🌼10, 9, 8, 7 y 6🌼

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Jeongin acaba de entrar a la primaria y estaba realmente feliz por eso, ya que por fin podía estar en la misma área que sus amigos, pero no todo era tan bueno.

Ese día sus ojitos empezaron a experimentar ciertos fallos que no le permitían ver bien correctamente lo que su maestra escribía en la pizarra, veía de una forma borrosa y distorsionada, algo que realmente odiaba porque no podía hacer tarea con facilidad y no podía leer bien.

Su mamá lo llevo al día siguiente al oculista para que le graduaran el aumento para unos lentes, para esto Jeongin no sabía exactamente lo que pasaba hasta que unos días después le entregaron esos aparatos para sus ojos.

¿Qué si los odiaba? Eran molestos, incómodos y se resbalaban con facilidad, y lo peor de todo es que si se los quitaba no podía ver claramente.

Cuando su mamá lo llevo a casa de Felix en donde el resto de los chicos estaban, lo primero que hizo fue empezar a llorar porque lo molestaban en la escuela por ser el único de aula que usaba anteojos.

Pero no era su culpa ver mal, ¡según sus libros era culpa de la genética!

Y todavía Felix se atrevía a preguntar que era lo que Jeongin llevaba en sus ojos, cosa que hizo llorar mucho más al menor, por lo que el de pecas se sintió muy mal, tanto así que también empezó a llorar. Hyunjin, al ver a sus dos menores derramar lágrimas, también empezó a hacerlo. Jisung no sabía lo que estaba pasando, así que entró en pánico haciendo que también iniciara con su llanto, y Seungmin, al ver a todos los menores lloriqueando, no le quedó de otra que hacerlo también.

Los tres mayores estaban tan desesperados por no saber como lidear exactamente con la situación, así que solo se dedicaron a guardar silencio esperando a que el resto de calme.

Después de apróximadamente una hora, los menores pararon con el llanto, pero Jeongin todavía se sentía mal por tener que cargar con esos lentes por el resto de su vida.

—Yo también uso lentes, Jeonginnie —le dijo Minho, quien sacaba sus anteojos de su mochila para mostrárselos al nombrado—, pero no los uso todo el tiempo, solamente cuando voy a hacer tarea y esa clase de cosas aburridas.

—¿Y para dormir? —preguntó con su nariz roja y sus ojitos hinchados.

—¡Obvio no! —Minho rio divertido—.
No los usarás todo el tiempo, Jeonginnie.

—Y no les hagas caso a los niños de tu salón —añadió Hyunjin—, ¡son unos tontos!

—¡Hyunjin! —lo reprendió el mayor haciendo que el nombrado puchereara—. Lo que Jinnie quiso decir, Jeongin, es que no hay que escuchar las cosas malas que dicen las personas. No te sirven para nada porque solo buscan hacerte sentir mal. Mañana vuelve a la escuela con tu sonrisa y siéntete feliz por ser el único con gafas.

—Te quedan muy bien —afirmó el Lee mayor.

—Cuando me salieron pecas me pasó lo mismo que tú, Jeonginnie —admitió Felix—. Mi mami me dijo algo que no recuerdo muy bien... —Frunció el ceño y apretó los labios intentando recordar—. ¿A oídos ciegos palabras sordas?

—No, Lix. —Changbin rio leve—. Lo que quisiste decir es: a palabras necias, oídos sordos.

—¿Y eso que significa? —le cuestionó Seungmin.

—No lo sé, ni siquiera sé que es necias... —Alzó los hombros restándole importancia.

—Ignora lo malo, acepta lo bueno —
explicó Chan viendo que Jeongin notando se comenzaba a sentir mejor.

Cuando alguien de ellos se sienta mal, ellos harán todo lo que esté en sus manos para hacerse sentir mejor.

Yang se alegró cuando entendió el uso correcto de los lentes y al darse cuenta que aun así, sus amigos lo iban a querer igual.

Se quitó sus anteojos y los guardó para luego ir con sus amigos a jugar al jardín trasero.

Mientras jugaban, Chan vigilaba que ninguno de ellos saliera herido, aunque a decir verdad eso ya era demasiado normal, lo que realmente vigilaba era que no hicieran una estupidez enorme como la vez en la que se quedó dormido y los chicos destrozaron la valla que separaba la casa de Minho con la de sus vecinos.

¿Cuál fue la excusa? Su balón se les había ido a la casa ajena y crearon un plan para recuperarlo: Jeongin planeó todo y Seungmin solo les decía que cuando se metieran en problemas los acusaría; Jisung y Felix subieron la cerca para cruzar a la otra casa; Hyunjin decidió ignorar la situación sabiendo que todo saldría mal; Changbin les daba ánimos a los chicos y Minho... él sabía que iba a ser mil veces mejor irle a preguntar a los vecinos si podrían devolverles la pelota, pero sabía que los chicos no le harían caso, así que lo vio como un caso perdido y solo se reiría cuando pasara algo.

Chan solo se había dormido veinte minutos, y cuando despertó, todo era un desastre.

El resultado fue un vecino demasiado enojado porque Felix y Jisung habían caído sobre sus plantas con todo y cerca, y de paso las dañaron. Ambos se lastimaron mucho y Seungmin solo soltó un: "se los dije" y para luego irles a avisar a las señoras Lee sobre lo sucedido.

Hasta el día de hoy Chan se seguía culpando y por eso se encargaba en cuidar bien a sus amigos.

Porque justamente no quería quedarse sin sus mejores amigos.

🌼GROW UP🌼 {Stray Kids}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora