Aokaga Moth

MENOS MAL TU ERAS TRANQUILO

Un dia como cualquiera los ukes de la generación de los milagros iban a quedar para ponerse al dia, en verdad hacia semanas que no se veían y era raro ya que siempre estaban hablando

-Aomine, hoy iré con Kuroko y los chicos a tomar algo-aviso Kagami mientras arreglaba la casa, Aomine asintió perezoso

-Tengo turno en 2 horas, nos veremos para cenar-se levanto yendo al baño, Kagami asintió besando su mejilla

-Te preparare algo para que no tengas hambre toda la tarde-sonrió tierno derritiendo a su novio por millonésima vez. Desde el instituto ellos traían una relación no relación, era algo de sexo, baloncesto y algunas comidas juntos pero después de irse cada uno a seguir su vida y volver a encontrarse se dieron cuenta de que no podían estar lejos el uno del otro. Luego de eso empezaron a salir, dejaron el baloncesto profesional y comenzaron a vivir juntos como una pareja adulta y madura

-Me ducho y salgo-beso Aomine a Kagami pegándolo a él, el beso los dejo sin aire y con ganas de más

-Aomine-medio chillo Kagami con las mejillas rojas, es verdad que no eran la pareja perfecta pero en su nido de amor eran una pareja muy amoroso. Kagami negó metiéndose en la cocina, viendo a su pareja irse al baño riéndose, confirmo con Kuroko la salida y este le respondió con la hora y el lugar donde se verían todos. Es verdad que vivir en Japón no era su primera opción pero si la mejor, sus amigos estaban aquí, Kuroko se caso con Momo, algo que sorprendió a todos, Akashi Seijuro comenzo una relación con el chihuahua de Seirin, Koki Furihata primero a escondidas por el apellido Akashi pero a los meses eran portada de varias revistas. Midorima Shintaro se fue Suecia y volvió como un reconocido medico, también con una relación a distancia con su compañero de equipo Takao Kazunari, la pareja que salió a la luz nada más empezar su relación fueron Murasakibara Atsushi y Himuro Tatsuya del Yosen.

Ahora todos en sus casi 30 ya estaban viviendo juntos y pensando en sus futuros, en verdad nadie lo esperaba pero bueno, en verdad todos tenían renombre en el baloncesto pero volvieron a sus raíces con sus carreras universitarias realizadas. Sin darse cuenta Kagami ya llegaba tarde a su cita, beso a Aomine acariciando su mejilla

-Nos vemos en la noche-sonrió de lado a lado y salió corriendo, Aomine sonrió terminando su comida para irse a la comisaria. Ya con los chicos, Kagami los vio esperandolos en la puerta

-Casi te dejamos, Kagamicchi-se quejaba el rubio, Kise Ryota. Kagami sonrio negando

-Perdon, tenia que dejar todo arreglado para la cena, Aomine trabajo y...-se sonrojo un poco, su hermano le codeo divertido

-La vida de casado-se burlo Himuro a su lado, Kagami nego sonrojado

-Entremos-dijo Takao empujandolos-Quiero una buena cerveza y me cuenten sus activas vidas sexuales-dice divertido riendose

-Takao-kun-sonrojoda Koki negó queriendo irse, Kuroko le miro negando

-No te preocupes, Furihata-kun, no dejaremos que beba mucho-sonrió y entraron todos pidiendo una mesa y unas cervezas con algunos platillos para empezar la tarde. Ya como a las 9 de la noche Aomine salía cansado de su oficina, justo en la puerta se encontró con Midorima y Yukio los cuales estaban preocupados

-Chicos, que pasó?-los mira algo serio, Midorima le mira y Yukio se acerca a él

-¿Has sabido algo de los chicos desde esta mañana? Kise no responde y me tiene algo preocupado-dijo Yukio algo serio

-Es mayor, dudo que...-Midorima se coloco las gafas algo nervioso

-Salieron todos a comer, eso fue en la mañana y hasta ahora no he recibido mensajes ni llamadas de Takao-murmura intentando no expresarse mucho, Aomine miro su móvil rápido y vio un mensaje de Kagami, suspiro calmado leyéndolo. Se subieron al coche del peliverde y fueron al bar, Kagami tenía la costumbre de enviarle la dirección de donde iban a beber simplemente para guardar el sitio y poder ir con Aomine si la comida les había gustado. Llegaron al sitio y vieron a un pelirrojo hablando con el guarda de la puerta serio y molesto, un titan pelimorado a su lado calmado lo aunque serio

