GENDERBENDER

367 35 0
                                    

Toda la Kiseki no Sedai esperaba paciente que llegara su integrante fantasma

-Es raro que Tetsuya llegue tarde-murmuró Akashi mirando a la puerta

-Kurokochin, iba a buscar a Kagamichin-murmuro el pelilila comiendo sus snack, Tatsuya Himuro pareja y compañero de equipo del titan negó

-Taiga siempre es puntual, nunca llegaría tarde-dijo mirando su móvil preocupado

-No como otros-murmuro Momoi mirando a su amigo de la infancia

-Kagami no me dijo nada de que llegaria tarde, debería estar aquí ya-gruño bostezando, no era sorprensa que ellos estuvieran saliendo y hablaran a menudo pero aunque no lo dijera, Aomine estaba molesto por no poder ver a su pelirrojo y también porque Kuroko se lo haya quitado casi todo el fin de semana. Hoy domingo por fin lo vería y ahora tardaban

-Seguro tendrán una buena razón-dijo Kise abrazando a Kasamatsu Yukio, su senpai y pareja

-No te me pegues, Kise-murmuró avergonzado el pelinegro

-Koki, ¿contestaron?-dijo el emperador serio, el nombrado negó suspirando

-Seguro se fugaron jun-Midorima callo a su pareja serio, Takao murmuraba cosas molesto moviéndose

-Calllate, Bakao-dijo serio el peliverde

-Ahí esta Kuroko-todos miraron donde señalaba Koki. Era Kuroko pero venía con una pelirroja de brazos cruzados con el ceño fruncido

-Perdón la tardanza pero tuvimos un problema-dijo el fantasma sin expresión alguna mirando a su acompañante, todos estaban callados esperando una explicación

-¿Taiga? -Himuro se acerco a la pelirroja viendo el colgante en el cuello, la llamada le miro suspirando y asintiendo

-Si, soy Kagami Taiga-suspiro molesta intentando cubrir su nuevo cuerpo. Momoi pegó un grito sorprendids acercandose a la chica

-Enserio... Esto es imposible-dijo mirando Midorima, negó una y otra vez sin creer lo que veía. Takao comenzó a reirse asintiendo

-Eres un mujer, nadie lo creería si lo cuentas-sonrió suave, Kagami cada vez se molestaba más

-Ya con esto, me vuelvo a casa Kuroko-dijo seria caminando, Aomine que no habia dicho nada hasta el momento cogió a la chica del brazo negando

-No te he visto desde que Kuroko te robo en el centro comercial el viernes y quiero estar contigo ahora-dijo serio viendola-Me da igual si eres mujer, hombre o unicornio pero quiero estar contigo-Kagami se sonrojo sorprendido al igual que todos los presentes que veían algo poco común dicho por el bruto moreno.

-Aominecchi, eso fue profundo-se burlo Kise mientras cogía el balón

-Enserio, siempre sabes como joder los momentos-dijo su pareja negando-Pero tienes razón, juguemos, para eso vinimos-sonrió mirando a todos quitandole el balón al rubio

-Eso mismo, aunque Kagami no jugarás esta vez, no queremos arriesgarnos a herirte-este asintió sentandose con Momoi en un banco, Kagami comenzó a preguntarle varias cosas algo sonrojado

-¿De donde sacaron la ropa, Tetsu?-pregunto Aomine mirando a su novio, este le miro

-Alexandra, dejo ropa en su última visita pero no estaba completa-dijo yendo a jugar, Aomine miro sorprendido a Kuroko y giro la cabeza a su novio que le sonreía y animaba. Pasaron varias horas jugando hasta que empezaron a tener que irse

-Adios Bro, cualquier cosa me llamas-Himuro se despidió de Kagami sonriendo, Atsushi se fue con él

-Nos vemos chicos-se despedian Akashi y Koki, después se fueron Midorima, Takao, Kise y Yukio

-Vayamos al magi burguer-dijo la pelirroja tirando del brazo de Aomine, este asintio embobado sintiendo sus dos atributos

-Esta bien-Momoi se cogió del brazo de Kuroko y los cuatro fueron, al llegar había poca gente por lo cual era perfecto. Ya comiendo varios chicos miraban a Kagami y Momoi, Aomine con mala cara pegaba más a su pareja a él gruñendo por comentarios o murmullos

-De hombre ya atraias a pervertidos, y ahora es peor-murmuró molesto Aomine abrazandola

-Lo siento, Daiki-murmuró Kagami apenado, en verdad no le gustaba ser una carga para su novio pero no podia hacer nada con ese cuerpo tan pequeño y delgado. De medir 1.80 paso a 1.50, una cintura delgada, grandes curvas y atributos que la ropa no escondía. Después de un rato los dos se fueron al apartamento del pelirrojo

-Me quedaré contigo, no quiero que estes solo y te pase algo-murmuró avergonzado el moreno caminando hacia la casa del pelirrojo

-Gracias, Daiki-sonrió feliz pegandose a él, ahora siendo mujer podía acercarse a él sin que nadie dijera nada, en verdad era más cómodo en la relación

-No pienses estupideces-dijo Aomine abrazandola por los hombros-Cuando vuelvas a la normalidad podemos tener un cita con todos otra vez-sonrió mirandola, esta asintió feliz. Daiki no será el novio más cariñoso y atento pero en verdad se preocupaba por él, a su manera algo bruta y tosca pero eso era lo mejor, su amor era único.

Aokaga MothDonde viven las historias. Descúbrelo ahora