El Camino Que Elegimos

Capítulo 13

Porque se lo habia puesto tan difícil. Aunque quisiera evitarlo seguía teniendo sentimientos por Ban, él últimamente se estaba alejando. No era como que fueran muy cercanos, pero desde que Estarossa se presentó con ella él no habia ido a dormir a su habitación. Lo que era extraño ya qué lo tenía ahí por lo menos una vez a la semana.

Y bueno Estarossa, era muy diferente. Era lindo, atento, siempre buscaba la forma de hacerla sonreír. Casi no discutían, y todo era lindo, pero, ¿Dónde estaba lo divertido? Su corazón apenas y se aceleraba cuando estaba cerca de él, pero eso ya era algo ¿No?

No era nada serio aún. Salían una vez a la semana la acompañaba  del trabajo hasta su casa. A Zeal le agrada o eso había demostrado, aunque se mostraba muy recelo. Y Jericho no entendía porqué, si Estarosa era muy agradable.
Zeal solía mencionar mucho a Ban cuando los acompañaba, lo cual molestaba a Estarossa y Jericho no comprendía porqué.

Cómo había terminado viéndose con Estarossa. El en verdad no se había rendido, después de dos semanas desbloqueo su contacto y a diario recibía un lindo mensaje de su parte, y durante el tiempo en que se rehusaba a desbloquear su contacto lo tuvo en la cafetería, siempre le decía alguna cosa linda, hasta su forma de dar los buenos días le parecía linda. Estarossa era un gran sujeto.  

Jericho agitó su cabeza y se recriminó el estar pensando en ello, sino era nada serio y dudaba que lo fuera, entonces por qué solía pensar tan seguido en él. Debía de dejar darle el control a sus hormonas.

Sacudió su cabeza otra vez antes de volver a su lectura. Tenia examen pronto y no estaba dispuesta a reprobar por esa estupidez de las relaciones.

-¿Estas muy ocupada?-. Preguntaron a sus espaldas. Jericho miró a Ban y reprimió una sonrisa. Últimamente le pasaba mucho, el sonreír cuando Ban estaba cerca, estaba en un grado alarmante de estupidez. 

-¡Vaya!. Ahora te dignas a presentarté 

-Estaba ocupado-. Le dijo Ban despreocupadamente.

- Creí que encontraste algo mejor que hacer y un nuevo lugar para dormir-. Le dijo con fingido desinterés.

-Cómo sabias que venía a dormir.

-Porque otra razón entrarias en mi habitación, por la ventana a las 12:30 am-. Obvio mientras miraba su reloj de mano.

-Y tardarás mucho en desalojar mi habitación-. Jericho volvió a reprimir su sonrisa.

-Unos minutos, necesito terminar de repasar este capitulo.

-¿Para qué?-. Preguntó mientras se ponía cómodo en la cama de Jericho.

-Tengo examen pronto

-Bueno. Entonces no te fastidiare más.

Y salio por la puerta, seguramente a asaltar su cocina.
No podía quejarse si cada que se quedaba hacia de comer.

Volvió a agitar su cabeza y comenzó a leer y subrayar.
Jericho termino su lectura al mismo tiempo que Ban entraba con algo en su mano.

-¿Terminaste?-. Le preguntó mientas llevaba un trozo de algo a su boca.

-Si-. Jericho giró y lo miró -¿Qué comes?-. Preguntó Jericho muy preparada para asesinar a Ban.

-Una tarta que encontré en el refri-. Jericho frunció el seño y sonrió fingidamente

-¿Una tarta qué estaba en mi refri?

-Si-. Ban volvió a comer un poco.

-Con un papel que decía Jericho-. Jericho suspiró

-¿Eso es lo que decía?-. Ban fingió sorpresa y después sonrió con burla. -Sólo lo tome y lo arrugué