My Oh My | Noren

Maniac

Jeno suspiró, recostado sobre el pecho de Jaemin mientras sostenía una bolsa con hielo en su mejilla. En la cocina Mark hacia té porque en unos minutos llegaría Ten. Sí, Ten junto a Johnny y no sabia quién más pero Jaehyun le había dejado muy en claro la molestia de todos después de golpearlo en la mejilla.

— Tú sabes que soy tu mejor amigo y te amo —. Jaemin dejó su teléfono a un lado —. Pero eso no quita que seas un idiota, te lo mereces.

— No entiendo por qué todos están en contra de mi —. Se recargó más contra Jaemin ignorando las quejas de éste —. No sabía que Renjun era así. Demonios, me recuerda tanto a Daehwi.

Hubo un silencio incomodo por varios minutos hasta que Jaemin suspiró.

— Jeno, que Daehwi fuera un millonario psicópata que solo jugó contigo no significa que Renjun también lo sea.

Oh, Kim Daehwi, el niño participe de sus fantasías a los trece años. Jeno estaba pequeño y sus amigos hablaban de cosas en las que las hormonas de pre adolescentes se habían presentes y Jeno no pudo evitar fijarse en el mayor por un año y medio.

Claro que sólo fue cuestión de tiempo porque Daehwi era el hijo de los dueños de la mansión en la que vivían y para la que su madre trabajaba. Así que cuando Daehwi se entero a boca de los demás, le hizo la vida imposible pero también le hizo creer que le gustaba.

Y cuando Jeno tuvo su primer novia a los quince, Daehwi lejos y ya sin vivir juntos debido a la muerte de la madre de Jeno, enloqueció y trató de matar a Jung Jinsoul.

Sí, contrató a una persona para que chocara contra el auto de los Jung. Jinsoul duró una semana en el hospital, por supuesto que en ese momento ambos estaban pequeños, Jeno quería a Jinsoul con su alma porque ella siempre estaba ahí para él, incluso herida. Terminaron porque ella se había ido dos años a Japón y cuando regresó ya no la veía de esa manera.

Cuando vio a Jinsoul llorando fuera del hospital porque su padre casi muere en un accidente se molestó, pero se decepcionó cuando ella dijo que había sido Renjun.

No le había creído, se mantuvo firme cuando vio el desastre fuera de la mansión Jung pero todo se fue al carajo cuando Renjun admitió haber estado en casa de los Jung esa noche.

Dejó de pensar en ello cuando Ten entró al departamento con la misma aura de superioridad que daba cada uno de los Huang, se preguntó si secretamente compartía sangre con ellos.

— Vamos a hablar —. Ten se cruzó de piernas, quitándose los lentes de sol después —. Tú y mis puños.

Quién diría que alguien tan pequeño y delicado golpeaba tan fuerte.

— Jeno, no entiendo por qué no quieres regresar conmigo —. Jinsoul se cruzó de brazos, mientras lo veía desde la cama vestirse —. Ni siquiera querías hacerlo, ni lo hiciste con ganas.