Salvaje Juventud [HIATUS]

26. Aún má- ¡Nagisa, no me delates!

—¿¡Nokia, cómo llegaste tan pronto?! —parece que la oji verde acaba de reaccionar.

La mayor bajó de las ramas.

—Creo que en serio necesitas prestar atención por donde pasas. Y también tú, Nagisa. No están a más de cincuenta metros de donde están todos, y me fue sencillo encontrarlos aquí.

La menor de las hermanas pareció pensárselo un poco.

—¿Entonces aún hay oportunidad de conseguir algunos dulces?

Nokia desvió la su mirada —podré saber de caminos o algo así, pero no sé dónde venden dulces...

—Entonces no tiene gracia —reprendió Kumi.

—Dejen las quejas para más tarde, ahora mismo debemos volver y conseguirles unas buenas clases de orientación a los enanos —dijo Karma saliendo de detrás del mismo árbol que su rubia compañera.

Nagisa rió nervioso asintiendo.

043 suspiró —lástima que no estaban más lejos, hubiera pasado más tiempo allá atrás con Karma— y señaló el árbol del que salió el pelirrojo.

—¿Estás bien, Nok? —preguntó Kumi ante la extraña actitud de su hermana.

La mayor asintió los hombros —no lo sé, pero estoy segura que no estoy enferma físicamente.

Mantuvieron una pequeña discusión mientras volvían a la posada donde habían decidido hospedar a la clase E.

044 seguía muy decepcionada de no haber podido seguir un rastro tan simple, Nokia se burló de ella y Kumi le reprochó por ello justificándose con la decisión de seguir la enciclopédica guía creada por su objetivo.

—¿Esperar a que los encuentren? ¿Enserio siguieron eso? —dijo Nokia.

—Eso mismo —confirmó su hermana.

—Los enanos tienen un punto, eso nos ayudó a salvar a Kaede y Kanzaki hace rato —salió Karma al rescate. Solo él molestaría a Nagisa.

—Ese... es un muy buen punto —respondió Nokia.

La peli negra rió celebrando —el titán está de mi lado~ —sonrió—, ahora a seguir buscando mis dulces.

—No te rindes con esas cosas, ¿no? —rió esta vez la rubia mayor.

—¡Nunca!

—Iré a ver si Kayano-Chan tiene algunos dulces —se despidió Shiota encaminándose por el bosque.

—¿Por qué no se nos ocurrió eso en un inicio? —cuestionó Karma.

—¡Hey, esa es mi línea! —reprochó Kumi—. Pero ya que... ¿ustedes son pareja? —siguió, codeando a su hermana.

—No he hablado de sentimientos con Karma...

—Veo que tienes problemas en el amor, hermanita.

—Ah, tú no estás en la mejor posición para decir eso, Kumi. ¿Por qué buscas hablar de eso cuando estuviste perdida con Nagisa-Kun en el bosque? —desvió el tema el pelirrojo por su incomodidad al respecto.

—¡Es cierto! ¿Como fueron tus momentos con él? —interfirió Nokia con curiosidad.

—Sólo fuimos a buscar dulces, nos perdimos y seguimos el manual de supervivencia de Korosensei...

Karma rió mezquino.

—¿Dónde quedaron los detalles~?

—Ah...