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La intriga estaba consumiendo lentamente al castaño, ¿de qué quería hablar Springtrap? Sabía que tenía que ver con Patrick. Con cada paso que daba hacia el interior del circo crecía más la preocupación.

    Springtrap y Frederick entraron juntos al dormitorio y en el estaba Puppet, leyendo un libro, los gemelos jugando y Camino atendiendo a Mangle, que estaba comiendo de su desayuno.

    Springtrap se acercó a Puppet y le susurró algo casi inaudible para el castaño, mientras le estaba susurrando a Puppet, él abrió los ojos, como si hubiera visto a un fantasma.

    —¿Pasa algo?—pregunta Frederick, ya estaba cansado de que no le dijeran nada.

    —¿A quien vieron afuera?—pregunta Patrick, aún con los ojos abiertos, sorprendido, ya tenía una idea gracias a lo que Springtrap le dijo, pero quería confirmarlo. El castaño solo lo miró con confusión y le respondió.

    —Vimos a unas personas, hombre y mujer, que decían que tenían un circo.—le respondió cuidadosamente Frederick. Patrick lo único que pudo hacer fue maldecir a lo bajo, algo que ambos chicos escucharon, tenían suerte de que estaban bastante alejados de los demás.

    —¿Sacaron sus nombres?—

    —Sí, Vincent y Vanessa.—respondió Frederick, el mayor solo pudo hacer un resoplido, sus ojos reflejaban un pánico bien escondido, tomó aire y se tranquilizó.

    —¿Qué querían?—pregunta con seriedad, sus ojos fulminaban al pobre chico que se trababa al responder.

    —Querían más personas para su circo.—respondió Springtrap al segundo que Puppet lo preguntó, estaba igual de serio que él.

    —No puede ser...—musitó Patrick, con la cabeza gacha. Ambos de los chicos se desconcertaron al verlo, compartieron miradas para ver si uno de ellos sabía que hacer en esos casos, pero solo recibieron una mirada de incomodidad del otro.—...Lo siento por espantarlos, pero...no creí volverlos a ver.—decía con un tono triste en su voz.

    —Así que decían la verdad.—musitó Springtrap, ninguno de los dos lo pudieron oír. Recuerda que Vanessa había mencionado conocer a un ventrílocuo, unos siameses y a un chico rubio. Miles de teoría pasaban por su cabeza, pero ninguna cuadraba.

    —¿Los conoces?—pregunta Frederick.

—Sí, no te voy a mentir.—respondió Patrick más tranquilo, aunque ambos chicos querían saber de donde venía tanta tristeza, ¿pasó algo?

—Te traje aquí para que hablarás con Puppet, ya que recuerdo apenas cuando llegué aquí, te escuche hablar de ellos. Y de alguien más en especifico.—dijo Springtrap, por eso lo había traído. Parecía una reunión secreta, cosa que lo era, pero ninguno de los tres pensaba eso.

—Sí, me acuerdo.—decía serio Patrick, ni siquiera Springtrap sabía su verdadero nombre, apenas los gemelos y Mangle lo sabían, los gemelos se rehusaban a llamarlo así para evitarse meterse en problemas y Mangle solo lo olvidó. Así que era un nivel de confianza grande que le tenía a Frederick para tener, no, querer revelar su nombre.

    —Los gemelos habían hablado con ellos y les dieron un papelito, lo tiene Shia.—comenta Frederick, tratando de sacar más información.

    —Bien, le pediré que lo quemé, no quiero ver nada que tenga que ver con ellos.—menciona Patrick con cierto disgusto en su voz. Ambos de los chicos se desconcertaron más de lo que ya estaban, Springtrap podía saber algo de la relación que Puppet le tenía a aquellas personas, pero tampoco se sabía toda la historia, y ni hablar de Freddy.

El Circo del Roble Oscuro [FNaF]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora