Polo Opuesto { Flamantha }

Capítulo Final. Vuelta a los comienzos

1 año más tarde

- Estás preciosa Tita Samanzi – habló Elia dándole un clavel blanco a Samantha.

Ese era su inicio tras años separados y sin siquiera saberlo, el clavel blanco. Flavio había dibujado uno específicamente para ella poco después del día de los oficios. Había sido su comienzo en una nueva etapa y debía estar en el inicio de aquella nueva etapa.

- Tú estás más guapa.

Elia había decidido ponerse un vestido azul marino de tirantes que caía hasta sus rodillas, ella también llevaba un clavel blanco a modo de diadema en el pelo.

- ¡Ay, Sam! – Eva y Maialen entraron apuradas a la sala seguidas por Jimena que cargaba una maleta enorme.

- Menos mal que habéis llegado – expresó Samantha a punto de llorar.

Toda la situación en general le estaba haciendo llorar mucho más de lo común, tenía las emociones a flor de piel. Aquel lugar conseguía descontrolarla por completo.

- Este campamento está a tomar por culo – se quejó Jimena soltando la enorme maleta en el suelo.

Eva y Maialen habían entrado sin nada así que Samantha supuso que la habían usado como mula de carga.

- Anda, no seas quejica, ven aquí – la rubia abrió los brazos esperando el cuerpo de la madrileña que acabó abalanzándose sobre ella a los pocos segundos rodeándola con fuerza.

- No me puedo creer que te vayas a casar Titi – habló Maialen dando saltitos compartiendo emoción con Eva.

- Yo tampoco – confesó Sam.

- No estoy tan nerviosa desde que te lo pidió la verdad.

Samantha recordó las imágenes del día en el que Flavio le pidió matrimonio, no había sido solo cosa suya, sus fans habían podido participar en la pedida, al igual que la familia y amigos.

Había sido en su último concierto de la gira, el más importante, podía jurar que todo su pueblo y su gente querida estaba en ese recinto.

Había acabado la última canción del repertorio, pero ninguna luz se apagó, los cañones de confeti no saltaron, ella se giró a mirar a Sergio que le sonreía como si nada.

- ¿Qué ha pasado? – preguntó sin emitir ningún sonido.

Su nombre empezó a sonar en centenares de voces diferentes. Se giró sobre sus talones, las pantallas del escenario mostraban cada vez más personas, se grababan de todas las partes del mundo, todas decían lo mismo, "Samantha".

De repente las pantallas se apagaron, Samantha frunció el ceño sin entender nada, por un momento se le había olvidado que estaba en el Wizink Center, delante de más de diez mil personas. Cuando volvió a mirar al publico unas letras gigantes le llamaron la atención. Sergio empezó a sonreír más, y ya se le habían sumado Eva, Maialen, Jimena y cómo no Dani.

"¿Te quieres casar conmigo?"

Samantha se tapó la cara en cuanto leyó aquellas cuatro palabras perfectamente ordenadas. Flavio apareció en el escenario para perder su vergüenza por un momento que podía ser el más importante de sus vidas.

Cuando Sam se giró vio a su novio arrodillado en el suelo en medio del escenario, entre sus dedos tenía el anillo más fino que había visto nunca. Se parecía a el trozo de hierba que habían usado para casarse en sus vacaciones por Escocia, ella solo dijo "sí" pero fue suficiente para que le hiciera a él y a ella mismo los más felices del mundo.