66| La alejaré de ti.

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Greyson.

He estado ignorando a las chicas y a Cotton durante todo el día, ellas han tratado de acercarse a mi pero me he limitado a encerrarme en el baño, a caminar por otros pasillos y a sentarme lejos de ellas en las clases y si, me duele demasiado ya que son mis mejores amigas, las conozco desde que somos unas niñas, compartimos todo, hacíamos pijamadas una vez a la semana y ahora estar tan distantes está matándome.

Pero por otro lado es mejor así. Un psicópata me ato de pies y manos, me apunto con un arma, toco mi cuerpo e intento asesinar a Ethan, un psicópata que sabe que lo conozco ya que no emitió ni una sola palabra durante todo el tiempo que estuvimos en ese salón.

—Preciosa.—Cierro la puerta del casillero, detrás de él está Ethan con un brazo recostado del casillero y media sonrisa.—Qué gusto tenerte de vuelta.

—Creo que ya debía volver.—Sonrió sin mostrar los dientes.

—¿Cómo te sientes?—Me quedo en silencio.—Mmm, ¿Quieres ir a comer algo después de la escuela?

—Tal vez otro día.—Al girarme las chicas están ahí, de pie frente a mi ambas cruzadas de brazos, mi cuerpo se sobresalta del susto.—Joder, que susto.—Llevo una mano a mi pecho.

—¿Por qué llevas todo el día ignorándonos?—Preguntan al mismo tiempo.—¿Qué sucede?

—Nada.—Respondo con sequedad.—Con su permiso.—Intento marcharme pero ambas me lo impiden.—Quiero estar sola, ¿Me dejarían pasar por favor?

—Todas para una y una para todas.—Dice Venus en un susurro.—Los problemas de una son los problemas de todas.

—Creo que ella quiere pasar.—Ethan se coloca a mi lado defendiéndome.

—Tú no te metas.—Lo señala Lea en un tono amenazante.—¿Qué te ha dicho el tal Lucifer? ¿Te dijo algo negativo sobre nosotras? Porque si es así y le hiciste caso te juro que voy a matarte.—Suelto un suspiro, quito el cabello que está cerca de mi rostro y escondo un par de mechones detrás de mis orejas.—¿Qué te sucede?—Me quedo en silencio.—Mejores amigas hasta el final, ¿Lo recuerdas?—Ella me extiende su mano, la miro unos segundos y después la miro a ella negando varias veces con la cabeza.

Los recuerdos de Lucifer apuntándome con su arma, amenazando a Ethan y tocando mi cuerpo vuelven a invadirme nuevamente.

—Yo no confió en ustedes.—Le digo con un hilo de voz, ambas me miran sin poder creer lo que acabo de decir, Lea vuelva a llevar su mano a su lugar.—Lo siento.

Sin esperar respuesta me alejo de ellas, puedo escuchar como gritan mi nombre pero me limito a seguir caminando en dirección a cualquier sitio donde ambas no estén. Mis ojos están llenos de lagrimas en cuestión de segundos, de todo lo que me ha tocado vivir esto ha sido lo más duro, es duro separarme de mis dos mejores amigas.

Olvidando por completo que mi padre aún no regresa de su luna de miel tomo otro camino diferente esta vez hacia mi próxima clase.

Creo que aún no estoy lista para estar de vuelta en este lugar.

Ethan.

Por amor a Dios, ¿Qué hago persiguiendo a Greyson Reeves? Esa chica tiene una vida complicada, tal vez, solo tal vez un poco más complicada que la mía. Aunque creo que esa es la razón por la cual la persigo, somos casi iguales, tenemos demonios ocultos, tenemos secretos y en cierta forma personas que quieren destruirnos.

No, no todo en mi vida es color de rosas, no soy un adolescente con padres despreocupados que esta solo en una ciudad y puede hacer lo que quiera. Yo no puedo hacer lo que quiera, las personas a las cuales mis padres estafaron son personas poderosas con sed de venganza y yo debo estar oculto, bajo perfil.

HABITUALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora