Señor

414 48 3
                                    


Rápidamente me bajé del vehículo de Jae y traté de caminar lo más rápido posible para tomar mi equipaje, quería saludar a mi madre lo antes posible. Necesitaba una abrazo de ella, Jae llego antes que yo a la cajuela y sacó de allí mi maleta con mis bolsitas.

          —Yo las llevaré, ni siquiera puedes caminar bien.

Lo miré y asentí, por lo que comencé a caminar para llegar a la puerta. Utilice mis llaves y abrí la puerta, mi casa lucía tan hermosa como siempre y olía genial. Entramos y Jae subió al segundo piso para dejar mis cosas, yo busqué a mi madre hasta que la encontré.

          —¡Mamá! —exclamé al verla sentada en el patio leyendo un libro de medicina. Ella me vio y sonrió grandemente.

          —¡Mi hija! —ella llegó donde mí y me abrazó suave pero a la vez fuerte— Me alegra tanto verte, preciosa

          —No sabes cuanto te extrañé y también a esta casa, solo pensaba en volver

          —¿Tanto?, ¿no fue divertido?

          —No como pensé, pero no estuvo mal

Mientras seguía en los brazos de mi madre, oí pasos acercándose y obviamente sabía quien era. Me alejé de mamá y lo miré, no podía ser más guapo.

          —¿Qué le ocurrió a tu cabello Jae? —le preguntó mamá

          —Mm... no sé, solo quería un cambio. Además es mucho trabajo estar manteniendolo rubio

Mi madre asintió y sonrió, de verdad la había extrañado. En un segundo sentí el sonido de una llave seguido de el sonido de la puerta principal, miré a mamá y ella tenía una expresión de preocupación mezclada con enojo.

Me giré para ver quien venía, al verlo asomarse detrás de la pared mi corazón se detuvo. Miles de preguntas viajaron por mi mente y muchas sensaciones también.

          —¿Qué haces aquí? —preguntó mamá— Creí que lo habíamos dejado claro

          —¿Papá?

          —Hola.. hija

Y ahí estaba, entrando como si nada a nuestras vidas con una inmensa sonrisa. Como si se mereciera que lo recibiéramos con la misma sonrisa, se notaba esperando una brazo de mi parte adornado con una sonrisa en mi rostro.

          —¿No me darás un abrazo?

          —¿No escuchas lo que digo? —replicó mi madre— Dijimos que irías despacio

          —Eso lo propusiste tú —respondió mi padre

          —Eh... —dijo Jae

          —¿Jae? —mi padre se sorprendió al verlo— ¡Wow, que alto estas!, no queda nada del pequeño que recuerdo.

          —Pablo...

          —El mismo —sonrió mi padre

Jae sonrió y se acercó a él, ambos se dieron un apretón de manos y se abrazaron un segundo. De verdad Jae era demasiado alto.

El chico volvió a mi lado y me sonrió, en su mirada vi algo real. Estaba feliz por mí, de seguro pensaba que era la más feliz con la visita. Le tomé la mano, besé la parte superior de la mano de Jae y miré a mi padre.

          —¿Por qué estás aquí papá?

          —¿Que por qué? —rió— Porque es mi casa... quería verte y saber como te encuentras

Who's Next? / Jae y tú (Final cancelado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora