No sé cómo lo hice para abrir la puerta de la habitación en la que se encontraba Adelina pero de alguna forma lo logré y de forma lenta y con un poco de miedo entre a la habitación, ahí estaba acostada en la cama, con vendajes y conectada a estas máquinas que muestran el pulso, me acerqué una silla a la cama y me senté al lado.
— Hola — me saludó Adelina en un tono de voz suave.
— Me asustaste — le dije en el mismo tono y con mi rostro de afligida.
— Lo siento — ella movió su mano con cuidado y me la puso en la mejilla— ¿Qué pasó? — Me preguntó ella, sabía lo mismo o incluso menos sobre el accidente.
— Un accidente de tránsito— no pude evitar bajar la mirada.
— El bebé... — ella estaba buscando una respuesta pero en definitiva no sabía cómo formular la frase y yo me limité a negar con la cabeza, porque tampoco sabía como formular una respuesta a la pregunta que ella estaba tratando de hacer.
— Lo siento — susurré casi inaudible.
— ¿Alejandra sabe? — me preguntó ella con la voz quebradiza y yo la mire.
— Está en la sala de espera, yo no le eh dicho nada, no es algo que me corresponda a mi hablar — le respondí con simpleza y creo que al final aquella era la decisión más sensata, si ella quería decirle a sus hermanas entonces que ella sacara el valor para hacerlo porque yo no lo hubiese tenido para decírselo a mis padres (En caso de que me hubiere pasado algo así a mi) y mucho menos lo iba a tener para decírselo a sus hermanas — Si quieres le digo que venga — me levanté de la silla pero ella me tomó por el brazo para evitar que me fuera y negó con la cabeza.
— Quédate conmigo un rato — logró decir sin llorar y yo me senté en la silla otra vez sin decir nada.
Me incline y apoye mi frente en el borde de la cama y me quede en esa posición descansando un rato, es que seamos sinceros, estaba cansada de una manera inexplicable y tampoco quería hacer un esfuerzo más grande del que ya estaba haciendo por mantenerme despierta más tiempo, Adelina se limitó a hacerme cariño en la cabeza y en ese momento me puse a llorar.
— ¿Qué hubiese hecho si te hubieses muerto? — no me atreví a levantar la cabeza, pero por algún motivo creí que hacer esa pregunta era buena idea sobre todo en aquel momento.
— Oye, tranquila no me pasó nada grave — claramente ella era más optimista que yo, pero en parte ya había entendido como era que ella se había sentido cuando yo me había desmayado.
— Ad, te fracturaste dos costillas y tienes un traumatismo en una pierna — le miré, también iba a soltar un comentario respecto al embarazo, pero no lo sentí correcto, ella a modo de respuesta soltó un suspiro.
— Oye no llores — No se si de pronto éramos las dos malas para consolar gente o el hecho de estar mucho tiempo cerca de mi le estaba afectando — Si me hubiese muerto, me hubiese gustado que continuaras con tu vida — yo tomé su mano que continuaba jugando con mi pelo — Lara eres una persona muy inteligente y no me gustaría verte mal o haciendo alguna estupidez por mi culpa, pudiste continuar con tu vida después de lo que pasó el año pasado, no es ningún misterio, estoy segura de que hubieses podido lidiar con mi muerte, pero si llega a pasar no quiero que pongas tu vida en pausa por eso no valdría la pena — en parte sonaba insensible mas ¿Cuándo le había importado aquello a ella? y yo negué con la cabeza — no te pongas a pensar en esas cosas ahora ¿Si? — Me preguntó y yo negué con la cabeza otra vez.
— Lo que pasó el año pasado es distinto — le dije bajando la cabeza y jugando con la mano de Adelina — el año pasado sabía que estabas viva, era cosa de prender la televisión y poner el programa de farándula y ahí estabas, pero esto es distinto Ad, ¿Qué hubiese pasado con la empresa de tu padre? ¿Y tu familia? ¿Qué hay de Laura y Jamal? — «¿Qué hay de mí?» pensé, yo seguía mirando la pálida y fría mano de Adelina — Ad hay gente que te quiere y hay empleos que dependen de ti, yo dependo de ti ¿Entiendes eso?, de saber si estás bien o no — mi tono de voz fue quebradizo, pero indirectamente y deseaba que no entendiera el trasfondo del tema, le estaba confesando que a pesar de ser su ex pareja aun no superaba lo poco que había pasado el año pasado entre nosotras — cuando supe que habías tenido el accidente lo único que quería es que fuese una broma de mal gusto te juro que rogaba para que fuera una broma, lo único que hice fue venir para acá apenas supe que estabas en este hospital, no, no lo pensé sabía que tenía que venir porque Ad si te hubiese pasado algo más grave y no hubiese estado no me lo hubiese perdonado — comencé a jugar con sus dedos de forma nerviosa — Porque te quiero y te juro que apenas llegó Jonathan yo ya me estaba preparando para matarlo, pero no lo hice — solté un suspiro y mire a Adelina que me miraba de forma atenta — por más que quería no pude, no pude ni mirarlo a la cara — dije esta última frase entre un susurro y un suspiro.
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Joyerías Izaro
RomanceSegunda parte de "La CEO" Luego de un tiempo distanciadas Adelina y Lara se vuelve a encontrar por asuntos de trabajo. ¿podrán ambas ser unas personas normales y apoyarse entre ellas en las situaciones mas complicadas? - No estabas cuando me desper...