Capítulo 1.38- Helado

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- Falta algo?- preguntó luego de bajar la cuarta caja. Habían pasado varias semanas desde ese día y no había tomado mejor decisión que vivir aquí, con ella

Negué rápidamente, mientras llevaba lentamente mi valija con ropa. Era más que obvio que no solía hacer esas cosas

- No seas floja- golpee suavemente su hombro, notando la comisura de su labio subir lentamente- que ya estés acostumbrada a tener esa cicatriz no significa que vas a castigarme por golpearte-

Habíamos usado sólo una vez su cuarto y fue simplemente para limpiar, porque su empleada no entraba ahí, por suerte

Habíamos decidido dejarlo y que ambas tengamos una copia de la llave, por las dudas

- Sería el último fin de semana- rebatió alzando una ceja- serías libre-

- Me siento libre estando contigo- confesé, mientras pasaba mis manos por detrás de su cuello- porque te amo- susurre, antes de tomar su labio inferior y darle una rápida mordida

- Y yo también te amo- susurró con sus manos fijas en mis caderas- pero hoy es noche de sexo- no pude evitar reír ante su comentario, contagiandole la risa a ella, llenandome de ternura al notar lo hermosa que se veía cuando sonreía

Asentí suavemente, mientras guardaba mis cosas, notando en su expresión cierta duda

- Pasa algo?- pregunté suavemente, acariciando suavemente sus mejillas

Lanzó un suspiro pesado, intentando encontrar las palabras correctas- te fuiste porque creías que no iba a ser buena madre?- preguntó con su mirada perdida- sé que tampoco me comporte de lo mejor, pero podrías haberme dicho que estabas embarazada-

- Supongo que fue el enojo- confesé haciendo una mueca- pero seríamos buenas madres- completé sonriendo junto a ella, mientras seguía con mis caricias

- Sé que no volvimos a hablar del tema, pero prometo no volver a hacerlo- dijo segura, pegando su cuerpo al mío- no te mereces eso, te mereces que te ame y q te respete- susurro mientras asentía ante sus palabras, intentando entenderlo para ella misma

- Te amo- repetí una vez más, juntando nuestros labios, sin permitirle contestar, simplemente callé cualquier tipo de comentario de su parte, mientras que ella parecía no tener problema en que lo esté haciendo, notando como lentamente mi cuerpo caía en el centro de la cama- es temprano- susurre notando su picardía, mientras tiraba de su blusa

- Pero yo no puedo verte y no hacer nada- Volvió a unir nuestros labios, mientras sus manos se adentraban en mi blusa, apretando mis pechos a su antojo, largando un penoso gemido que solo hizo que su bulto choque con mi muslo descubierto, tomando mi mano rápidamente, corriendo como dos adolescentes antes de que nos vean, entrando en el cuarto rápidamente

- No voy a castigarte- susurro cuando estuve a punto de arrodillarme

- Podrías hacer otras cosas- dije sin problema, notando como sus ojos se iluminaban con un brillo especial, para después salir corriendo de la habitación, mientras me sentaba en el comienzo de la cama

Qué quería hacer?

Volvió rápidamente con un pote de helado, sonriendo como un niño con juguete nuevo, mientras dejaba su pantalón a un costado, sin poder evitar lanzar una carcajada al notar que sus boxers traían dibujos animados, ganandome una mirada de odio de su parte

- Pensaba que podríamos mirar una película con esto, pero se podría dar una mejor utilidad- susurro besando suavemente mi frente- sólo déjame aprender algo nuevo y deberías decirme si algo no está bien- besó mis labios resecos y quitó suavemente mi camisa, haciendo todo lo contrario a lo que parecía demostrar el cuarto

- Podrías usar seguido esto- dije tirando del elástico de su bóxer, mientras mordía mi labio inferior luego de escuchar un gemido frustrado de su parte

- Paula me los había regalado como disculpas por romper mis favoritos- alcé ambas cejas ante su confesión, mientras ella desprendía mi brasier- parece ser que no sabía mi talla y suelen apretarme, como ahora- susurro lo último, antes de sentir sus manos posarse cerca de mi cabeza, sintiendo su respiración acelerada mientras los bajaba de un tirón

Dejé a sus superhéroes a un costado, antes de conectar nuestras miradas, notando un brillo diferente. Sus pupilas estaban dilatadas, pero estaba demasiado tranquila, no parecía estar apurada y eso parecía ser algo nuevo

Se sentó a mi lado luego de que ambas terminemos desnudas, quedando enfrentadas en el centro de la cama, mientras dejaba el pote destapado de helado entre nosotras, tendiendome una de las dos cucharas

- Qué se supone que debería hacer?- pregunté luego de notar como llevaba algo de helado a su boca

Sin esperarlo, el resto recorrió desde mi hombro hasta uno de mis pechos, sintiendo esa clásica diferencia de temperaturas, mientras sentía sus húmedos labios recorrer la misma zona, arqueandome en busca de más, mientras ella se volvía a separar

- Entiendes?- preguntó alzando una ceja mientras relamia sus labios. Era mi turno

Tomé el pote mientras me acercaba a ella, pero ella pareció pensar que iba a besarla, si no fuera porque el helado bajó desde su vientre, pasando al lado de su erección, tomando más para dejarlo en la cara interna de sus muslos

Comencé a limpiar la zona, mientras una de sus manos se enredaba en mis cabellos, dejando un suave beso en el tronco de su gran miembro, siguiendo con mi camino, volviendo a mi posición anterior, notando un suspiro pesado de su parte

- Quieres jugar a eso?- preguntó altanera- porque podría hacer que estés igual de frustrada que yo-

- Quieres que vaya al punto?- pregunté alzando una ceja, mientras ella se recostaba, guiando mis caderas hacia su rostro, sintiendo el frío helado correr por mis muslos, haciendo lo mismo antes de que lleve su miembro a su boca, al mismo tiempo que su lengua comenzaba a jugar con mi clitoris, sin entender como terminé probando cosas diferentes, sólo que no sabía que ambas lo estábamos haciendo...

Mi Jefa- [Caché]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora