Mi vampiro favorito (EN EDICIÓN)

Capítulo XVI (Ya no eres una niña)

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Acá van a poder ver más acerca de esta novela y otras que planeo comenzar o ya tengo escritas. También van a poder saber algunas curiosidades de Mi vampiro favorito.

Narrador omnisciente:

Los años pasaron, las tensiones se mantuvieron y aún Alma traía ese misterio dentro de ella, el cual aún no se descifraba en su totalidad. 

Tanto el príncipe Juliann como la bruja Christine, aún seguían buscando más información de Anya, sabían que podría ser una época clave para acabar con los cazadores y tomar venganza luego de esperar tantos años. 

La relación entre Alma y Juliann nunca cambió, ya que siempre este tratará de protegerla a toda costa y ella tratará de siempre sacar una sonrisa de ese frío vampiro, aunque a veces haya alguna pelea o discusión. 

Actualmente, la mujer de veinte años; Alma, se encontraba acostada en su cama. Millones de pensamientos y recuerdos venían a su mente, como acostumbraba a hacer, a perderse en sus pensamientos y divagar por su mundo.

Recordó los años que pasaron y cómo evolucionó todo, incluso la relación con Máximo, quien afirmaba ser su novio, pero ella decía lo contrario. En el fondo, no tenía interés alguno en estar con él. 

Esta mujer durante estos años, se convirtió en una chica madura y fuerte. Los años de entrenamiento, educación y experiencias la ayudaron a crecer física y mentalmente. 

Su cabello largo y oscuro llegaba hasta su cintura, sus ojos grises permanecían brillantes y vivos, su rostro conservó la sonrisa que conquistaba y endulzaba a cualquiera, su cuerpo maduró haciéndola ver esbelta y atractiva, cosa que muchos admiraban por los pasillos. 

La realidad era que nadie le movía un pelo, ella estaba interesada en otra persona que se mantenía al margen. 

P.O.V. Alma: 

Apenas despertar, me levanté y corrí a la ventana a ver si al fin la temperatura subió estos días. El Sol estaba perfecto, y la piscina del jardín desocupada. 

Esto de ser la única que disfrutaba del día, me encantaba, ningún vampiro iría a meterse allí bajo el sol. Sonreí feliz y corrí a prepararme. 

Durante todos estos años en el castillo, el señor Juliann me ha dejado conocer y disfrutar un poco más de las instalaciones, incluida la piscina y poder tomar algo de Sol, además de ir a algunas fiestas y bailes más. 

Lo que nunca me ha dejado, es conocer el exterior, conocer las ciudades y visitar diversos lugares. Me encantaría insistirle, pero estos últimos años él no quería nada de pedidos, entonces era mejor no molestarlo.  

Suspiré apenada, algún día sé que me dejará salir, ¿O moriré aquí?

Me puse mi bikini rojo y un vestido suelto arriba de este. Luego de atar mi  cabello y lavar mis dientes, salí de mi habitación y bajé las escaleras rápidamente.

Llegué para desayunar, Anastasia me saludó.

—¿Cómo has dormido? —preguntó Anastasia —¿Irás otra vez a la piscina?

—He dormido bien. —sonreí —Hay que aprovechar el verano, ¿Verdad?

—Si fuera humana otra vez y no tuviera trabajo, te acompañaría... —Ana dejó el desayuno en la mesa. 

Joaquín entró a la cocina con unas cuantas bandejas en su mano y saludó.

—Que horrible día. —se quejó —hace mucho calor y algunos nobles están como locos.