Greyson.
Después de haber dormido todo la noche y parte del día me siento lista para prepararme para el baile, no les negaré que estoy nerviosa y ansiosa por ver las cosas que sucederán esta noche en el baile y en la fiesta qué hay después, considero que tengo el vestido perfecto y que va acorde conmigo, con lo que soy. Dejando a un lado mis nervios y mi gana de que todo sea perfecto me sorprendo al ver el enorme equipo que inunda mi sala, hay tres mesas de maquillaje, tres estilistas y también mi madre, ella está de pie frente a mi y mis amigas con una enorme sonrisa.
Nos guía a cada una a una silla, al sentarme en la que me corresponde veo como mi pelo mojado cae detrás de mi espalda, la estilista de piel clara y cabello rojo comienza a tocarlo mientras le susurra cosas a mi madre. Me quedo mirándome fijamente en el espejo, viendo mi rostro, mis facciones y perdiéndome en mis propios pensamientos que son sobre Bruno, el estará ahi hoy, con Taylor mientras que yo estaré con Cotton.
—Voy de acuerdo con el corte de cabello.—Salgo de mi trance mientras muevo la cabeza a ambos lados negando varias veces.
—No, no, no.—Niego rotundamente.—No cortarán mi largo cabello.
—Se que amas tu cabello ya que está súper cuidado pero, ¿Por qué negarte a un corte? Tu cara se verá más definida, tendrá más volumen y te quedará mejor, no está mal cambiar de vez en cuando.
"No está mal cambiar de vez en cuando" Esas palabras retumban en mi cabeza por unos cuantos segundos, asiento varias veces con la cabeza, ella se acerca a mi con las tijeras y comienza a cortarlo, agarro ambos lados de la silla tratando de no salir corriendo, ya dijiste que si, ahora tienes que aceptarlo.
Alzo una ceja al ver como mi cabello ahora cae un poco más arriba de mis hombros, aún están húmedos e imagino que le faltan un par de cosas pero hasta ahora me gusta que esté corto, me queda mejor de lo que creí.
—Déjate llevar pequeña, te verás asombrosa.—Dice mi madre acariciando mi hombro.—Por cierto, ya llegó tu vestido.
—¿Crees que me quede bien?—Le preguntó algo preocupada, ella me mira con cara de pocos amigos.
—Eres Greyson Reeves, todo te queda perfecto.—Asiento varias veces.
"Eres Greyson Reeves"
Siempre recuerda eso.
Cotton.
Me miro por última vez de arriba hacia abajo, no les negaré que la madre de Greyson tiene excelentes gustos a la hora de elegir atuendos para actividades importantes como por ejemplo, el baile. Como el vestido de Greyson es en un color bastante llamativo el mío debía ser negro ya que según ella toda la atención caerá en ella y no en mi, aunque por el simple hecho de ser la pareja del momento ya la atención cae en ambos.
Estoy tan nervioso que aún no he salido del auto, me intriga ver como se ve mi chica, como le quedará ese hermoso vestido que me mostró su madre, como se maquilló y como tiene su cabello, me intriga saber que pasará esta noche, se que si ganamos las coronas bailaremos solos en el centro de la pista durante un minuto, la tomare de la mano y la haré sentir como una reina real, como mi reina.
Lea y Venus salen de la casa, Venus lleva un vestido azul celeste tipo princesa mientras que Lea lleva uno azul oscuro bastante escotado. Cómo saben Venus ira con Smoky mientras que Lea ira con un chico que conoció el día que lavábamos autos, el mismo chico que primero le coqueteo a Greyson, en fin. Por otro lado, decido salir del auto, dejo la puerta abierta ya que en pocos minutos volveré a entrar nuevamente esta vez, al lado de mi cita perfecta.
Paso ambas manos por mi saco tratando de que no se arrugue, con cuidado comienzo a caminar hacia la casa, las chicas se quedan mirándome asombrados y es que si, estoy jodidamente ardiente.
