HQ!! ━ [ᴱˢᶜᵉⁿᵃʳⁱᵒˢ ⁻ ᴵᵐᵃᵍⁱⁿᵃˢ ⁻ ᴼⁿᵉ ˢʰᵒᵗˢ]

Moment of care [IV] ✧*。

Hinata Shouyo - moment of care

Despertaste en la madrugada yendo directamente hacia el baño. Específicamente al excusado, soltaste esas pequeñas arcadas, para ceder por completo al vómito.

Era la segunda vez a la semana que vomitabas.

A la primera pudiste creer que fue algo que comiste. Ya que repentinamente, siempre descubrías que un nuevo alimento te caía mal. Tal vez algunos mariscos.

Siendo ya la segunda vez, de manera aleatoria, la cosa era mucho más sospechosa.

El pánico te invadió por unos instantes, tenías que descartar ideas ¿No es así?. Bajaste el agua del inodoro con desinterés ante su contenido. Estabas analizando que si no era por comida, entonces por qué era. Hace unos 6 años no le darías tanta importancia, después de todo, constantemente te enfermábas del estómago. Cosa en común con Hinata cuando éste se hallaba nervioso.

¿No te encontrabas bajo estrés en los últimos días? Quizás. Las clases podían ser estresantes, pero nada que te llegara a colapsar al borde de la ansiedad y enfermar del estómago. Menos para vomitar.

Otra vez ese pensamiento navegó por tu mente y el pánico regresó.

Hace tres semanas, se quedó contigo durante unos días, y en una de esas noches saludables para el cuerpo, no usaron protección. Fue algo maravilloso, el recuerdo del abdomen trabajado de Shouyo chocando contra el tuyo mientras gruñía en tu cuello te enrojeció la cara sacando una tonta sonrisa.

“Basta, concéntrate”.

Si ponías las cartas sobre la mesa, tu período era constante, no tenías retrasos de este tipo.

Pero ¿Cómo no lo habías pensado antes?

Te miraste en el espejo y te pusiste pálida pero no de náuseas. Si no del miedo.

Te terminaste de lavar la boca y la cara.
Regresaste al cuarto y te sentaste sobre la cama, viendo al infinito como el meme del gato disecado. No supiste en qué momento comenzaste a respirar entre cortante.

Si las posibilidades eran embarazo, no sabrías como manejarlo. Al menos no tu sola. Tampoco querías decirle a Shouyo sobre esto hasta que no lo tuvieras seguro. Menos ahora mismo que él no tenía mucho de haber llegado de Brazil. Sólo tenía cuatro meses. CUATRO JODIDOS MESES.

No, definitivamente no debías decirle.

Estabas en tu último año en la universidad, tu pareja recientemente había logrado entrar a la V-League, apenas lo veías los fines de semana. Vivías en un anexo rentado.

Antes de que colisionaras por tus propias mentes y hacerte bolita, estabas considerando hacerte la prueba. ¡Pero por supuesto que debías hacerte la prueba! No es una opción, es obligación.

La cosa es que debías de ir tu sola. Te ponía triste pensar que si estabas embarazada, todo te cayera como balde de agua fría.

La tensión que se generó en tu pecho te había empezado a sofocar.

Te tomaste los cabellos con brusquedad, buscando calma en lo que ahora era el tifón en tu cerebro.

Tuviste una idea por un momento y tus pupilas se dilataron. Tomaste el teléfono del rinconero, eran las 5 A.M.

Puede que si se encontrara despierto, te podría ayudar. Siempre estuvo ahí para ti Y sentiste que no tenías más remedio.

~

Estaban en la sala de espera del consultorio esperando los resultados del examen que te habías mandado a hacer el día anterior. No podías creer que él logró venir ese día solo para acompañarte. Agradecías el tener amigos como él o Kageyama que soportaran estos maltrechos de tu vida.