Teen wolf one shots

Sirenas

Cuando Derek tenía cuatro años su madre le dijo que jamás se acercará al lago que estaba en el bosque, cuando el pequeño pregunto por qué su madre le respondió con voz cariñosa

— cariño, en ese lago habitan unos mounstros, te atraen con su hermosa voz y cuando te tienen cerca arrancan tu vida.

Derek a sus corta edad empezó a tener miedo de esas criaturas marinas pero intrigado por ellas empezó a buscar cualquier cosa que le dirá una idea de cómo eran aquellas cosas.

— Tío Peter — el mencionado bajo el libro que leía y miro al pequeño — ¿Puedes ayudarme con algo?

— Estoy ocupado — él casi adolescente ignoro a su sobrino — Tengo tarea que hacer, si pierdo mi tiempo contigo tu mamá no me dejara ir a la fiesta de Cris.

— Por favor tío Pet — El chico de doce años suspiro con frustración cuando vio los ojos de su sobrino — Tu eres el único que siempre me ayuda, Lau dice que no puede ayudarme por qué está dibujando y Cora no puede ayudarme por qué está en la panza de mamá.

— Bien, pero me ayudarás a recojer las hojas del patio trasero.

Derek sonrió contento dejando ver sus dos huecos dónde le faltaban dos dientes, Peter vio al pequeño, al final siempre terminaba asiendo lo que si soborno quería.

— Dime que necesitas

— Mamá me contó de las criaturas del lago, pero no me dijo como se llaman — dijo subiéndose a la cama del mayor —. Además tampoco me dijo como podría reconocer una.

— Eso es fácil Der, esas criaturas se llaman Sirenas — Tomo el libro que traía el niño —. No debes fiarte mucho de ellas, la mayoría son malas.

— Han de ser muy feas — dijo sacando la lengua con asco — ¿Verdad tío Peter?

— No, son muy bonitas, pero solo por fuera del agua lo son — hizo una mueca —. Al menos eso dicen, todos los que se toparon con una sirena nunca regresaron.

Derek abrió sus ojos y miro asustado al mayor.

— ¿Ninguno?

— Ninguno, nadie sabe cómo escapar de esas criaturas — Peter tomo al pequeño y lo subió bien a la cama — Son criaturas con garras y dientes afilados, dicen que con un mordisco pueden arrancar una mano ¿Te dan miedo Derek?

— No — nego sabiendo que su tío podría escuchar su mentira — Soy un lobito no tengo miedo de nada... ¿Puedo dormir contigo?

El mayor asintió, metiéndose en la cama tomando la cobija para tapar a su pequeño sobrino.

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Cuando Derek cumplió los diez años a menudo se perdía por el bosque huyendo de su hermanita Cora que tenía 4 años, su mamá siempre lo regañaba pero el prefería los regaños a los mordiscos que su hermanita le daba.

A veces iba con Peter a sus entrenamientos de básquetbol o con Laura quien lo llevaba para presumir lo con sus amigas adolescentes.
Cuando Peter cumplió los 17 años su madre organizo una fiesta y Derek aprovecho su descuido para jugar en el bosque sin darse cuenta que se alejaba cada vez más de su casa, una vez que se canso de jugar busco el camino de regreso sin conseguirlo.

Camino por varios minutos quedándose quieto cuando escucho un bonito canto, busco la fuente del sonido adentrándose más entre los árboles, asustado retrocedió cuando llegó al lago que su madre le había prohibido, intento irse de ahí sin ser notado pero la criatura volteo en ese momento, Derek quedó asombrado de la belleza de la criatura quien también lo veía con los ojos abiertos, la sirena era un el.

— Me llamo Derek...

Los ojos ámbar de la criatura centellaron color dorado antes de sumergirse en el agua, de pronto dos pares más de ojos ámbar lo miraron, asustado se alejo del agua.

— Espera Cariño ¿Estás perdido? — una mujer salió del agua dejando ver si cola color azúl eléctrico —. No tengas miedo.

Derek intento controlarse sin poder hacerlo dejo ver sus ojos amarillos de lobo.

— Solo eres un cachorro — ahora salió un hombre de colar roja —. Pensamos que eras un cazador hay muchos por estos lados.

El pequeño lobo intento escuchar mentira en el corazón del hombre.

— Estaba jugando y me perdi.

— Descuida puedes quedarte con nosotros hasta que te manada te encuentre.

Un niño salió de las rocas dónde se había metido, dejándolo al descubierto, Derek lo miro fijamente notando como se sonrojaba.

— El es Stiles, tiene seis años — la mujer le sonrió al niño — Saluda.

— Hola ¿Tu nos llevarás con los tipos malos? — Derek le miro confundido —. Ellos se llevaron a los demás y solo quedamos nosotros tres.

— Calla cariño, lo asustaras.

Las sirenas le dieron una cálida sonrisa.

— ¿Tienes una manada? — el mayor le pregunto — No te preocupes ellos te encontrarán.

Derek quedó impresionado cuando el pequeño Stiles salió del agua y su cola se convirtió en unas piernas.

— Podemos esperar mientras tú manada llega...

El lobito asintió causando una sonría en el otro quien corrió asia el, una Claudia llamo a Stiles.

— ¿Que pasa mamá? Quiero jugar con Derek

— Tu ropa cariño...— Stiles miro su cuerpo desnudo —. Ponte ropa.

Que hay cachorros tiempo sin vernos (leernos¿) No olviden que si les gusta dejen su votito (si quieren)

También díganme si quieren una segunda parte, que realmente subiré después