoníaca o no, para saber quien o quienes son tus reyes.

_La tengo en mi interior, pero no sé manifiesta, es una lástima.

_En ese caso, eres competencia de Conor.

_Ni qué se piense ese vampirucho ermitaño que estaré a sus órdenes.

_Veo que sigues siendo la alegría de la huerta, Víktor...

_ ¿Desde cuándo te dejas ver?

_Desde que soy rey, mayormente...

_ ¿Y el resto del consejo?

_Son historia _digo despreocupada.

_ ¿Tú acabaste con ellos?

_Mi madre con la familia. Digamos que... Quisieron hacer lo mismo que tú y acabaron muertos.

_Tu madre es una fiera... Tienes a quien salir. ¿Qué tal eres en combate?

_La mejor _dice Dante orgulloso.

_ ¿Y tú poder mental?

_Puedo encontrar a quien sea en este mundo o en el inframundo, y controlar a grandes masas, independientemente de la raza.

_ ¿Eres más fuerte que Conor?

_Si.

_Veamos... Probemos tu fuerza, ¿te parece?

_No es el momento, Víktor, mañana lo haremos.

_Vamos... no seas aguafiestas... Veamos...

_Víktor, hazle caso, no es el momento _dice Baltasar.

_Veamos, ese demonio que es tu mano derecha... A ver si eres capaz de protegerlo. Probemos tu poder mental...

Víktor se vuelve hacia Azazel y lo mira a los ojos, y en el rostro de Azazel veo miedo y me mira suplicando ayuda. Yo entro en su mente y la bloqueo, aunque le cuesta mucho resistir la orden de Víktor, yo entro en su mente y le hablo.

_Tranquilo Azazel, no voy a permitir que nadie te haga daño. Tú céntrate en mi voz, ignora la de Víktor.

_Lo intento mi reina, pero duele mucho.

_Eres muy fuerte, y valiente, y sabes que te quiero, eres muy especial para mí.

_Gracias mi reina, resistiré lo que sea, por ti.

_Gracias, ahora le voy a pasar el control a mi madre para meterme en la mente de Víktor, ¿vale?

_Como digas mi reina. Si sale mal, quiero que sepas que yo también la quiero.

_Lo sé, pero no te preocupes, estaremos juntos toda la eternidad _le digo con una sonrisa.

Yo mantengo su mente aislada y me conecto con mamá, y le pido que mantenga a salvo la mente de Azazel. Mamá es realmente fuerte ahora, más que antes, y no tendrá problemas en hacerlo. Una vez mamá me asegura que lo tiene controlado, yo salgo de allí y me vuelvo hacia Víktor entrando en su mente.

_Ya basta Víktor.

_Impresionante, eres la primera que consigue entrar en mi mente, y con tanta facilidad.

_Ahora deja en paz a Azazel.

_Vamos... Sólo me estoy divirtiendo...

Lanza un ataque mental hacia mí ahora, pero no surte efecto alguno. Yo me conecto a Eneas, papá, Diana y Ares, y les digo que protejan las mentes de todos. Sigo manteniendo el pulso mental de Víktor, hasta que ya es suficiente.

_ ¡Basta!

Mis palabras van acompañadas de una onda de energía que hace que Víktor detenga su ataque y tenga que retroceder varios pasos. Yo lo miro con mis ojos negros y morados y él me mira ensimismado.

_Fascinante...

_Te lo voy a decir una sola vez, la próxima vez que intentes un jueguecito de los tuyos contra alguien de los míos, que incluye a todos, no seré tan delicada en el contraataque. No eres rival para mí, puedo matarte sin moverme si quiera. Así que no me tientes, no tengo paciencia, y menos para quienes me retan.

_Te adoro Helena, serías la hija perfecta para mí, no como mis hijos... siempre fueron...

_Se acabó la conversación y la fiesta. Por favor, retírense todos.

Todos asienten y se van retirando poco a poco dando las buenas noches, hasta que sólo quedamos la familia, y Víktor. Yo le ordeno a Eleb que se lleve a mi madre y a tío Drogo al hospital con Alba.

_Quienes son ellos, son muy poderosos, y veo el parecido familiar...

_Él es Eneas, mi hermano.

_Es un placer tener un nieto tan fuerte y poderoso como tú... Y, además, eres un vampiro _dice orgulloso.

_Así es.

_ ¿Y ellos?

_Son mis hijos, Ares y Diana.

_Igual de fuertes que su madre, pero aún están madurando sus poderes y habilidades... Sin duda, la familia que siempre soñé.

_Cómo no, "padre" _dice Nicolae con ironía. _Aunque tú nunca has sabido lo que es cuidar de la familia.

_Eso es lo que crees, pero yo siempre os he protegido.

_Si, a base de palizas cuando no te convenía.

_Eso es educar.

_Eso es abusar.

_No voy a discutir, sería inútil.

_Será mejor que todos descansemos. Eneas, papá, espérenme aquí junto a Diana y Ares.

_Claro Helena. 

Entre los colmillos de los Bartholy VIII: Lágrimas de sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora