Salvaje Juventud [HIATUS]

13. No estoy tartamudeando

Cuando faltaban quince minutos para el toque de la campana, la rubia mayor vió a las chicas nuevas.

—Hey, ustedes dos—. Dijo señalándolas —Estoy segura que no las había visto antes, mi nombre es Irina Jela-...

—¡Bitch-Sensei! Su nombre es Bitch-Sensei—. Le interrumpió Karma.

—¿¡Qué tienes en contra de que las nuevas me tengan respeto!?

Irina se notaba bastante irritada por su tono meloso de voz, parece que nuestras protagonistas encontraron a otro blanco para molestar.

—Somos las nuevas. Mi nombre es Kumi y ella es Nokia, más te vale mantenerte alejada del objetivo—. Interrumpe de una manera amenazante.

—Bueno, aquí termina la clase por hoy, no olviden leer algún libro de William Shakespeare en inglés y hacer un pequeño resumen para la próxima clase.

-Claro, los maestros siempre se salen con la suya poniendo tareas a último minuto-. Pensó Maehara lamentándose.

—Nerufufufu~ ¿A que se deben sus caras largas? ¿Acaso no se alegran de verme?

Korosensei recién ingresaba a su salón viendo las expresiones de sus alumnos al escuchar acerca de su tarea, después de todo por algo estaban en la clase que estaban.

—Ah~ Korosensei~, ha venido a visitarme~.

Los presentes ya acostumbrados a la situación la ignoraron.

—¿No le dije que se alejara del objetivo? Es nuestra presa, Bitch-Sensei.

Aparentemente nuestra 044 es demasiado posesiva. Es eso o quiere la recompensa.

La rubia se sorprendió un poco por la manera en la que una estudiante de secundaria le habló. Si ella supiera seguro se sorprendería e intentaría usar eso a su favor.

Cuando volvió a ser recreo se juntaron nuestra pareja de protagonistas con Karma y el pequeño Nagisa.

—¡Hola!— Saludó amablemente el peli celeste.

—Enana, poste de luz—. Quien hablo ahora fue el pelirrojo.

Cabe destacar que Nokia es ma alta que Kumi por al menos diez centímetros, tal vez es un poco más baja que Karma, mientras que Nagisa es más pequeño que Kumi por un centímetro.

—Hola, chicos—. La rubia contestó de manera educada.

—Como iba diciendo. ¿Podría hablar contigo, Nokia?

Si el objetivo del Akabane era poner nerviosa a la chica mayor, en definitiva lo estaba logrando.

Nokia se señala a si misma y dice —¿Eh? ¿Conmigo?

Karma ríe ante eso. —Yo no veo otro poste de luz por aquí.

El ojimercurio puso su mano como si quisiera ver a lo lejos y volteó su mirada en varias direcciones.

—¡Ya deja de decirme así!

Ella le había dado una patada al chico antes que el pudiera hacer nada más que fijarse en los detalles.

—Ustedes dos si que tienen la mala costumbre de atacar a las personas... ¿Lo de tu pierna son números?

Por el tono usado al formular la pregunta se notaba su sorpresa.