-¿Por qué debería casarme con un alfa estúpido sin cerebro al que tendré que atender por el resto de mi vida?-el joven Taiga, se quejaba con su hermano y sirvientes más cercanos
-Joven Kagami, es verdad que lo hicieron sin su permiso pero es para su bien, lo mejor es aceptar y ya-murmuró Kuroko Tetsuya con su cara poker de siempre, este le miro bufando de brazos cruzados
-Hermano, cuanto antes mejor, puede que te guste y acabes enamorando te como me paso con Atsushi-dijo feliz Himuro Tatsuya, este le miro suspirando
-Se conocían de pequeños, era normal que pidiera tu mano como su omega y seáis pareja destinada-murmuró sacando su espada, golpeando un muñeco de pajas que tenía en su habitación. Koki se acerco con una caja
-Estas son las ropas, debe ir vestido elegante para conocer a su alfa-dijo dejando la caja en la cama, este asintió guardando su espada
-Si al menos pudiera seguir saliendo a la aventura por terrenos desconocidos-suspiro triste metiéndose en la bañera, los demás en la sala entristecidos salieron. Kagami Taiga era un joven indomable, no era un omega corriente que por las ferómonas se doblegaria ante un alfa, su espíritu era el de un tigre salvaje al igual que su marca en su cadera, un huella de tigre con una rosa azul cosa sorprendente ya que el muchacho era un joven pelirrojo con ojos del mismo color. Un rojo que llamaba la atención de muchos pretendientes pero Taiga los asustaba con sus duelos de espadas o al presentarse ya que era alto y robusto, no como otros omegas pero lo educaron como tal. Sabía cocinar, limpiar y cuidar de niños, las tareas de la casa lo hacía a la perfección aparte se sabía valer por si mismo en cualquier lugar
-Ya es hora-Kuroko entro y vio al joven vestido con un kimono casi negro que hacía destacar su pelo, sus curvas bien marcadas pues no era solo musculos toscos, sino bien formados dándole curvas preciosas envidia de muchas omegas y betas. Salieron los dos de la habitación dirigiéndose a la habitación principal donde esperaba su hermano y padre, Taiga respiro hondo y entró mirando a los presentes. Una familia de cabellos azules estaba presente, los señor y señora se levantaron sonriendo
-Es un omega único-dijo la señora feliz acercándose a Taiga, este hizo una reverencia sonriendo
-Daiki, levántate-le gruño el señor de cabellos azules a su hijo el cual estaba sentado mirando su espada. Al cruzar miradas los dos jóvenes sintieron un calor por todo el cuerpo, Taiga desvío la mirada calmando se apretando sus puños. Se sentó al lado de su padre y hermano
-Él es mi hijo menor, Kagami Taiga, es él último y más parecido a mi difunta esposa-sonrió apenado el señor pelirrojo, Daiki no dejaba de mirar al pelirrojo el cual evitaba su mirada de toda forma mientras los mayores hablaban. Tatsuya al darse cuenta codeo a su hermano haciéndole señales
-Me escuso por unos minutos-sonrió Taiga levantándose haciendo una reverencia, se marcho al baño lo más rápido que pudo
-Joven Kagami, su hermano me pidió que viniera tras de usted para ver su me necresitaba-Kuroko tras de él le miro, Taiga lo miro suspirando
-Es mi destinado... Pero es muy arrogante, callado y malhumorado-suspiro molesto-Pensé que sería mejor-se lavo la cara suspirando, Kuroko iba a decirle algo pero un golpe suave en la puerta lo devolvió a la tierra. Daiki se levantó siguiendolo, escucho todo sonriendo de lado
-Entonces, ¿arrogante, callado y malhumorado?-la voz resonó por el baño, Taiga lo miró sonrojado y avergonzado aunque era verdad no pensaba decírselo a la cara
-No es de caballeros escuchar conversaciones ajenas-murmuro Taiga intentando defenderse, este se rio divertido
-Si, si, no soy exactamente un caballero-sonrió acercándose a él, Kuroko salió dejándolos solos. El pelirrojo retrocedió cochando con los lavabos
-Bueno, debo volver-dijo Kagami esquivando lo y saliendo rápido, Aomine lo cogió del brazo negando. Un toque fue lo único para sentir ese chispazo, Aomine sonrió besandolo pegándolo a él sin soltarlo. Kagami se debilitó cediendo con las piernas temblando, era imposible que estuviera tan débil pero si, eran parejas destinadas y como Alfa, Aomine reclamaba a su Omega
-Eres mío, nada va a separarte de mí ahora que te encontré-gruño mirándolo, Kagami tembló al escuchar su voz, negó echándose para atrás
-Seremos parejas destinada pero jamás cedere ante ti, nunca-murmuró mirándolo, Daiki sonrió de oreja a oreja
-No quiero que cedas, quiero que me ames, me sigas a mis aventuras y vivamos más juntas, no quiero formar una familia ni un omega debilucho, quiero un tigre salvaje digno de mi apellido-enseñó su hombro dejando ver una pantera y una rosa roja, la cual brillaba. Kagami sorprendido se describió su marca dejando ver la rosa azul brillando
-¿No vas a dejarme en casa? ¿Irte y no volver?¿Dejarme con los niños?-Aomine negó acercándose, acarició su barbilla
-No quiero, por ahora, una familia, más adelante podría ser pero ahora solo quiero irme lejos con mi omega-este le miro sonriendo suave, asintió bajando la mirada pero Aomine subió su barbilla
-Jamás bajes la mirada, eres mi omega y la debes tener en alto-sonrió besandolo, Taiga paso sus manos por su nuca acariciando sus cabellos feliz y tranquilo. Salieron del baño felices, Taiga y Daiki encontraron lo que buscaron, una pareja que le seguirá a sus locuras, aventuras y será su apoyo incondicional.
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Aokaga Moth
FanfictionEs la primera vez que participio en este acontecimiento y eso que sigo a esta pareja desde hace muchos años. Espero estar a la altura de este reto y que os guste. Gracias al grupo Aokaga 5x10 (Aomine x Kagami) por dar una guía para este año.