Casada a la fuerza (VxB)

CAP 11 ... SOLO MÍA

NARRA BULMA 💋

¡Mierda! ¡¿Cómo pude ser tan estúpida?! Lo mire a mi lado durmiendo plácidamente, la sábana solo le cubría hasta la cintura, su torso estaba completamente al descubierto.

Acostarme con él nunca estuvo en mis planes, pero claro, tenía que calentarme la cabeza y yo como una estúpida caí en su juego. Ahora él debe sentirse victorioso, logró lo que quería, seguro solo aceptó esta farsa para llevarme a la cama, sino ¿Por qué tenía tanta insistencia en acostarse conmigo, eh? Además de que prácticamente me lo aseguró anoche.

Mi grandioso plan de solo seguir esta farsa para obtener nuestras empresas se fue al carajo. Ósea, ni siquiera me dio tiempo de hablarle de mi plan, de que solo seguiríamos este juego y que nunca de los nunca debía haber intimidad entre nosotros, simplemente porque no hay amor entre nosotros.

¡Un momento! ¡No, no, no! ¡Esto no me va a pasar a mí, no soy tan estúpida! Rápidamente me levanté de la cama y me puse mi lencería que estaba en el piso, corrí a mi closet y saqué un pantalón deportivo negro y una playera blanca, me vestí y por último me puse unas zapatillas blancas, tome mi cartera y salí corriendo de la habitación ¡Ese imbécil ayer no uso preservativo y tuvo el descaro de venirse adentro mío! Esto podría terminar en un maldito embarazo si no tomo cartas en el asunto.

Corrí a una farmacia cercana que pude divisar ayer cuando Vegeta me trajo en su carro, entre como una loca y compre una pastilla del día siguiente, no las compre antes porque claro, nunca pensé en tener intimidad con mi "Futuro esposo"

Volví a esa gran mansión, mi nuevo "Hogar" 

Entre y me dirigí a la cocina y me serví un vaso de agua, tomé una de las tres pastillas que había y la puse en mi boca y gracias al líquido la pude pasar.

— Espero que funcione — Susurre para mí mientras miraba el vaso que ya no tenía mucho líquido.

— ¿Que funcione qué? — Al levantar la vista ahí estaba él, Vegeta, con un traje negro y una camisa azul con dos botones desabrochados.

— Nada — Supongo que debería de prepararle el desayuno, no me molesta, después de todo me encanta cocinar.

No fue difícil preparar el desayuno, coloque en la mesa un plato con huevos revueltos y otro con tocino, un par de tostadas que salieron recién de la tostadora, una taza de café y otra de jugo, en caso de que también quiera. 

Le hice una seña para que se sentara y Vegeta lo hizo, empezó a comer todo y se le notaba que lo estaba disfrutando.

Por mi parte no tenía ni hambre, solo quería descansar un poco más, Vegeta termino todo y se levantó.

— Ouji, tenemos que hablar.

— ¿Sobre qué? — Se acercó un poco.

— Sobre lo que paso anoche.

— ¿Qué? — Me tomo de la cintura — ¿Lo quieres volver a repetir?

— ¡Estas loco! — Lo empuje — Ni loca. Eso fue un grave error y nunca se volverá a repetir, mis planes siguen en pie, obtener mi empresa y luego de eso acabar con esta farsa.

— ¿En serio sigues con esa estúpida idea del divorcio? — Sonrió de lado — Cuántas veces te tengo que decir que nunca te lo daré, así que olvídalo — Volteo y camino hacia la puerta.

— Lucharé con todo por ese divorcio, contratare a los mejores abogados ¡Ouji! — Grite su apellido para que me escuchara ya que seguía caminando ignorándome completamente.