Mi Adiós

1K 61 74
                                    

Hoy es un día muy especial para Sonic y compañia, hoy es el cumpleaños del zorro favorito de Sonic. Si bien, todos los preparativos eran coloridos y la música empezaba a sonarse ya.

En la habitación del mismo festejado todo eras gris, todo era oscuro, no tenía ganas de salir de su habitación, no quería tener que fingir la sonrisa una vez más. El zorro se encerraba en su habitación cada día, no quería salir, ¿motivo?, no le quedaba nada por que vivir.

Cuando conoció a Sonic fue el mejor momento de su vida, tenía su primer amigo en muchos años, amaban correr juntos, jugar vóleibol en la playa con Knuckles y Amy, sin embargo, la vida le jugo un mal pase al zorro.

Cuando aún era joven se le diagnostico una enfermedad mortal, además de ciertos padecimientos allegados a esa dichosa enfermedad. No podía jugar más con sus amigos, no podía correr más con Sonic, ni siquiera podía usar sus colas para volar sin tener que recurrir a su inhalador.

No obstante, si no podía ejercitar su cuerpo, podía ejercitar su cerebro, fue así cuando empezó a leer más de lo habitual, empezó a generar cierto gusto por temas de ciencia, psicología, letras y varias cosas más. No obstante, la vida jugaba mal para el una vez más, después de varias recaídas, se le detecto un falló... ¿Que hacer si te dicen que morirás?, bueno, el no dejo que le afectará.

Pero, como todos, cayó en una gran depresión, dejo de hablar con varios de sus antiguos compañeros, dejó de ser cariñoso con Sonic y Amy a la cual consideraba como su hermana. Empezó a desvelarse, no sólo eso, empezó a generarse un miedo a dormir, miedo que le hizo pasar noches en vela, aún así, cuando dormía, un repentino ataque podría suceder.

¿Así quien querría dormir?

Pero, no todo era malo, siempre había un lado positivo, empezó con un hobby que le fascinó desde que empezó. Le encantaba crear historias de cualquier tipo, a menudo imaginándose a él en sueños que nunca podría alcanzar, así pues, con su capacidad mental empezó a escribir pequeñas historias.

Eran malas, lo admitía, no obstante, tenía una amiga que le ayudaba con eso, no conoció solo a su mentora, sino a una confidente, alguien con quien hablar y no sentirse sólo.

Ella lo escuchaba, le aconsejaba, le entendía y siempre le daba ánimos de seguir. Aunque, no todo es para siempre, de un momento a otro se dejaron de hablar, pasaron cosas en sus vidas que no se dieron cuenta cuando dejaron de hacerlo. Fue entonces cuando nuestro zorro favorito tuvo un sueño, se veía como un profesor, le encantaba ayudar a las personas, enseñar lo que aprendía y compartir sus trucos.

Sin embargo, Sonic y Amy no podían costear esa gran visión pero, conocen a nuestro zorro, está vez no se dejó vencer por el miedo y salió a conseguir varios empleos. Así recaudó para su gran sueño, se empeñó día y noche a estudiar los temas, no sólo eso, también escribía en sus ratos libres para despejar su mente. No obstante, está vez no tendría un final feliz, un examen que hizo de manera incorrecta le sacó de su sueño.

Está ocasión el golpe fue más duro, sentía que todo lo que soñaba se rompía, que no importará cuantas veces se levantara del suelo, la vida le daba un golpe más fuerte que el anterior. Una vez más, se dejó vencer por una situación, entrando de nuevo en su depresión.

Aquí es dónde arranca la historia....

Sonic y los demás querían alegrar al menor, todos asistirían, tratarían de darle algo que el zorro pudiera disfrutar, todos se empeñaron en darle la mejor fiesta de cumpleaños de su vida.

—¿Donde pongo el helado? — preguntó el equidna feliz.

—En la ventana, le dará el sol. — habló el cobalto colocando unos adornos.

Sontails One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora