El Camino Que Elegimos

Capítulo 50

Ban estaba en el lugar en que conoció a Elaine. Una zona del bosque que pocos se atrevían a visitar. Porque la mayor parte del tiempo estaba cubierto por una espesa niebla. Pero cuando la pasabas era un lugar hermoso que pocos conocían. En ese lugar había empezado esa relación de pocos meses, una que fue totalmente importante para él,  una que había cambiado su vida. Y aun seguía siendo algo fundamental para él. Pero debía avanzar, no podía seguir en el mismo sitio. No era sanó. Porqué no quería perder lo que ahora tenía por no poder dejar el pasado atrás. Jericho era su presente, no sabía si el futuro, pero no debía importarle. Debía disfrutar lo que tenía. Ban pasó un tiempo en aquel lugar. Necesitaba hacerlo, necesitaba estar ahí para  rememorar una ultima vez todos sus recuerdos juntos, los tristes, felices, dolorosos, porque todos eran importantes. Pero esa sería la última vez. Se dijo así mismo.

Regresó cerca del medio día. Fue directo a la taberna querían un trago.  Necesitaba algo fuerte.  Estaban todos sus amigos ahí. A excepción de las chicas. Ban miró curioso por todos lados. -Dónde están las chicas

-Al fin apareces-. Le dijo Meliodas en tono recriminatorio. Cosa que le extraño.  Solamente cuando hacía una verdadera estupidez, le hablaba así.

-¿Pasó algo?-. Meliodas suspiro sin saber cómo decírselo.

-Jericho tuvo un accidente-. Le dijo Gowther, como quien habla del clima. Meliodas les dio un golpe en la cabeza.

-Se más delicado al decir algo como eso-. Le regaño Meliodas.

-Tu no querías decirselo-. Se defendió el dedefendio lentes

-¿¡Ella está bien!?-. Pero nadie le contestaba. Y eso solo lo alarmó

Así que salió rápidamente. Jericho debería estar en el hospital. La adrenalina recorría cada parte de su sistema. Ni siquiera supo como llegó al hospital.

La recepcionista lo reconoció enseguida. Y Ban se acercó -¿Jericho?-. Preguntó desesperado.

-Ella está...

-¿Ban?-. Esa era la voz de Merlín. Giró rápidamente a ella , ella caminaba muy calmada.

-¿Dónde está?-.

-Sígueme-. Ordenó sin responderle.

-¡Merlín! ¡como esta ella!-. Estaba exaltado y muy preocupado.  Solamente se había ido un par de días.  ¡Como mierda había tenido un accidente!

-Ahora Jericho está en el área de cuidados intensivos-. Ban no podía con ello. ¿Porqué esta ahí? ¿Qué le había pasado?. El debió estar con ella.
Era en lo único que podía pensar.

. Merlín no había respondido a ninguna de sus preguntas. Y estaba aún más desesperado.   Finalmente llegaron y ahí estaban todas las chicas. También Miroku y Hana. Pero Ban no vio por ningún lado a Gustaf, ni a Guila. Ban se fijo en Miroku quien se veía bastante golpeado.

Ban llego hasta ellos. Las chicas lo miraron con desaprovacion. -No deberías estar aquí desde hace... ¿tres días!-. Le dijo una muy enojada verónica.

¡Tres días!, ¡Jericho llevaba tres días en el hospital y el no se había enterado!. Unos pasos se escucharon. Un Dr se acercaba. Miroku se acercó. Detrás de él se acercó Jana y Jillian. Vio acercase a cuatro personas más.

Eran Gustaf, Guila, la tía de Jericho Isabel y Jericho. Ver a Jericho le dio un gran alivio. Olvidando por completo lo que Merlín le había dicho de que estaba en cuidados intensivos.  Miró a Jericho, ella no parecía aliviada o contenta de verlo ahí.
Se veía totalmente destrozada y no hablaba por los golpes que tenía, ni por el cabestrillo en su brazo de derecho. Ban hablaba de lo que sus ojos reflejaban. Jericho venía abrazando a su tía. Quien lucia mucho peor. Y no físicamente, su tía no tenía ni un rasguño. Pero las lágrimas resbalaban por su rostro.