Encadenados (FINALIZADO)

Familia

Mihael

Melody había recibido un disparo que por mucha suerte no llegó a darle en el corazón como pensé, pero la bala había pasado muy cerca de su pecho, menos mal que Nick consiguió extraersela, para ello tuvimos que quitarle el mono hasta la cintura, cosa que me incomodó pero Nick solo se fijó en sacar la bala de la pequeña y Matt desvió su mirada advirtiendo mi nerviosismo cuando la pusieron así.

Nos encontrábamos en una casa abandonada a la que me trajeron Nick y Matt, ellos estuvieron aquí antes, cuando escaparon, al menos teníamos un sitio donde escondernos y pasar la noche tranquilos.

Estaba sentado, apoyado en la pared mientras acunaba a mi pequeña entre mis brazos, no me separé de ella ni por un instante, besé cada centímetro de su rostro y acaricié sus mejillas.

-Perdoname...- Le dije a la vez que apoyaba mi frente sobre la suya y cerraba mis ojos.

-No te culpes tanto Mello...cuando despierte ya tendréis tiempo de hablarlo.- Le había contado todo lo sucedido con Melody a Matt y a Nick ya que les pareció raro que anteriormente estuviera todo el rato disculpandome con Melody.

-No Matt...todo esto es culpa mía, si desde el principio los hubiéramos quedado en la cárcel y no la hubiera obligado a escapar conmigo nada de esto estaría pasándole.- Dije decaído sin dejar de mirarla.

Se la veía tan hermosa cuando dormía, la mejor parte de su rostro eran sus carnosos labios entreabiertos levemente, sentía unas repentinas ganas de besarlos pero no me merecía aquel regalo divino.

-Eres lo único que tiene ahora.- Dijo Nick después de un largo rato en silencio, este estaba apoyado justo en la pared de enfrente con sus ojos cerrados.- Por muchas peleas de enamorados que hayáis tenido no te va a dejar de tener aprecio, los jóvenes sois así.- Se encogió de hombros.

-¿Y tú que sabrás?- Pregunté con el ceño fruncido.- Ella está enfadada conmigo por ser como soy...pero no puedo cambiar por mucho que quiera...

Además también porque le mentí sobre mí, tampoco quería que supiera que soy un segundón, aunque eso aún no se lo he contado.- Pensé.

-Creeme que sé bastante como funcionais, he tenido una hija y Melody me recuerda mucho a ella, son iguales la verdad, tienen la misma forma de ser y actuar.

Matt y yo mirámos a Nick fijamente, este abrió un ojo para mirarnos y luego el otro, Matt tomó la iniciativa.

-Por eso le tienes tanto cariño a Melody.

Nick asintió y miró a Melody, sonrió un poco para después mirárme a mí.

-Cuida la bien, no sabes el tesoro que tienes en tus manos.

Mostré una pequeña sonrisa ante sus palabras y acaricié la mejilla de Melody para después pasar el pulgar por sus labios con lentitud.

-Soy consciente de a quien tengo.

Melody

Todo a mi alrededor era oscuridad, todo lo que había sentido tiempo antes era un ardiente dolor en el pecho y de ahí todo se tornó frío y oscuro.

¿Esto es la muerte? Porque si es así es muy triste.

Vi una pequeña luz, ¿definitivamente estaba muerta y eso eran las puertas hacia el cielo?

Me acerqué a la luz lentamente hasta que llegué junto a ella provocando que mis ojos se abrieran rápidamente, aquella luz era la de los mismos rayos de sol que pasaban por mis ojos, cerré estos rápidamente para después entreabrirlos.