Caminamos tomadas de las manos, mientras que ella simplemente parecía intentar apurarme para llegar rápido a buscar algo de comida.
- Con cuantas personas saliste?- Pregunté suavemente, luego sentarnos a esperar nuestro pedido y de abrazar al dueño del lugar, siendo un conocido de su familia.
- Con mi familia solía salir.- Dijo sarcástica.- Tuve seis citas, tres terminaron en sexo, dos repitieron y ninguna quería una relación conmigo.- Dijo haciendo una mueca.
- Y por qué no me cuentas en esa lista?- Pregunté sonriendo, mientras tomaba mi mano por encima de la mesa.
Lanzó un suspiro pesado, antes de hablar:- Vos estás secuestrada, estás obligada a estar conmigo,- negué ante cada una de sus acusaciones.- y no te cuento en esa lista porque no sos ni siquiera similar a esas idiotas.-
- Y si no me siento obligada? Y si me encanta estar con vos? Y si me parece lo más hermoso pasar tiempo juntas?- Rebatí notando cierta duda en su rostro.
- Yo te llevé conmigo a la fuerza...-
- Porque sabías que me cuesta llegar a una decisión rápida y me intentas enamorar "estando secuestrada".- Hice pequeñas comillas en lo último.- Si estaría secuestrada, no esperarías a que yo quiera entregarme a vos, no me dejarías hablar con mi madre, ni siquiera podría salir de la habitación y mucho menos te arriesgarías a llevarme a lugares donde pueden encontrarse más personas.-
- Haces que confirme que te elegí bien.- Susurró sonriendome, mientras besaba el dorso de mi mano, sintiendo como traían una clásica pizza, sonriendo al notar su deseo aniñado de devorar una porción, esperando a que se le conceda lo pedido.
Tomó la primer porción, repitiendo su acción, llenandome de ternura al ver sus mejillas llenas de salsa, mientras seguía comiendo sin darle demasiada importancia.
Pasé una servilleta por su rostro, notando como ella no hacía comentario alguno, esperando a que pueda seguir.
- Es lo más parecido a la pizza de Celia.- Dijo sonriendo, luego de que no quedara ninguna porción.
Salimos del lugar, mientras volvíamos al hotel, teniendo su mano fija en mi hombro, mientras mis manos se aferraban en su cintura.
Sacó su bañador, notando como combinaba ambas cosas, mientras que yo revisaba los míos, observando como ella dejaba sus piernas en el agua.
Me senté detrás suyo, dejando suaves besos en su hombro, sintiendo la tranquilidad que podíamos tener, mientras tomaba mis manos suavemente.
- Mamá cree que volverás embarazada.- Comentó sonriendo, luego de que ambas nos adentramos en la piscina.
Hice una mueca, mientras ella acariciaba mis mejillas.- Tendrá que esperar.- Susurre mientras ella asentía.
- Siento que por más de que tenga toda tu vida escrita, nunca terminaré de conocerte.- Comentaba un excelente punto.- Por ejemplo, prefieres dormir o comer?-
- Comer.- Respondí sonriendo con cierta picardía.- Comerte.- Me corregí, notando su cambio de expresión, riendo junto a ella.- Qué prefieres, dormir o comer?- Volví a preguntar.
- Creo que hace unos meses te hubiera respondido que comer, pero ahora creo que hacen competencia, porque me encanta dormir con vos.-
IDIOTAS ENAMORADAS; gritaba mi subconsciente, sonriendo como una estupida.
- Última vez que lo hiciste? Sin mí.- Expliqué notando como lo pensaba.- Y a dónde.-
De dónde sacaba la seguridad para preguntarle esas cosas? No tengo ni idea, solo que le tenía demasiada confianza.
- Hace más de un año y fue en Cartagena.- Dijo tranquilamente.- No me preguntes quién era, porque tenía demasiada resaca y no quería estar cuando despierte.- Su cara de asco me daba a entender que no fue una buena experiencia.- Última vez que lloraste viendo una película romántica?-
Era notorio todo lo que podía saber de mí, pensando por un momento la respuesta.- Tres meses.- Dije tranquilamente.- Qué clase de película prefieres ver?-
- Me la paso sentada en un sillón, hace años no veo una película con palomitas hechas por Celia y abrazó mi almohada cada vez que veo algo que me da miedo.- La besé suavemente, notando cómo parecía comenzar a tener una idea.
Pasó una toalla por su cuerpo, mientras sacaba Persuasión de su bolso de mano, volviendo a mi lado.
- Frase favorita.- Dijo altanera, rebuscando la página en la que podía encontrarse.
- "Una palabra, una mirada me bastarán para comprender si debo ir a casa de su padre esta noche o nunca."- Relate, notando como me escuchaba atenta.- Supongo que era un gran gesto ir hasta la casa del otro y demostrar el amor que podía sentir.- Dije sin problema, mientras ella asentía.
- Buena elección.- Susurró besando mi mejilla, entregándole el libro, rebuscando su parte favorita.- Lo leí una mañana mientras intentaba pasar el tiempo y me gustó.- Explicó tranquilamente, antes de relatar:- "He estado pensando acerca del pasado, y tratando imparcialmente de juzgar lo bueno y lo malo en lo que a mí concierne. Y he llegado a la conclusión de que hice bien, pese a lo que sufrí por ello."- Secó la lágrima que cayó sin ningún permiso, abrazandola fuertemente.- Además de todas las que llegue a darte y la que te dije la primera vez que me viste.- Agregó tranquilamente, mientras juntaba suavemente nuestros labios, notando la suavidad que tanto la caracterizaba.
- Nuestro choque había sido accidental?- Pregunté con cierta duda.
- Sabía que traías el libro, pero no esperaba chocarte.- Explicó sonriendo.- Te estaba buscando, pero me encontraste antes.-
Si mi corazón late acelerado y no hay nada que implique sexo... se podría tratar de amor? Me estaba enamorando de Natalia?
- Celia alguna vez se negó a ayudarte en todo esto?- Pregunté con mis manos fijas en sus hombros.
- Sólo le mostré tu información.- Dijo tranquilamente.- Y le expliqué lo de Federico y me dijo que lo intente.- Susurró sonriendome, mientras volvíamos a juntar nuestros labios.
Sólo algo me quedaba claro y es que debía clara con ella, porque un simple paso en falso y podríamos llevarnos de la peor manera.
Y las pastillas comenzarían a ponerse a prueba muy pronto, rogando porque los pedidos de su madre no se cumplan y no porque no lo quiera, sino que no conocía a Natalia como para acceder a tener un hijo con ella tan pronto...
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Déjame Ir- (Ventino) [Makia]
FanficLo que para Makis fue un simple choque, para Natalia fue la decisión definitiva, esa que cambiaría la vida de ambas, con sus altibajos, con sus peleas y sus malos momentos, para terminar fundiéndose en el amor que tanto se tenían escondido la una ha...