-Akashi-dijo Midorima haciendo que los dos lo miren, Akashi le miró serio

-Shitarou, Daiki, Yukio-san-sonrio, mira al guarda-Confirmaron mis sospechas, déjame pasar o quebrare este sitio en segundos-dijo molesto al guarda, este los miro algo preocupado pero negó

-Es un restaurante privado, club a estas horas y sólo pueden entrar los que tienen mesa-dijo el guarda serio y sin titubear. Aomine suspiro viendo el sitio, se rasco la nuca pues era verdad, era de los mejores sitios en la ciudad y su cartera no podría pagar nada aquí

-Mi pareja está dentro, necesito saber si están bien o muy ebrios-se acerco Midorima demostrando su preocupación, el guarda lo mira y suspiro

-Pasen, no hagan ningún alboroto-los dejo entrar, todos entraron y vieron a sus parejas siendo el centro de la fiesta y espectáculo. Kuroko estaba dormido en la mesa, se nota que había bebido demasiado por otra parte Kise bailaba sobre la barra con solo los pantalones puestos, Kagami aplaudía los bailes que hacia, Takao estaba subiendo en camiseta y calzoncillos acompañando a Kise en un baile. Himuro los veía casi desnudo al lado de Kagami riéndose de todo, Koki estaba mirando a todo dar vueltas mientras seguía bebiendo riéndose sonrojado con varias miradas sobre él

-Koki-dijo el emperador acercándose a él, este le miró sorprendido y sonrió levantándose torpemente

-Hola, Sei-sonrio embobado, una fulminante mirada alejo a todos del pequeño castaño. Murasakibara se acerci a Himuro algo molesto

-¿Por qué no tienes ropa?-le miró, recibió una sonrisa y un beso

-Oh, darling, viniste por mi? O quieres...? - lo último no se escucho bien pero hizo sonrojar al pelilila. Aomine se acerco a Kagami acariciando su mejilla

-Vamos a casa, Taiga-este le miró y asintió sonriendo

-Llevaremos primero a Kuroko con momo-murmura suave viéndole, dejó un suave beso en la mejilla el moreno asintió ayudando al peliceleste. Midorima y Yukio molestos con una vena en la frente bajaron a sus parejas cubriendo las con lo que tenían, Kise y Takao se reían dándoles besos y dejándose llevar. Salieron todos y cada uno tomó el rumbo a su casa, Aomine pidió un taxi y llevaron a Kuroko a su casa, momoi estaba preocupada de que no apareciera pero al verlo volver se tranquilizó, agradecio a sus amigos y esto fueron a casa. Ya por fin en casa, Aomine pensaba volver y dormir no tener que buscar a su pareja, al llegar Kagami parecía no haber bebido nada, tomó agua y se puso hacer la cena

-Déjalo, no quiero que te hagas algo, me ocupó yo-dijo Aomine acariciando su cintura, este le miró sorprendido y asintió

-Antes, tomemos un baño-dijo Kagami acariciando su mejilla, Aomine asintió contento yendo tras él. En el baño una cosa llevó a la otra y Kagami estaba montando a Aomine como loco, estaba muy excitado y no dejaba descansar a su moreno

-Más, Daiki-chillaba Kagami arañando los hombros del moreno aprentando su interior con fuerza. Aomine se dejaba duro como piedra viendo a su pelirrojo loco por sexo dejándolo seco y sin energías

-Pensé que eras tranquilo-gruño mordiendo su cuello apunto de terminar. Horas pasaron uniéndose sin descanso, cuando por fin Kagami quedó dormido Aomine estaba sin aliento y enviando un mensaje a su jefe de que mañana no podría trabajar, esa noche le costó un día de sueldo ya que sus pierdas y cadera estaban temblando apunto de colapsar pero al verlo dormido abrazado a él, no le importó el dolor simplemente verlo feliz lo era todo para él.