asking polite with a gun in your hand (TRADUCCIÓN SUPERCORP)

CAPÍTULO 25

*Todos los créditos a la autora original.*

Nuevo año, nuevo capítulo. Espero que lo disfruten.❤

La luz gris se filtraba a través del espacio entre las cortinas corridas, el estruendo de los coches que pasaban no era más que un zumbido ahogado fuera de la ventana, y la habitación estaba cómodamente cálida cuando el radiador crujía, infundiendo calor en la habitación mientras Lena yacía debajo de las mantas. Estaba completamente despierta, aunque sus ojos ardían y todo su cuerpo se sentía cansado. Había dormido en algún momento, después de haberse agotado llorando en los brazos de Kara, e Imra había venido y se había llevado a Laurel a su habitación para jugar con algunos juguetes. Aturdida, había mirado a Kara con incredulidad, casi incapaz de creer que estaba allí, pero luego, por supuesto que había venido, porque era Kara, pero Lena la había deseado tanto y se sentía casi demasiado bien para ser verdad. Convencida para irse a la cama, se había acurrucado junto a su mejor amiga, reprimiendo los sollozos entrecortados mientras extraía el reconfortante calor de Kara, inhalando su perfume y dejando que sus párpados se cerraran mientras los suaves dedos acariciaban su cabello.

Se había despertado hacía un rato con el gris de un amanecer invernal, un vacío dentro de ella y una sensación de plomo en su cuerpo, hasta que se movió y miró a Kara. La rubia estaba durmiendo, los ojos moviéndose de un lado a otro debajo de los párpados cerrados, los perfectos pucheros de labios entreabiertos, sus rizos rubios extendidos sobre las almohadas, y Lena había sentido un baño de calor en su estómago, manteniendo a raya la frialdad adormecedora. Un nerviosismo brotó en su interior mientras veía a Kara dormir, acomodándose de lado, observando la forma en que las sombras abrazaban la curva de su pómulo, hacía que sus pestañas proyectaran largas sombras sobre su piel dorada y la forma en que sus labios se estiraban hacia arriba. Una sonrisa cada pocos momentos, como si estuviera soñando con algo divertido. El estómago de Lena dio un vuelco ante la sensación de nerviosismo, su corazón se tambaleó levemente ante la repentina oleada de amor que hizo notar su presencia. Ahora ella podía nombrarlo, era tan obvio. ¿Con qué frecuencia había sentido esa misma sensación de torsión en el estómago? La sensación revoloteadora como mariposas atrapadas en su estómago, el calor que vino con la avalancha de regreso que recibió al mirar a Kara y ganar una de esas tiernas sonrisas que llegaron tan rápido. Quería reírse de lo estúpidamente ingenua que había sido, de lo ciega y desdeñosa, de lo ajena a todo. En diferentes circunstancias, tal vez se hubiera reído, pero ella simplemente se quedó allí en silencio, sus labios presionados en una delgada línea mientras su rostro estaba lleno de dolor, la calidez que vino con la prisa del regreso a casa que recibió al mirar a Kara y ganar una de esas tiernas sonrisas que llegaron tan rápido.

Por supuesto, ella sabía que nada era diferente entre ellas. Lena había asumido que Querl había informado a Hank, que había enviado a Imra a Londres para continuar la investigación, y enviar a Lena de regreso, e Imra había tomado a Kara en busca de apoyo moral, sabiendo que ella era el consuelo que Lena necesitaría. No significaba que las cosas hubieran cambiado porque Lena había descubierto sus sentimientos. Con un sentimiento amargo, se quedó acostada allí mirando a su amiga, y no pudo evitar ver el humor irónico en ella, que era una psicóloga en perfiles criminales, prediciendo los próximos movimientos de algunos de los nombres más importantes en la base de datos del DEO, y ni siquiera podía predecir que se enamoraría de su mejor amiga.

Era divertido de una manera espantosa, y nada gracioso también, porque podría haber tenido a Kara, pero no se había dado cuenta de lo que podría haber tenido en ese momento, y ahora estaba preocupada por la idea de que iba a hacer ahora. Comprendió cómo se había sentido Kara. Lena no podía admitir sus sentimientos y estropear la vida que Kara había creado mientras Lena se había ido, e incluso si le decía, si todavía elegía a Mike, entonces tendría que enfrentar el mismo rechazo que le había hecho pasar a Kara. Por el momento, ella no estaba en un buen lugar, sin que sus frágiles sentimientos y su débil esperanza fueran aplastados por su amiga, que no la había mirado con nada más que lástima en toda la noche.