Mio
El día de la misión finalmente ha llegado, el presi estaba ansioso de saber lo que Oyakata-sama nos ha designado, mientras desayunabamos compartiendo sonrisas, los pasos del pilar se hicieron presentes.
— Buenos días—la voz firme de Rengoku llenó el lugar.
— Buenos días—respondimos al unisono, yo me puse de pie para prepararle el desayuno, esta vez fue algo más por necesidad que deber, no pase buena noche pensando en la misión que le designaron.
— Muchas gracias, Mio—dijo con la voz llena de entusiasmo, escucharlo feliz me provocó cierta satisfacción.
Retomamos nuestro desayuno entre risas, el pilar nos daba algunos consejos sobre la misión. Pero, era inquietante que solo hablaramos de nosotros.
Debe estar asustado...
— Así que, sean cuidadosos—sentenció tras una serie de consejos y datos que no podemos pasar por alto—. No estare con ustedes, pero me encargare de que esten a salvo. Kyoujurou, cuida de Mio, ¿si?
El presi asintió en silencio, todo el ambiente se sentía inquieto.
— Será mejor que ya me vaya—añadió Rengoku mientras se ponía de pie—. Tengo un largo viaje por delante.
Sonrió.
Tomó las cosas que ocupó en el desayuno para quitarlas de la mesa, le seguí con la mirada inquieta. No quería que se fuera así como así.
— Mio—murmuró el presi a mi lado—, tienes el rostro pálido, ¿estas bien?
No sabía qué responder, algo en mí gritaba que debía detenerlo.
Todo hoy en él se veía extraño, su cabello brillaba con más intensidad, las mechas rojas parecían pequeñas llamas danzantes, sus ojos llevaban una nostalgia desconocida, y esa sonrisa en sus labios era más una fragil máscara que en cualquier momento se rompería.
Seguí los pasos del Rengoku hasta que caminó a la puerta principal de la residencia, vi como tomaba las últimas cosas para luego pretender salir.
— Nos vemos—dijo antes de salir—. Volvere pronto.
Esas palabras tenían un amargo sabor...en el aire el color de la mentira tiñó la inocencia de ese mensaje.
Me puse de pie rápido, sentí la mirada confundida del presi clavada en mi espalda. Corrí lo más que pude para alcanzar al pilar que caminaba fuera de la residencia.
Ahora que él me daba la espalda, le veía cada vez más lejano e inalcanzable.
¿Qué es ésta amarga sensación? ¿por qué estoy llorando?
— Espera—dije con la voz cortada, estoy actuando tan extraño que hasta yo me sorprendo.
Él no detuvo sus pasos, hablé tan despacio que no logre llamar su atención. Así que, me armé de valor y arrugue mi nariz para tratar de calmarme.
— ¡Kyoujurou Rengoku!—grite con toda la fuerza que tenía—, ¡Espera!
Él detuvo sus pasos de golpe, se giró rápido para cruzar sus ojos con los míos.
De forma automatica corrí para acortar la poca distancia que nos quedaba, su mirada sorprendida y sus labios separados a punto de hablar fueron interrumpidos por mí cuando llegue a él y le di un abrazo.
— ¿M-Mio?—preguntó confundido, parecía no saber qué hacer—, ¿qué sucede? ¿tienes miedo? ¿no quieres ir a tu misión?
— No vayas—murmuré con la voz quebrada—. No vayas a esa misión, Rengoku...tengo una mala sensación desde el momento en que me hablaste de ella. Yo...yo no sé qué es lo que sucede conmigo. Pero, te estoy siendo honesta—podría no creerme, aún así es la última carta que me queda—. Algo muy malo te sucedera sí vas a esa misión.
Hubo un silencio tras mis palabras, luego el tacto de sus manos en mi cabello me rodearon de calor.
— Lo sé—susurró, su voz parecía estar rendida ante el deber—. He tenido malos sueños con esta misión, sé que estoy jugandome mi vida con esto. Pero, sí no voy yo...muchos cazadores y personas inocentes seguiran muriendo por esos demonios. No puedo permitir que eso suceda, yo nací para ayudarlos y hacerles sonreír, al menos una vez más.
El calor que desprende Rengoku no es solo corporal, sino, sus palabras llenas de esa protección tan admirable me hacen sentir mal de mi egoísmo.
— Pero—añadió—, ahora que eres tú quién me pide quedarme estoy dudando mucho en ir a esta misión. Dios, eres demasiado importante para mí, Mio. Y, esa es la razón que me hace negar este miedo para ir y enfrentar mi destino. Hare del mundo un lugar mejor para ti, ire para acabar con ese demonio y que tu seguridad no se vea puesta en peligro. Por favor, espera a por mí.
Rengoku me separó un poco de su cuerpo, llevó su mano a mi mentón y me hizo verle directo a los ojos.
Esa mirada profunda me recibía acompañado de una amplia sonrisa.
Y, sin esperar más. Apoyó sus labios en los mios.
Eran tan suaves, tan cálidos, tan amorosos como los imaginaba. El tiempo pareció detenerse entre nosotros, mi corazón latía tan fuerte que llenaba mis oídos.
Nos separamos tras unos segundos, mis ojos se encontraron rapidamente con los suyos.
Tenía sus mejillas suavemente sonrojadas, una sonrisa nerviosa parecía ser la respuesta al silencio.
— Lo siento—susurró con nervios en su voz—, no debí haber hecho eso sin tu permiso, no quiero que te sientas obligada a nada.
— No lo sientas—respondí suave, su mirada nerviosa cambiaba a una más calmada y cariñosa—. Yo finalmente acomode mis sentimientos.
Sus ojos brillaron, una sonrisa llena de felicidad se dislumbró en su rostro.
— Me diras eso cuando vuelva a casa—dijo para luego besar mi mano—. Ahora, tengo la razón más importante de todas para regresar a salvo.
Confie torpemente en sus palabras, asentí con los ojos llenos de esperanza en que aquella futura reunión se cumplira.
Dicho aquello, se giró para marcharse con destino a su misión. Me quede viendole alejarse en silencio, no me moví de allí hasta que lo perdí de vista.
— ¿Nos vamos?—la voz del presi me sobresaltó, sentí un poco de vergüenza al sentirlo cerca.
¿Lo habra visto? ¿Me odiara por esto?
— ¿Mio?—preguntó curioso—, ¿Vamos?
Asentí, él me entregó mis cosas para luego caminar en dirección a la residencia de Oyakata-sama.
El presi está actuando extrañamente animado, hablaba tanto que no lograba responder a su conversación.
Parecía estar ansioso, inquieto y a la vez confundido. Hasta que vi con atención sus ojos, esa mirada vacía y quebrada me rompió el corazón.
Él nos vio, y no sé cómo deba sentirme al respecto.
Miercoles de Rengoku♡
Ayns, me gustó mucho como quedó este capi :c espero que a ustedes también les haya gustado!!
Muuuchas gracias por leer c: ♡~
Nos leemos pronto♡♡
ESTÁS LEYENDO
Jugar con Fuego / RengokuxTu*Finalizada*
FanficMio es una estudiante con excelentes notas, a pesar de ser una chica muy bella tiene grandes problemas para hacer amistades. Kyoujurou Rengoku es el presidente de la clase, un chico que además de tener buenos promedios, es amigable y muy considerado...