Flavio

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Samantha se levantó esa mañana con un mensaje de Maialen, quería ir a comer a un sitio nuevo, por lo que le dejaba la mañana libre para poder componer o hacer alguna cosa de las que tenía planeada, pero cuando estaba acabando su desayuno se acordó de la carta de Flavio que aún estaba guardada en el bolsillo de su chaqueta, no había sido capaz de leerla.

Le dolía la cabeza de haber estado llorando, tampoco recordaba haberlo hecho tanto, recordó haber llorado por ella, no por él, que también, pero sus lágrimas eran más de frustración hacia una misma que el hecho de no estar con él.

Se levantó y fue a buscar la carta perfectamente doblada. Samantha se tiró en el sofá... no sabía que iba a encontrarse, no sabía si le gustaría, si la dejaría peor, realmente no sabía que podía haber escrito el chico ya que Flavio nunca hablaba de sus sentimientos, pero cuando lo hacía era increíble, te dejaba entrar en su mundo, en su forma de pensar y te hacía sentir parte de él.

"Que estúpido me siento al tratar de buscar las palabras correctas hacía todo lo que siento, ¿acaso existen las palabras correctas? Creo que no, que nunca la habrá cuando se trata de lo que siento, porque nadie más que yo puede explicar todo lo siento."

Samantha rio y pudo imaginar al chico escribiendo esas palabras, era tan él, siempre pensando en que decir, pensando en las palabras correctas, ella no creía en eso, ella simplemente hablaba, aunque cuando se trataba de algo que le importaba demasiado pensaba en que decir, pero siempre le ganaba sus impulsos... eso la llevaba a tomar malas decisiones porque actuaba por impulsos... no obstante, actuar por impulso la llevó a estar con Flavio, no todo iban a ser cosas malas.

"Si me preguntan acerca de cómo me sentí cuando vi aquella noticia, probablemente no sepa que contestar, fue un cumulo de sensaciones... de no saber cómo reaccionar, que decir. Pero entre todos aquellos sentimientos que pudiera sentir, había uno que destacaba, la rabia... sentía rabia por el hecho que alguien se sintiera con el derecho de contar algo mío. No es la primera vez que alguien cuenta algo mío a la prensa, pero si la primera vez que cuentan algo que realmente me importa. Mi relación con Samantha fue importante, probablemente la relación más importante que he tenido nunca. Era ese tipo de relación en el que sientes todo y lo quieres dar todo, pero sabes poner límite. Una relación con Samantha es darlo todo sin perderte a ti mismo porque ella hacía que todo fuera así de fácil. Ella no era fácil, por supuesto que no, tenía sus momentos... pero de alguna forma, ella hacía que todo fuera fácil y que absolutamente todo valiese la pena."

La rubia volvió a reír y si lo tuviese al lado le hubiera pegado en el brazo... ¿cómo que difícil? murmuró para sí misma... de cierta forma lo era, ella lo sabía, pero sabía complementar todo su caos con la calma de Flavio, eso hizo que su relación funcionase perfectamente.

Pensó en el día de salió la noticia y en lo calmado que parecía... ella tenía ese nudo en el pecho que no se iba, pero él, él parecía estar calmado, aunque dijese que sintiera rabia así era Flavio. Se tomaba las cosas con calma y admiraba eso de él porque ella no podía hacerlo, en seguida la ansiedad aparecía... aunque ella sabía que tras esa calma había un mar con muchas tormentas, por mucha calma que tengas ante ciertas situaciones eso no quiere decir que no te afecten y ella había aprendido a leerlo, a leer cuando estaba mal, cuando necesitaba su espacio y ella siempre estaba cuando él lo pedía, así como iba a estar si él quería que estuviese.

Dio la vuelta a la hoja y continuó leyendo.

"Cuando vi que todo el mundo sabía que había tenía una relación con Samantha pensé en lo que pensarían, en lo que dirían... lo pensaba porque en ese momento no había querido leer nada. Ahora lo he hecho. La gente habla, por supuesto que lo hacen. Algunos no entienden en que momento pasó. Otros gritan y crean nombres de shippeos, así le llaman en internet... hay de todo un poco... realmente no me molesta, lo que molesta son las teorías que sacan de por qué terminamos, de si volvimos o no... no saben nada y odio que hablen, pero no puedo controlar lo que dicen, no puedo parar a nadie. Internet es un lugar muy grande donde puedes decir lo que quieras bajo el anonimato. Nunca me ha afectado lo que digan de mí, no me conocen... pero si me importa que hablen de algo que me importa. Sí, me importa mi relación con Samantha y aunque ahora mismo no estemos juntos, eso no quiere decir que haya dejado de importarme."

Remo a tu favorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora