¿Gustar, Gustar?

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– Pensé que estarías en la empresa – Tomo la manzana que su esposo le ofrecía.

– Hoy es mi día libre, ¿lo olvidas? – Tomo al menor de la cintura y deposito un beso en los suaves y carnosos labios del más bajo.

– Lo había olvidado – Susurro por lo bajo mientras disimuladamente se limpiaba los labios – Con tanto trabajo no he prestado atención a muchas cosas.

– Debes estar agotado, deberías tomar un descanso – Intento acercarse de nuevo al más bajo.

– Lo haré tan pronto como sea posible – Le sonrió mientras intentaba poner distancia entre los dos.

Desde los sucesos que se habían dando entre KyuHyun y él, no podía permanecer cerca de Siwon sin sentirse incómodo. Esa extraña relación con el menor estaba comenzando a causar estragos en su, ya fallida, relación.

– Te extraño, JongHoon.

– No debería ser así, estoy junto a ti todo el tiempo.

– Sabes a lo que me refiero.

Y vaya que sabía de lo que estaban hablando, hace mucho tiempo que no compartían intimidad y los pocos encuentros que habían tenido terminaban siendo interrumpidos.

– No quiero presionarte – Sujeto al mayor de las mejillas – Pero es tu deber como esposo entregarte a mi.

Ese tipo de comentarios eran los que hacían que JongHoon se cabreara, él no era ningún juguete sexual para que lo usarán cada vez que el deseo llegara al cuerpo. Si decía amarlo debía entender que hacer el amor no sólo era el acto en sí, había más y eso era algo que Siwon nunca entendería.

– Tengo cosas que hacer – Le respondió mientras se dirigía a la puerta principal.

– No juegues con mi paciencia – Siseo mientras le sujetaba del brazo.

– Me estas lastimando, “cariño” – Sonrió forzada mente para después soltarse del agarre del menor.

– Tú deber es obedecer los deseos de tu esposo – Bufo con molestia mientas se pasaba una mano por el rostro.

– Y él tuyo es tratarme bien, así que si me lo permites... – Salió azotando la puerta.

Dentro, Siwon parecía querer destruir lo primero que llegara a sus manos. La relacion con el moreno cada vez se le salía de las manos y no estaba dispuesto a dejar que eso sucediera.

– Tendré que enseñarle modales – Susurro mientras ingresaba al despacho.

°°°

– ¿A qué se debe tan agradable visita?

– Estaba solo en casa y quise salir a ver a mis amigos, ¿tiene eso algo de malo? – Preguntó al momento de tomar asiento frente al mayor.

– Fuimos tu última opción – Solto con un puchero el castaño mayor.

– No hagas eso, te ves odioso – Arrugó el entrecejo.

– Odioso tienes el trasero – Le sacó la lengua para después esconderse en el cuerpo de su amado novio.

– Lo que quiere decir Hae es que... Tienes un carácter de mierda – Soltó después de ver la cara amargada del menor – Tendrás arrugas antes de llegar a los 40.

– Tu tienes 60 y no te veo ninguna.

Con una sonrisa siniestra y una pose poco amistosa, HyukJae se acercó al menor y lo tomó del hombro.

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